¡Capitán Puebla!
- Elmer Ancona Dorantes
Mira, mi querido Lalo, no sé por qué pero cada vez que te veo me recuerdas al “Capitán América”; no soy experto en comics, mucho menos en súper héroes, pero eres una copia fiel de ese gringuito que trae a todos de cabeza.
Él es güerito, tu eres moreno –pero no de Morena-; no obstante, los dos tienen un escudo protector que les da un poder exagerado; tanto a ti como a él los ha sacado de serios problemas; el escudo de él es de vibranium, el tuyo es de yunquium (creo).
Sus enemigos también son tus enemigos (algo así le dijo Salinas a Zedillo), pero tanto tú como el gringuito se caracterizan por darles en la mitra cada vez que pueden y quieren.
Los dos capitanes tienen los sentidos bien despiertos; sólo una vez “Cráneo Rojo”, “Barón Sangre”, “Sociedad Serpiente”, “Galactus”, “Thanos” e “Hydra” te agarraron bien dormido, medio apendicitis; te llevaron al baile, te cansaron, te metieron a la congeladora, pero la libraste.
Por estrategia te metieron en un trozo de hielo por largo tiempo, pero terminaron por despertarte porque podías servir a sus intereses; eso te fortaleció, aunque cuando abriste los ojos no sabías ni dónde carajos estabas.
Mi querido Lalo, tanto tú como el “Capitán América” tienen la responsabilidad de ser “súper soldados”; él del Ejército Norteamericano, tú del Ejército de… (eso dicen). Debe ser una excelente milicia.
Chris Evans fue diseñado como un súper soldado patriota, en lucha permanente contra las potencias del Eje de la Segunda Guerra Mundial; tu guerra es diferente, medio confusa, medio extraña (a veces te alías con tus propios enemigos) ¡Qué formas más raras de combatir!
Mira, el “Capitán América” aparece siempre junto a sus aliados “Iron-Man”, “Spider-Man”, “Ant-Man”, “Hulk”, “Thor”, “Soldado del Invierno”, “Ojo de Halcón”, “Wolverine” y “Los 4 Fantásticos”.
Tú el fin de semana apareciste junto al “Doctor Cerebro” (algunos le dicen el “Rector Américas”); también tiene poder, fuerza, entendimiento, lucidez, con alta capacidad para derrotar a cualquier atrabancado revolucionario.
Mi querido Lalo, no importa que hayas aparecido junto al buen “Enri” demasiado tarde -bueno, siempre es buen tiempo para las buenas causas-; el chiste es que lo hiciste con toda tu alma, con toda tu fuerza, con todo tu corazón.
Tú no andas con simulaciones como otros, que se dicen azules y se disfrazan de ocre; que se dicen “vengadores” pero en realidad son “invasores”; no eres como esos que andan en constante búsqueda de poder en extrañas galaxias. Ni modo, así fue su creador, que en paz descanse.
Al igual que Chris Evans, mi querido Lalo, ustedes dos fueron creados en un tiempo en que la sociedad necesita de “nobles figuras” aunque no haya guerra; pero como dicen los expertos en comics, “todo el mundo sabe que vamos a tenerla” (creo que en dos meses).
Por esa razón nació el “Capitán América”; por esa razón surgió el “Capitán Puebla”; para acabar con los enemigos que, por cierto, están barriendo con todo lo que se les pone en frente.
Recuerda que cuando la gente pidió el regreso del “Capitán América”, en 1964, inspirados por las numerosas cartas y peticiones de sus seguidores, Lee y Kirby lo incorporaron al Universo Marvel.
Lo mismo pasa contigo, mi estimado “Capital Puebla”; tus múltiples seguidores –y vaya que los tienes- exigen tu presencia como héroe de una época igual de temible, donde se lucha por encontrar la propia identidad en tiempos de intensos cambios sociales.
Mira, mi querido Lalo, el chiste es que las historias de vida de los dos capitanes se van entrelazando, se van entretejiendo de tal forma que terminan por ganar las batallas más complejas que les pongan enfrente (aunque a veces parece que las pierdan).
Esta confrontación, batalla o guerra que tienes hoy como reto principal no se ve nada fácil, pero con tus súper poderes podrás vencer a los que presumen de invencibles.
De tu lado están los “soldados aztecas”, los “naranjos mecánicos”, los “desarraigados” (esos que salen huyendo de sus propios infiernos políticos porque no creen más en tantas mentiras).
Mira, mi querido Lalo, entre tú y Chris Evans no hay tanta diferencia, créeme; entre la feroz Scarlett (mi pequeño bombón) y tu hermosa morena –pero no morenista-, tampoco. Los dos se dan un tú por tú ante ellos.
A ti se ha unido el famoso “Batallón de la supervivencia”, los “Primero muertos que jodidos”, los “Nunca muero, aunque apeste tantito”, los “Hoy estoy, mañana quien sabe”, entre otras hordas de fieles combatientes. Todos son buenos de mente y de corazón. No te asustes.
Como bien dices, ya se fueron los oportunistas, ahora hay que cerrar filas ante tanta desgracia, ante tanto desencanto, ante tanta demagogia y sinrazón. Sólo tú, “Capitán Puebla”, podrás conducirlos a un mejor destino.
Tienes razón cuando dices que son tiempos para “reordenarse”, para “oxigenarse”, para trabajar por una “nueva visión de futuro”; me cae que esas frases ni la agencia S.H.I.E.L.D las hubiera inventado ¡Eres un cañón, mi querido Capitán Puebla!
@elmerando
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Periodista y analista político. Licenciado en Periodismo por la Carlos Septién y maestro en Gobierno y Políticas Públicas por el Instituto de Administración Pública (IAP) y maestrante en Ciencias Políticas por la UNAM. Catedrático. Ha escrito en diversos medios como Reforma, Milenio, Grupo Editorial Expansión y Radio Fórmula.