Estamos entrando a la fase 3 de la emergencia epidemiológica, la etapa más crítica debido a la propagación de contagios, la curva en ascenso del virus será un crecimiento acelerado, lo que será proporcional al aumento de la violencia machista en el hogar –violencia intrafamiliar- a causa del confinamiento social. La SEGOB, confirma que se dispararon las llamadas de auxilio de violencia intrafamiliar del 30 al 100% en la línea 911, sin embargo, no hay un modelo nacional gubernamental de atención integral a las víctimas para que los agresores salgan de casa. El Nobel Albert Camus, describe en La Peste que “las peores epidemias no son biológicas, sino morales”, el valora en su justo precio las contradicciones de los comportamientos humanos, que buscan la necesidad de un calor que los una, pero que abandonan esta idea por la desconfianza que los aleja a unos de los otros, debido a las epidemias morales.

El aislamiento en la cuarentena no es igual para todos, ya que persiste la desigualdad de género. Como solución inmediata la SEGOB, habilito el programa “Puerta Violeta” que es una estrategia municipal para brindar atención a mujeres, niñas y niños, que sufren maltrato familiar durante la contingencia del coronavirus. Este proyecto está activo en Nuevo León, San Luis Potosí, Estado de México y Michoacán. En el Municipio de Puebla no se ha habilitado, la Secretaria para la Igualdad Sustantiva de Género en el Municipio, canaliza a las mujeres víctimas de violencia a los Centros de Justicia para las Mujeres, así como al Alberge Municipal y al Alberge del Sistema Estatal DIF. En Jalisco activaron el Código Violeta como plan estatal emergente de prevención de violencia familiar en la contingencia. Estos proyectos se activan a través de una llamada al #911 y #TelMujer en los estados.

El New York Times en su reciente artículo “Una nueva crisis de la COVID-19: aumenta la violencia doméstica a nivel mundial”, detalla el oportunismo de abuso doméstico, generado por las restricciones sanitarias de la pandemia, que condiciona a las mujeres a permanecer en casa confinadas con sus agresores. A nivel mundial, las líneas de atención telefónica se han disparado con denuncias de abuso sexual, violencia familiar de menores y violencia doméstica. El artículo hace referencia a un –confinamiento y terrorismo intimo- que se replica en todo el mundo, casos concretos en EU, China, España, Italia y Francia, donde la violencia doméstica  es una constante. El aislamiento en los hogares, aunque es vital para resguardarnos del virus, ha dado poder absoluto a los agresores, por lo que el peligro intensificará al igual que la crisis de salud. 

En Twitter Antonio Guterres Secretario General de la ONU, nos alerta del terrible aumento de violencia machista en el mundo, “Les pido a todos los gobiernos a que le den prioridad a la seguridad de las mujeres mientras responden a la pandemia”, esto es un llamado a los gobiernos para implementar una Agenda Global de Género contra la violencia domestica durante el COVID-19, pero si los gobiernos,  no están preparados para enfrentar la pandemia, mucho menos están implementando medidas con perspectiva de género sobre salud pública, solo han improvisado acciones, no hay mecanismos eficaces para ofrecer asistencia jurídica a las víctimas de violencia de género. José Saramago en Ensayo sobre la Ceguera, nos habla sobre una extraña epidemia de ceguera que aqueja a un país, donde todos se quedan ciegos, porque creen que están ciegos, y en consecuencia no hay una acción para prever todas sus consecuencias porque nunca pensaron en ellas.

No hay una ruta clara, la  SCJN extiende el plazo de suspensión de actividades jurisdiccionales al 5 de mayo, por lo que las agencias del MP, juzgados del Poder Judicial y Fiscalía del Estado, continúan en la rutina de guardias, activistas y mujeres se preguntan ¿Cómo obtener una orden de protección para una mujer en riesgo de violencia durante esta emergencia nacional? Las medidas de prevención y atención para las mujeres víctimas de violencia están limitadas  a los procesos de procuración  y administración de justicia durante este periodo, tampoco hay un programa emergente de las Agencias Especializadas en temas de violencia de género. La solución inmediata, es lo implementado esta semana en la Fiscalía General de Coahuila, se efectuó por primera vez en México una Audiencia Virtual de Procedimiento Abreviado por delito de violencia familiar durante la cuarentena, que dictó sentencia de 4 años de prisión  y multa de reparación del daño, esto se llevó a cabo en una aula virtual del Centro de Justicia Penal del Poder Judicial de Coahuila.

Se requieren implementar medidas extraordinarias de #SanaDistancia con los violentadores en la emergencia nacional, la Red Nacional de Refugios y  diversos grupos feministas se manifiestan en las redes sociales “las Mujeres y Niñas no mueren de coronavirus, las matan en sus casas”, es necesario una campaña mediática contra los agresores de género en el Coronavirus. La UNAM y el Instituto de Investigaciones Jurídicas, han elaborado una Guía jurídica por afectaciones derivadas del COVID-19, para dar orientación legal a problemáticas de violencia intrafamiliar de manera transversal. El objetivo es proteger la vida de las mujeres durante la cuarentena, otro ejemplo es Campaña #NoEstasSola en contra de la impunidad de violencia familiar y de género en este periodo, iniciativa  del Consejo Ciudadano de Seguridad Pública y Procuración de Justicia de la Ciudad de México.

El coronavirus provocará una gran recesión económica, que devastará la economía nos indica el FMI, pero de igual manera la ONU señala que “en las últimas semanas, a medida que las presiones económicas y sociales aumentan y el miedo se apodera de la población el mundo ha visto un terrible aumento de violencia doméstica”, lo que deriva en una constante, del incremento de violencia de género, el virus está devastando a la economía, pero también está infectando las esferas familiares en una crisis social que sin duda se volverán mucho más frecuentes.

En Puebla, estamos a nivel nacional en la posición 3 de más casos confirmados con COVID-19, en 2 lugar de feminicidios y violencia familiar y registramos el Feminicidio no. 47 en lo que va del año,  la cuarentena se prolonga y los números se incrementan, vivimos en El amor en los tiempos del cólera de Gabriel García Márquez, vivimos, además, en un tiempo en que todos los conflictos tienden a intensificarse,  las situaciones de violencia ocurren en la esfera familiar, vivimos en un lugar donde por la mañana  se escuchan las campanas de la Catedral, en una ciudad donde no queremos descubrir al amanecer cadáveres ya sea por muertes victimas del virus o de violencia feminicida.