Puebla en tres años, la pobreza sube, el ingreso baja
- Alejandro Chávez Palma
En Puebla cada día hay más violencia delictiva, más pobreza y una desbordada economía informal en tanto, la imagen urbana que a diario padecemos en el caos urbano citadino ha sido a costa del desarrollo social, también se ha sacrificado el Gasto en Inversión Social para mantener un alto gasto corriente con los 900 maestros comisionados del SNTE-PANAL.
El dilema no es gastar más como se dice ahora que, habrá más recursos del Fondo de Infraestructura Social Municipal aduciendo que “ahora sí, porque las reglas de operación son distintas”, sin embargo, en 2010 en Puebla se ejercieron unos 5 mil millones de pesos del ramo 33, con lo que se financia la obra del municipio, y ahora (2014) es del orden de poco más de 7 mil millones de pesos.
Pese al aumento de fondos no para el aumento de la pobreza y, muy por el contrario ésta sigue escalando hasta el deshonroso tercer lugar nacional, y que no variado durante la actual administración estatal.
Los datos duros siguen siendo contundentes: día a día en el estado de Puebla un promedio de 358 habitantes está ingresando a los estratos de pobreza y marginación. Es decir en la entidad poblana hay 15 nuevos pobres por cada hora o visto de otra manera, mientras en los seis años del gobierno de Mario Marín se logró que unas 250 mil personas dejaran los estratos de pobreza multidimensional (en el 2000 ocupábamos el 7° lugar y, en 2005 éramos el 5°) ahora las cifras apuntan a que van más de 300 mil habitantes que han entrado a la marginación.
Vale señalar aquí, que un factor más es la el estancamiento de la economía, más la cascada de impuestos que afectan al consumo e ingreso personal de la población.
Por otra parte se dice que hay financiamiento a las pequeñas y medianas empresas, pero en los índices de la Tendencia Laboral (ITLP)-(ENOE) sobre la pobreza, está continúa en ascenso, como lo muestra la gráfica del CONEVAL al cierre de 2013.Un dato que se sigue omitiendo de manera oficial. El magro ingreso no alcanza para obtener la canasta básica y, está es la causa directa del empobrecimiento.
Se estima por el autor que, entre 2014 y 2015 otros 100 mil poblanos podrían sumarse a la escalofriantes estadísticas que tienen ensimismados a los funcionarios pasados y presentes de la malograda política social del estado que lo único que han hecho es consumar a la inexistente política social como una auténtica fábrica de pobres.
En Puebla, las prioridades son los proyectos de alto rendimiento económico, no los proyectos sociales. Los programas federales y estatales no están funcionando y tampoco están disminuyendo la marginación y la pobreza extrema. La visión de los funcionarios federales y estatales, es muy corta, como “pobretologos” piensan que para enfrentar la pobreza, solo es cuestión de números e índices de CONEVAL.
La desigualdad social esta latente y mientras no se corrijan los grados de inequidad entre los diferentes sectores sociales, no habrá desarrollo en la entidad.
La pobreza es multidimensional y efectivamente tiene que ver con la evolución económica del país, sin embargo sigue presente entre nosotros, es lacerante, lastima e indigna. Cualquier argumento oficialista sale sobrando, se necesita actuar, dialogar, escuchar y ver a los pobres. Ninguna medida vertical y sin tomar en cuenta a la gente resolverá los altos grados de desigualdad. La gente necesita comer, tener ingresos, trabajo, educación, salud y una vida digna.
Opinion para Interiores:
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Profesor investigador de la Facultad de Economía, coordinador del Laboratorio de Pobreza y Marginación de la misma Facultad, y doctor en economía.