Si usted es de los que cree que Trump nos tiene contra la pared y que sus amenazas llegarán a niveles insospechados, pues déjeme decirle que no es así. La mayoría de sus chantajes son meras argucias políticas sin ningún fundamento legal y con poquitísimas posibilidades de consumarse. Con miedo, tendemos a ver a una hormiga del tamaño de un elefante.

1.- Este lunes se cumplió el ultimátum de 45 días que estableció Donald Trump al gobierno de AMLO para reducir el flujo migratorio proveniente de Centroamérica y no se acabó el mundo. De hecho, la relación bilateral luce con mejor forma y nuestro flamante canciller, Marcelo Ebrard, salió airoso de las negociaciones.

2.- Si bien, el migratorio sigue siendo uno de los grandes temas de campaña. El tono ácido, beligerante y amenazador ha tomado otro cariz, luego de la enorme oposición que se ha generado hasta en los sectores conservadores de Estados Unidos. Trump le bajó una rayita.

3.- Tampoco logró que pagáramos su ansiado muro y no sólo eso, ese tópico ya salió de su agenda de campaña rumbo a su reelección. También quedaron en ridículo las milicias que convocaron a una colecta en redes sociales para construir el muro de manera privada. Vaya, hay lugares donde no hay ni siquiera posibilidades de edificar una construcción de esa naturaleza.

3.- Ahora bien, después de la amenaza arancelaria, México logró reducir en 36.2% el flujo migratorio durante el último mes y medio. Pero no firmó un Acuerdo de Tercer País seguro, con el que nos veríamos obligados a quedarnos con todos los solicitantes de asilo (independientemente de la nacionalidad) de Estados Unidos y dicho acuerdo, ni siquiera figura en la agenda bilateral.

4.- El Imperio no logró someter a una pequeña nación como Guatemala a firmar un Acuerdo de Tercer País Seguro. La nación hubiera tenido que acoger a los solicitantes de los otros países del Triángulo Norte de Centroamérica (TNCA) y de otras nacionalidades que, de otra manera, ingresarían a Estados Unidos. Incluso el presidente saliente Jimmy Morales tenía previsto sostener una cumbre con Trump para signar dicho acuerdo, pero la corte constitucional del país bloqueó la idea del mandatario y EU se quedó chiflando en la loma. Trump ha continuado amedrentando al pequeño país con aplicar una prohibición, aranceles y comisiones a las remesas después de la negativa. Espero que no cedan al chantaje.

5.- Otra pifia ocurrió después de que el presidente estadounidense, Donald Trump, confirmó el pasado 12 de julio la puesta en marcha de redadas masivas para deportar a miles de indocumentados. El operativo, iba a ser oficialmente iniciado a finales del mes de junio, pero a último momento, el mandatario decidió postergar su implementación con el objetivo de no entorpecer las negociaciones entre el partido Demócrata y el Republicano.

6.- Si bien, se vivieron escenas de calles desérticas en Miami (Florida), Houston, Los Ángeles y San Francisco (California), Chicago (Illinois), Atlanta (Georgia), Baltimore (Maryland) y Denver (Colorado), dichos operativos masivos no se observaron por ningún lado. Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE, en inglés) buscaría primero a más de 2 mil inmigrantes que ya han recibido órdenes de deportación y que, en algunos casos, no se presentaron a las audiencias en los tribunales de inmigración. Pero la cifra fue de menos de 100 deportados.

7.- La realidad es que no hay suficientes agentes migratorios para hacer redadas en las ciudades. Se necesitaría medio millón de agentes para detener a los 12 millones de indocumentados que oficialmente viven en esa nación. A duras penas, pueden controlar el flujo de migrantes que están entrando por su frontera sur.

8.- No se deje engañar, la comunidad latina en ese país tiene un gran poder productivo y consumidor. Simplemente, la economía estadounidense no podría funcionar sin esa mano de obra que produce y consume y que no obtiene los beneficios, en términos de servicios de salud, educación, retiro y demás prestaciones, a las que tendría derecho.

9.- El fin de semana recibimos la visita del secretario de Estado de EU, Mike Pompeo, en la cancillería. Un hecho simple, pero significativo, pues demuestra que el dialogo se está restableciendo a alto nivel y no por la ventanilla trasera de la Casa Blanca, como ocurrió con su antecesor, Rex Tillerson.

10.- Como verá, Donald Trump encarna el pragmatismo puro. Sería el político soñado por Maquiavelo, al cual solo le interesa el poder por el poder. Su estrategia ha sido la más antigua de todos los tiempos, crear al enemigo y convencer a sus seguidores de que se trata de una emergencia nacional que sólo él resolverá. Para nuestra desgracia, desde su primera campaña eligió a México como su principal distractor.

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