Por un discurso de la verdad

  • Raymundo Alfaro Pérez
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México se encuentra en una encrucijada, continuar en las siguientes décadas con un modelo de gobierno implementado por el PRIAN, y ahora sumado el PRD a través de su dirigencia chuchista para que mediante un Pacto nefasto y anticonstitucional se siga estrangulando el presente y futuro de los mexicanos. O preparar la conciencia social para llevar al poder a verdaderos patriotas que simple y llanamente cumplan con lo mandatado en nuestra Carta Magna y así cumplir con el principio Juarista de que; “El servicio público es para ennoblecerse y no para enriquecerse”. Es por esta razón que la construcción del Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA), el cual está en proceso de convertirse en Partido Político Nacional, representa un paradigma político alternativo para poder acceder al poder y así evitar se siga amputando la esperanza de vivir con derechos sociales emanados de la lucha de nuestros antecesores que le apostaron al riesgo de concebir la existencia como una oportunidad para comprometerse a cambiar la realidad que les toco vivir.  

Una reforma necesaria que le daría rostro a los cambios que el país necesita, es la de fundar un discurso de la verdad, que provoque el debate nacional para enfrentar las mentiras que nos cargan desde el poder político neoliberal, y de esa manera enfrentar a los que impulsan falsas reformas diseñadas por funcionarios, muchos de ellos, seres que nunca en su vida han pisado una clínica del IMSS o ISSSTE, y que de igual modo nunca recibieron educación en una escuela o institución pública, y se nos muestran desgarrándose las vestiduras por la falacia del discurso de la llamada calidad educativa, responsable de la exclusión de miles de jóvenes de recibir instrucción escolar. Es urgente promover el análisis del discurso que utilizan los emisarios, al servicio de los más oscuros intereses, y que siguen pensando que tienen la verdad absoluta, y que por ese solo hecho consideran a sus reformas; llamadas “estructurales” la puerta casi, casi al paraíso. Mientras los diversos infiernos en inseguridad, desempleo, corrupción nos hacen desvanecer la confianza en el mañana.

Tan solo en el rubro de la seguridad social en México, hay que decir que ya desde hace tiempo se viene culpando a los trabajadores de los problemas financieros del IMSS, y se recurre a un argumento embaucador, en el sentido de que salen muy caros los trabajadores en activo y pensionados y ello se refleja en la deficiente atención de la derechohabiencia. Muy parecido al discurso que se utilizó y se sigue empleando en el sentido de que los únicos responsables del rezago educativo en México son los maestros, a los cuales hay que presionarlos con una reforma punitiva para violentar sus derechos laborales y así lograr tener una educación de calidad.

Una gran mentira que se implementó en el sexenio de Felipe Calderón en materia de seguridad social fue el fraudulento “Seguro Popular”, el cual solo se abocaría a brindar servicios médicos esenciales, sin que esto respondiera a las mejoras en la atención de los pacientes, este Seguro Popular nació con la idea de universalizarse a todo el país, y lo cierto es que se ocupó más por una excesiva afiliación, la cual ha saturado a las dependencias que entraron a brindar este servicio de salud pública, ocasionando que no se tomaran en cuenta las condiciones de infraestructura, de personal médico y enfermeras; profesionistas que en muchos casos se encuentran contratados de manera irregular. Lo grave del caso es que la actual administración federal se dispone, bajo el pretexto de la universalización del Seguro Popular, crear un sistema nacional de salud donde se le dé el tiro de gracia a una Institución que es orgullo de México en materia de seguridad social como lo es el IMSS.

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Raymundo Alfaro Pérez
Originario de Puebla. Casado y padre de cuatro varones. Abogado, Notario y Actuario. Egresado de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales BUAP. Maestría en Ciencias Políticas BUAP. Doctorado en Derecho BUAP