Son nueve los fenómenos delictivos que se han fortalecido o surgido en México:

Asesinato de niños y/o por niños: Este fenómeno se ha incrementado teniendo cada vez más menores de edad asesinados; otros se enrolan como sicarios de la delincuencia organizada.

Autodefensas de menores de edad: Han surgido grupos integrados por niñas y niños que son armados para servir en la defensa de sus comunidades ante los ataques de los delincuentes.

“Subsidio” del gobierno a la delincuencia: Muchos jóvenes se dedican a ser “halcones” de los grupos delincuenciales y a su vez como jóvenes consiguen un apoyo gubernamental, con lo que el gobierno federal termina “subsidiando” a la delincuencia.

Pueblo abastecido por la delincuencia organizada: La gente adquiere drogas, mercancías clonadas, armas, órganos humanos, pornografía de menores, vehículos robados, menores a la venta, hidrocarburos robados, especies en peligro de extinción y llega a usar monedas falsas; en cuanto a servicios obtiene: turismo sexual con menores, lavado de dinero, traslado de migrantes y lenocinio.

Narcocultura: Un delincuente dedicado al tráfico de drogas ilícitas puede llegar a ser rockstar del crimen, pues se le componen corridos y hasta llegan a ser los protagonistas de las series televisivas; este fenómeno alienta el delito.

Cárteles transformados en mafias: Algunos grupos delincuenciales junto al tráfico de drogas ilícitas ahora extorsionan “(derecho de piso”), son prestamistas o secuestran, por lo que ejecutan actividades ilícitas que son más propias de la mafia.

Control territorial: Junto al fenómeno anterior los delincuentes consolidaron el control territorial con retenes carreteros, extorsión a las actividades productivas y penetración en las instituciones de gobierno.

“Justicia criminal”: Han aparecido mensajes para que se mantenga el orden establecido por su grupo en un territorio, estos mensajes van acompañados del ajusticiamiento de miembros de grupos rivales que ejercieron algún tipo de violencia “sin permiso”.

“Estado paralelo”: El control territorial y las actividades delincuenciales tipo mafia son la muestra de que en el sitio donde opera un grupo delictivo se ha conformado un “estado paralelo” al Estado formal, llegando incluso al desplazamiento poblacional.

Estos nuevos fenómenos delictivos o en crecimiento, conforman un panorama de inseguridad pública, descomposición social y riesgos de seguridad nacional inéditos en nuestro país.

Charles Dickens expresó: “El número de malhechores no autoriza el crimen.”