Antes de platicarles del #QuesoyYoghurtGate, me quisiera presentar. Mi nombre es Arturo Ortiz Núñez y soy experto en marketing, publicidad y en insideout branding. Que, ¿qué es insideout branding? ¿cómo se come? Ya les iré platicando.

Hoy me quiero enfocar en el tema que está en boca de todos, o más bien que ya no estaré en boca de todos y sí me refiero al comunicado de la Secretaría de Economía que le ha pegado en su láctea madre a más de 10 marcas importantes.

Ahora bien, mi intención no es recordar, ni ahondar en la noticia per sé, más bien, quiero enfocarme en la mercadotecnia, en el famoso posicionamiento y en la reputación de marca que pega tanto como no poder vender por un tiempo, no sabemos si vaya a proceder o por cuánto tiempo, pero el daño ya está hecho.

Si están empapados al mundo de la mercadotecnia, sabrán que nos encanta inventar términos y prácticamente todos en inglés, así que no les extrañe y pido perdón por adelantado si más adelante, en este y en otras participaciones leen de mi teclado muchos anglicismos marketeros.

Siendo así, el meollo del asunto es que a marcas como Fud, Nochebuena, Zwan, Caperucita, Lala, Aurrerá, Philadelphia y Danone, entre otras son grandes perdedoras en temas de Brand Equity, Brand Resonance, Brand Reputation, o sea, les metieron un quemón.

Las marcas, pasan su vida joven y adulta buscando ser conocidas, recordadas y ubicadas en el top of mind de las personas y ojo, eso puede pasar para bien y para mal, lo que buscan las marcas o más bien, los humanos que gestionamos las marcas es que logremos ser eventualmente una Lovemark o sea, una marca amada, y eso no es fácil, debes ser amada y respetada para lograrlo, pero eso, es otra historia. Si bien, las marcas antes mencionadas tienen diferentes momentums, unas más reconocidas, otras mejor posicionadas, unas con mejor o peor reputación, pero ahora, todas, todas ellas, canceladas y tachadas de no cumplir con las normas, en otras palabras y leyéndola de otra forma, tachadas de mentirosas y tramposas y quizás, eso es lo que más les pueda doler.

Así pues, una vida de marca construyendo y de repente, en un comunicado tu percepción puede pasar de positiva a negativa en un santiamén, por un caso como este o por muchas otras controversias y vicisitudes que puede vivir una marca.

Ok, entonces ¿cuál es la lección? He escuchado a amigos molestarse por el tema, buscando una marcha para defender a philadelphia, entre muchos otros memes,y como marca debes estar orgulloso para que tus mismos consumidores te defiendan,  pero, fuera de quién es el culpable, y si el gobierno está siendo más o menos severo, ¿cuál sería tu reacción como marca? ¿qué dirías? ¿cómo te defenderías?