La muerte y la doncella
- Atilio Peralta Merino
Renata era madre de una bella jovencita dotada en extremo de gracia y donosura, una noche de septiembre, como todas las noches, la chica se dirigió a su alcoba para descender a las regiones cavernosas del sueño de las que no volvería a retornar nunca más; privada de toda conciencia durante semanas y meses, oscilando, por una parte, entre una serenidad que hacía rememorar a todo aquel que la hubiese contemplado en el legendario personaje de los relatos infantiles, como si estuviera en espera de un príncipe de corazón puro y limpio que al besar sus labios rojos y carnosos la despertase súbitamente del estado de letargo en el que se encontraba ; y , por la otra, acometida por terribles convulsiones al momento en que de manera desesperada, los allegados y los médicos que la asistían trataban de despertarla.
El incesante fluido de electricidad generado en su tejido neuronal por algún padecimiento que jamás lograría ser diagnosticado por los médicos, impediría el ascenso a la vigilia de la hermosa niña; finalmente, una vez conocida la terrible noticia del deceso tras ser comunicada por el responsable del área de neurología del hospital donde estuvo internada, la hija de Renata fue cargada en hombros por obispos y embajadores, y seguida por el pueblo entero todo cubierto de flores el día en que se llevaron a cabo sus exequias
Anselmo se había venido despeñando como colaborador editorial de periódicos y programas de radio, convirtiéndose al paso de los años en un profundo conocedor de los tópicos que conforman la historia oculta del país: guerrillas, bandas criminales, policías, marinos y militares con sus respectivos anecdotarios; así como demás sujetos y episodios escabroso y sórdidos.
Los sacerdotes de Eleusys en los albores de la antigüedad clásica, habrían descubierto los efectos hipnóticos, somníferos y alucinantes que produce el hongo del centeno , y, a lo largo de generaciones enteras, conformaron rituales a los que se veían sometidos los hombres sabios que anhelaban iniciarse en sus misterios; en tal tesitura, las artes adivinatorias , al decir de la escuela pitagórica, se cultivan mediante el sueño y el ensueño, la embriaguez y los estados alucinados, la pasión frenética y la exaltación del ánimo.
“Nadie da lo que no tiene”, habría dicho a principios del siglo XII un homónimo de Anselmo, Santo Doctor de la Iglesia de Roma, quién a su vez también afirmaría que “no pudo el hombre haber extraído de la naturaleza las nociones concernientes a la perfección, la inmutabilidad y la eternidad, por lo que tales conceptos tuvieron que ser formulados a partir de un ser ajeno a la naturaleza misma y que a su vez estuviese dotado de tales características o condiciones”; de la revelación o la intuición de los sucesos por venir, nada sin embargo habría dicho San Anselmo ni Padre o Doctor alguno de la Iglesia.
Fue, precisamente a partir de haber asistido a los dramáticos funerales de la hija de Renata, cuando de manera inusitada y sorprendente se despertaron en Anselmo los más intrincados dotes proféticos.
GUERRA CONTRA EL VIENTO
Por aquellos días, el presidente había dado la orden de que las fuerzas armadas del país se encargasen de combatir a la delincuencia, medio siglo atrás, López Mateos habría dejado entrever su intención de declararle la guerra a Guatemala: las guardas de élite conocidas con el nombre de “Kaibiles “ habrían disparado contra balseros mexicanos que navegaban por el Usumacinta en aguas nacionales y la opinión pública se alistó en la época, para, de manera unánime, condenar a un país en el que la infamia imperaba a grado tal, de que la seguridad pública habría sido encomendada nada más y nada menos que al ejército; cosas curiosas de la vida, sesenta años después de haber tenido verificativo aquellos sucesos, la misma abominación infame se vivía entre nosotros sin que los comentaristas dijeran absolutamente nada al respecto.
Las actividades criminales comenzaron a desbordar la vida nacional en la época de los conflictos armados en Nicaragua, un representante por el estado de Massachussets habría logrado que el congreso de los Estados Unidos adoptara la denominada “Enmeinda Boland” que prohibía a la “Casa Blanca” aportar recursos a la fuerza beligerante que combatía al gobierno establecido; Bill J. Casey como director de la CIA , inició entonces una serie de acciones que estarían destinadas a cambiar la fisonomía del planeta o, al menos la del hemisferio americano , y que, ciertamente, repercutirían de manera trascendente en la vida de México, a grado tal, de cambiar para siempre su composición social y política.
A lo largo de tres décadas la opinión general habría señalado a Rafael Caro Quintero como el autor deliberado de la muerte de un agente antinarcóticos del gobierno de los Estados Unidos llamado Enrique Camarena Salazar, hasta que, repentinamente, diversos funcionarios del departamento de estado terminarían por señalar que la realidad de los hechos habría sido muy distinta a como se nos había hecho creer a lo largo de toda una generación; su secuestro, tortura y asesinato, así como el posterior desecho de sus despojos mortales en el Rancho de “El Mareño” , habría sido decidido por las mismas personas que promovían una guerra clandestina en Nicaragua; en consecuencia, un suceso que transformaría la vida de México descansaría sobre bases y premisas que resultaron a la postre totalmente falsas.
Estamos hechos, sin saberlo, de la misma sustancia de las ilusiones y, acaso , no seamos en realidad más que un sueño soñado por un mago o por una dulce y encantadora niña como la hija de Renata, quién, en su repentino despertar , a no dudarlo nos precipitará abruptamente a todos a la sombra y al olvido, mientras que lo que hemos conocido de tiempo atrás se desvanecerá del todo por los aires.
LA TRAGEDIA EN ESCENA
La noticia de que don Facundo había sido detenido por elementos de la policía federal militar, bajo la endeble acusación de haber protegido al cártel de los hermanos Beltrán Leyva llegó con los primeros días de la primavera al unísono de que , con sus auras , los radiantes rayos del sol abrileño daban un dulce alivio a las almas enfermas y, con él, la sensación de la convalecencia.
Anselmo conocía de tiempo atrás al presidente y guardaba la convicción de que la detención anunciada obedecía a una maniobra por demás perversa, por lo que se avocaría a escribir artículos periodísticos promoviendo su defensa por el largo espacio de un año,
En ese mismo mes de abril, Anselmo había visto puesta en escena una pieza teatral cuya trama se centra en el consejo de guerra seguido en 1919 contra un célebre ancestro de don Facundo.
los sucesos acontecidos 90 años atrás, en el desaparecido “Teatro de los Héroes” de la Ciudad de Chihuahua, parecían reeditarse salvando las distancias del tiempo y el espacio , mismas que en verdad no existen al menos si hemos de atenernos a los postulados de la física de Planck, consejo de guerra seguido en un escenario que fuera abatido por la acción de un pirómano desequilibrado décadas después, y que constituye un hecho en el que la representación escénica encuentra un eco singular y misterioso con el acontecer del mundo
Anselmo pensaba en la manera de abordar para sus lectores los intríngulis concernientes tanto a la detención como el proceso seguido en contra de don Facundo; absorto en dicho propósito, de inmediato venía a su mente el ancestro del general ejecutado en Chihuahua tiempo atrás, así como la obra teatral que reseñaba aquellos acontecimientos, y sentía que existía una estrecha conexión entre aquellos hechos, consciente, por lo demás, de que resultaría del todo inútil tratar de encontrar a algún interlocutor que aceptara como válida esa intuición que le acometía con una fuerza desproporcionada, guardaba la plena certeza de que no habría quién no le dijera hasta la exasperación que aquellos eran hechos aislados que nada tenían que ver unos con otros, lo cual resultaba por demás sensato y razonable , al menos, bajo los parámetros que rigen la percepción de los hombres en los días que corren; sin embargo, acaso, la imagen de la hija de Renata o quizá su sombra, se habría erigido para él en sacerdotisa de Apolo y vestal de sus oráculos desde la región del Hades, desde donde imbuía a Anselmo aquella intuición con inusual insistencia.
UN SIGLO DE AUSENCIA
Venuistiano Carranza desconoció al gobierno de Victoriano Huerta secundado por diversos jefes militares, Villa, por su parte, en abierta contravención a las indicaciones de Carranza como jefe de la sublevación asaltó la plaza de Zacatecas destrozando al antiguo ejército decimonónico forjado en las guerras de reforma y de intervención.
El asalto y toma de Zacatecas terminaría por confrontar a ambos caudillos constituyéndose a no dudarse en una acción de armas plenamente equiparable a la Batalla del Marne o cualesquiera de las otras que estarían ventilándose por esas mismas fechas en Europa con motivo de la “Gran Guerra” desencadenada el 28 de junio de 1914 tras el atentado perpetrado en la persona del archiduque Francisco Fernando en la Ciudad de Sarajevo.
El ejército mexicano debidamente institucionalizado tras la guerra civil desatada entre Carranza y Villa, habría tenido su bautizo de fuego, años después, al hacer frente al conflicto religioso, por aquellos tiempos, Rubén Andrade, el abuelo de Anselmo, habría sido comisionado para emprender el reparto agrario en la ardentísima cuenca del Balsas, y, dada la situación imperante en esos momentos por motivo de la insurrección cristera , el general Joaquín Amaro giró instrucciones al jefe de la plaza militar en Morelia para que pusiera a su disposición una escolta que le brindara protección en el desempeño de la misión encomendada; Amaro , aún siendo oriundo de Zacatecas conocía a cabalidad aquellas latitudes ya que había desarrollado la más importante fase de su vida militar en la “tierra caliente” de Michoacán; el Jefe de la zona militar en Morelia, sin embargo, al recibir la referido instrucción decidió expresarle sus particulares objeciones al joven agrónomo.
- En caso de que pusiera a su disposición una escolta, tal y como se me ordena en el presente comunicado, ésta terminaría por asesinarlo y por desertar.
- ¿Qué es lo Usted sugiere entonces general Castrejón?
- Puedo poner a su disposición las armas que elija de las que encuentre en el arsenal de la guarnición para que se aboque en el sitio a la formación de una guardia agrarista.
Adrián Castrejón conformaría los servicios de inteligencia de la secretaría de la defensa durante la segunda guerra mundial, destacándose como un agudo y perspicaz cazador de espías nazis a lo largo de todo el territorio nacional, agudeza que ya había pasado a formar parte integrante de su naturaleza más íntima desde los días de la “Cristiada”.
A un siglo de haberse instituido el ejército , en aquellas mismas regiones la población se armaría para resguardarse a si misma ante los embates de diversas bandas de sicarios ; y es que la ilusión del progreso en las sociedades se esfuma del todo ante el sentido trágico de la vida imperante siempre en las fases más oscuras de la conciencio humana, en los días que corren nadie puede sentirse seguro en los cálidos parajes de la cuenca del Balsas incluso contando con protección oficial, misma que, como le dijera a Rubén Andrade el General Castrejón hace más de 80 años, lo más probable es que termine “ asesinándole y desertando de la plaza”.
El 31 de julio, fecha en el que la Iglesia de Roma venera a Ignacio de Loyola denominado, coincidentemente como el “soldado de Cristo”; el Juez de lo criminal con residencia en la ciudad de Toluca habría librado orden de aprehensión contra don Facundo en su carácter y condición de ciudadano mexicano, general de división en retiro y diplomado del estado mayor presidencial ; quién, por lo demás, se encontraba sujeto desde el mes de abril a un arraigo por la presunta comisión del delito de delincuencia organizada con el propósito de cometer delitos contra la salud.
la probanza aportada por el fiscal de la causa , consistiría en las declaraciones de los testigos protegidos de la procuraduría conocidos con los respectivos nombres claves de “Janet” y “Marco”, el primero de ellos, Ricardo Gómez Nervo habría sido mutilado de un dedo por haberse quedado con dinero de sus jefes, quiénes, sin embargo, perdonaron su fácil inclinación por los haberes ajenos, siendo conocido a partir de tan lamentable incidente con el pintoresco mote de “el 19” en el sórdido mundo del hampa.
El otro testigo de cargo contra don Facundo , Arturo Villanueva , era conocido con el alías de “el chiquilín”, efectivos de la marina lo habrían detenido en un fraccionamiento de Puebla en donde habitaba en una residencia que le fuera sido alquilada por un médico de profesión llamado Federico Pino.
Dedicado de tiempo atrás a diversos negocios inmobiliarios, Pino había constituido una compañía llamada “Constructora Saint Germain”, denominación con lo que dejaba de manifiesto la grave perturbación psíquica y anímica que le acometía una y otra vez sin cesar, presa del obsesivo anhelo de encontrar los mismos elementos mágicos que el legendario Conde habría logrado desentrañado años antes de que el populacho tomara “ la Bastilla”, y que, según cuenta la leyenda, le habrían permitido acceder sin límite al placer continuo y a la juventud perpetua.
Anselmo y Pino se habrían enfrascado en diversas ocasiones en ríspidas diatribas tendientes a desentrañar la titularidad de diversos predios ocupados por la constructora “Saint Germain” , a Anselmo le llamaba poderosamente la atención el peculiar parecido del médico constructor con Edward G. Robinson , sobre todo caracterizando el papel de “Natán” en la cinta “Los Diez Mandamientos” , parecido que al cabo del tiempo, le resultaría significativo en grado extremo cuando Pino tuvo que establecer se residente en el Canadá como prófugo de la justica nacional, ante la que gravitaban acusaciones en su contra sólidamente fundadas de haber defraudado a sus clientes , así como de haber despojado a los dueños de innumerables predios.
El arrepentimiento de la Reina de Inglaterra cuando sus subalternos ejecutaron con celeridad la sentencia pronunciada en contra de “María Estuardo” , se transformaría en profunda amargura, al momento de quedar al descubierto la falsedad de las declaraciones de los testigos de cargo en la cusa seguida contra la Reina de Escocia, en la causa seguida en contra de don Facundo, sin embargo, de manera lamentable no aflorarían sentimientos encontrados y heridos de mujer como en el drama de Shiller.
LA MUERTE Y LA DONCELLA
Una mañana de enero, meses previos a la detención de don Facundo , se habría verificado una reunión por demás peculiar en el antiguo Palacio de Covián situado en las calles de Bucareli y General Prim : estuvo entre nosotros el hombre que se había desempeñado como el jefe de operaciones del comando de fuerzas conjuntas en Irak desde la ocupación del país asiático , y que, tiempo después , habría asumido también la jefatura de las operaciones en Afganistán ; un hombre clave en el desenvolvimientos de los sucesos que corren, y quién , a no dudarse , figurará en las grandes páginas que consignen los hechos de nuestros días, acaso como al efecto figuran los hombre legendarios de la antigüedad en las páginas de Tito Livio, Tácito, Suetonio, Salustio o Polibio.
El General Petraeus acompañado del embajador de los Estados Unidos se reunió en el Palacio de Covián con solícitos y obsequiosos anfitriones, una comitiva conformado por algunos de los hombre más poderosos del país, sin que nada de lo acordado se ventilara ante la opinión pública, aun cuando, claro ésta, meses después lo dispuesto en dicha entrevista quedaría del todo al descubierto.
La detención de don Facundo habría sido motivada por las constancias inculpatorias en su contra que existían en diversas indagatorias en trámite , al menos, esa sería la versión que de manera oficial hicieron circular las autoridades ministeriales encargadas del caso , sin embargo, su detención no desembocaría en una inmediata consignación ante los tribunales , sino en la tramitación de un largo arraigo, durante cuya vigencia, los fiscales del gobierno tratarían de hallar cualquier elemente que pudiera simular una prueba que le hundiese.
Mientras la causa en cuestión se ventilaba ante las instancias competentes , se precipitaron una serie de acontecimientos que culminarían con la defenestración de David Petraeus , quién fue citado a comparecer por esas fechas ante el senado de los Estados Unidos para procurar dar respuesta a una serie de cuestionamientos que versaban en su contra, y que, lo mismo eran referentes a sus eventuales infidelidades maritales, que a manifiestas imprecisiones en los informes que habría rendido en su carácter de director de la agencia central de inteligencia.
La Casa Blanca y el departamento de estado habrían manifestado suspicacias en relación con el informe referente al ataque perpetrado por la multitud en la ciudad de Bengasi y en el que resultara abatido el embajador Stevens, en tal tesitura, se ordenó a Petraus que sustituyera la expresión “instalaciones diplomáticas” por el término “consulado” , cambio que llevaría consigo aparejadas graves y contundentes implicaciones , si nos atenemos al hecho incontrovertible, de que el embajador Stevens no era cónsul en provincia alguna de Libia sino el jefe de la legación diplomática en aquel país , legación cuya sede no puede ser otra más que la capital del país receptor que resulta ser Trípoli en el caso en cuestión; por lo demás, también la atención el hecho de que la operación de ataque a Libia recibiera el nombre clave de “Odiseo al amanecer”, siendo que el teatro de operaciones en cuestión coincidía en todo caso con la geografía de la Eneida, aparente confusión de lecturas clásicas que dejaba en realidad al descubierto ante terceros la intención de formular un mensaje críptico en términos de inteligencia militar.
¿Qué fue, por lo demás, lo que orilló a Petraeus a instruir a sus contrapartes mexicanos a dar inicio a una purga contra los altos mandos del ejército nacional, al unísono de que se exacerbaban discrepancias entre éste y la marina y se formaba una milicia con mayor número de efectivos y de recursos presupuestales que los que al efecto correspondían a las fuerzas armadas?
Repentinamente, en el verano, supimos de un suceso escabroso que alguna relación guardaría con dicho interrogante, un grupo de agentes de la policía federal habrían atentado en el poblano de Tres Marías contra la vida de dos integrantes de la agencia de espionaje dirigida por el mismo Petraeus que se encontraban acreditados en nuestro país como personal de la embajada de los Estados Unidos; en relación a la actuación de éstos, el jefe de los espías prefirió que , como en el drama de Zorrilla, de sus pasos en la tierra, o al menos en el territorio nacional, respondiera el cielo y no él.
Los mismos climas, no cabe la menor duda, propician siempre el nacimiento de las mismas plantas, en ese mismo paraje, el de Tres Marías , en octubre de 1927 habría tenido verificativo la masacre de la comitiva de Francisco J. Serrano nominado en esos momentos como candidato a la presidencia , el único sobreviviente de la masacre, Francisco Santamaría, eludió el destino fatal que esa tarde le esperaba debido a que uno de los integrantes de la comitiva llamado Rafael Martínez de Escobar, se enfrascó en una discusión con el oficial a cargo de la captura apellidado Fernández Escobar con el cual estaba emparentado ; en tales circunstancia, en súbito cambio en la apariencia de Santamaría derivada de la rápida colocación de un sombrero y una gabardina , ejercería un contundente efecto distractor sobre el soldado que le custodiaba , hecho que le permitiría a la postre escapar de la muerte aquel día .
Muchos años después, otro incidente violento acaecido en el mismo paraje ensombrecería de nuevo el orgullo y la dignidad de las fuerzas armadas y dejaría de manifiesto una relación secreta e intrincada con la agencia de espionaje que habría dispuesto mese atrás la arbitraria detención de don Facundo.
La conformación de las fuerzas armadas tal y como la conocemos actualmente se remonta al año de 1942, cuando la escuadra alemana hundió en las aguas del Golfo de México a los buques petroleros “potrero del llano” y “ faja de oro”, y don Manuel Ávila Camacho declaró el estado de guerra contra las naciones de “el eje”, las funciones que hasta ese momento habían sido asignadas a la antigua secretaría de guerra y marina tal y como habría sido estatuida por don Joaquín Amaro, quedarían a partir de entonces divididas entre las secretarías de la defensa nacional y marina , respectivamente a cargo en esos momentos de los generales Lázaro Cárdenas del Río y Heriberto Jara Corona.
El ejército habría tenido desde aquel entonces la misión de conservar intacta la soberanía nacional y de colaborar en todo momento con las autoridades civiles en la preservación de la seguridad nacional, sin que ello se tradujera por ningún motivo en su involucramiento en funciones concernientes a la seguridad pública y la administración de justicia; Jara, por su parte, sería galardonado tiempo después en la Unión Soviética con el Premio “Lenin” de la Paz por su campaña de recopilación de firmas contra la utilización de armas nucleares en la “Guerra de Corea”, y, de haber vivido, seguramente no se habría mostrado particularmente orgulloso de la marina , al contemplarla actuando bajo las indicaciones del embajador de los Estados Unidos.
En el contexto de la “guerra fría” , Munuel Inurreta recibiría del presidente y del secretario de la defensa nacional la encomienda de conformar la dirección federal de seguridad como máxima instancia gubernamental en la materia , y , el teniente coronel Zenaido Salazar Cárdenas escribiría al respecto las consideraciones sobre los “delitos contra la seguridad de la nación” que se erigirían en la guía para la actuación y el funcionamiento de la nueva unidad gubernamental ; décadas después, sin embargo, Nixon le declaró una peculiar guerra al narcotráfico en 1971 al crearse la DEA; sin que , las conductas que afectan a la seguridad de la nación fueran otras entre nosotros que las concernientes a la traición a la patria, el espionaje, la sedición, el motín, la rebelión, el terrorismo, el sabotaje y la conspiración; y sin que entre las mismas hubiese quedado incluida jamás la ingestión de narcótico alguno.
Al cabo de los años, sin embargo, la “guerra contra las drogas “ sembró inequidades y muerte en las calles y los campos, inequidades como la arbitraria detención de don Facundo, y una muerte terrible y atroz que dejó sentir su cruel presencia en todo el país; mientras que, en contrapartida, otra muerte, dulce y afable como la que protagoniza la lied de Franz Shubert habría sido benigna en grado extremo al respetar el dulce semblante de la hija de Renata.
YO ACUSO.
A la manera de Edipo ciego guiado por Antígona como fiel lazarillo por los caminos y los bosques , Anselmo recibía en su conciencia los dictados del espíritu de la hija de Renata ; así , durante casi todo un año emprendería una decidida labor editorial a favor de la causa de don Facundo , al grado tal de que, cuando fue finalmente liberado y exonerado de toda responsabilidad , gustaba de alardear con sus amigos identificando dicha causa a la de Dreyfus y comparándose a sí mismo con Emilio Zolá.
La causa seguida contra el Capitán Dreyfus sería la pieza central en torno a la cual giraría uno de los debates más intensos e importantes de fines del siglo diecinueve y que resultaría paradigmático en la fijación de las pautas de la ética social y política todavía en vigor en nuestros días , debate en la que Zolá jugaría en papel preponderante al publicar una serie de cartas dirigidas a la opinión pública bajo el emblemático título de : “YO ACUSO”.
Dadas las condiciones en las que se dieron la detención y posterior sujeción de don Facundo a la justicia criminal, resultaba del todo claro que estábamos en presencia de una intentona de subversión de las instituciones por parte del mismísimo presidente y en consecuencia, resultaba más que pertinente establecer el parangón entre ambos episodio; . un consejo de guerra declaró culpable a Dreyfus en tanto que otro posterior determinó la total inocencia de Esterhazy , pese a que las evidencias del caso señalaban a éste como el verdadero responsable de los cargos de traición que habían conducido al oficial judío a padecer la atroz prisión de la Isla del Diablo , para Anselmo no cabía la menor duda con respecto a la moraleja que se desprendía del caso , si hay un oficial injustamente inculpado , es porqué existe otro oficial que es el verdaderamente culpable de vender los secretos militares de Francia al agregado militar de la embajada de Alemania.
Anselmo se encontraba absorto en sus reflexiones cuando recibió una llamada telefónica de un antiguo maestro y amigo , Jesús María Gallardón, quién le extendía una invitación a una comida que se llevaría cabo en honor de don Facundo : “El general quiere darte las gracias” , le habría comunicado, para su íntima satisfacción uno de los juristas e historiadores más prominentes del país, el banquete ofrecido en honor de don Tobías se llevaría al cabo por lo demás, al unísono de que el Presidente de los Estados Unidos realizaba una visita oficial a México .
En la ocasión, Anselmo le espetó de inmediato al homenajeado : sus ex alumnos del colegio de la Compañía de Jesús siempre tuvieron la convicción de su inocencia; ciertamente , siendo un joven oficial a mediados de los años 60, don Facundo había impartido instrucción militar en un colegio militarizado a cargo de la Compañía de Jesús; doña Luisa, su esposa, atajó de inmediato a Anselmo y le comentó:- yo le conseguí ese trabajo a Facundo por intermediación de mi papá, estábamos por casarnos y la verdad sea dicha es que el dinero que me daba a guardar yo me lo gastaba con mis amigos en una cafetería que se llamaba “salón de té, rococó”,- en la que amenizaba un conjunto de rock and roll llamado “los tribunos”, se adelantó a completar la idea Anselmo con evidente tono festivo- ¡ ándale ¡, contestó entusiasmada la señora. Peculiar convivencia de un grupo reunido con una finalidad por demás festivos: celebrar la liberación de uno de ellos, mientras que, de manera inmisericorde , los comensales eran monitoreados por los servicios de la inteligencia m ilitar y por los concernientes al caso debidamente adscritos a la embajada de los Estados Unidos.
Qué sucias son las guerras sin guerreros, las guerras perpetrada por medio de la intriga y la calumnia, las guerras que se siguen mediante el monitoreo clandestino de las telecomunicaciones, y cuyas acciones se plasman, no en los campos de batallas , sino en las páginas de los diarios y en las actuaciones de los juzgados, son guerras en las que no tienen cabida cantos épicos como los que Ennio entonara a las glorias de Aníbal y Escipión; guarras en las que no se realizan sacrificios a los dioses oficiados por jóvenes vestales virginales como la hija de Renata
ENCUENTROS Y REMEMBRANZAS.
Mediaba el año, cuando repentinamente Anselmo recibió la invitación a una reunión en casa de Werther con motivo de su cumpleaños, hombre que, pocos años atrás había ejercido una manifiesta influencia en la vida política del país , reunión en la que coincidiría con el senador Fernández con quién sostuvo una conversación por demás interesante:
- Si hay alguien que comprende a cabalidad la trascendencia del abogado Fuentes, en relación a los más intrincados tópicos de la seguridad nacional indiscutiblemente es Usted .
-Resulta grato conversar con personas a los que no es necesario explicar los intríngulis de la vida del país.-contestó el senador.
El 19 de octubre de 1994, a las doce horas con treinta minutos en el uso horario de la Ciudad de San Antonio, Texas ; el abogado Fuentes habría sido detenido por cinco agentes del departamento de justicia del gobierno de los Estados Unidos, en el domicilio correspondiente a la Torre de Oficinas Álamo; la procuraduría había solicitado su detención con fines de extradición, en virtud de que pesaba sobre él la acusación de haber participado en el delito de cohecho, el litigante se encontraba acusado ante la justicia , nada más y nada menos, que de haber sobornado a dos magistrados e incluso a un ministro de la corte suprema ; por su intermediación, la justicia federal habría otorgado amparo y protección al violador y asesino de una menor de edad , que , por lo demás, resultaba emparentado con una familia que se ostentaba como la propietaria de la superficie en la que se asentaría al paso de los años la denominada zona diamante del puerto de Acapulco , una de las delimitaciones urbanas de más alto valor catastral en todo México.
El abogado Fuentes se encontraría al momento de ser detenido en compañía de un congresista que también era buscado por las autoridades mexicanas ya que se le consideraba como un eslabón clave para desentrañar tanto el asesinato de un prominente legislador mexicano como el del aspirante a la presidencia del país más prominente en aquellos momentos , tocando en surte a Fernández la peliaguda misión de dar testimonio de tal circunstancia dada su condición de cónsul de México en Houston; episodios terribles que permiten rememorar los versos de Virgilio : “ tiembla mi alma con sólo recordar esos momentos”, sin embargo, nada podía compararse a la sensación de desasosiego que experimentaría Anselmo al hojear el periódico al día siguiente, cuya sección de espectáculos daba cuenta de las declaraciones de una atractiva actriz de telenovelas en las que anunciaba la muerte de su suegro el abogado Fuentes quién se llevaba al sepulcro muchos de los más intrincados secretos de la vida política de México.
Meses después de haberse llevado a cabe aquel encuentro en la casa de Werther , Anselmo se encontraría nuevamente con el senador en su oficina particular .
-¿Qué opinión le produjo el fallecimiento de Fuentes?
-Por principio de cuentas me resultó escalofriante el hecho de que estuviese agonizando e incluso de que eventualmente hubiese fallecido en el instante mismo en el que Usted y yo estábamos sosteniendo una conversación sobre su persona, me pareció incluso una especie de mensaje Kabalístico- y , efectivamente, Anselmo había comenzado a desarrollar una percepción especial en relación al suceder de los acontecimientos, como si fuese un iniciado en los misterios órficos o incluso el mismo Orfeo que hubiese seguido a la región del Hades a la hija de Renata transfigurada en una especie de nueva Eurídice.
-Su muerte impedirá desentrañar muchas de las claves torales para comprender la consolidación de un estado criminal entre nosotros, aún cuando la historia, claro está, viene de mucho más atrás.
-¿Cuáles serían los principales antecedentes que tendría Usted registrados? Preguntó Anselmo.
-El primero sería el arribo de las principales oleadas de migración china a fines del siglo XIX.
La hostilidad que la sociedad mexicana ejerció contra aquella comunidad que buscaba asentarse entre nosotros, constituye una de las fases más vergonzosas de nuestra historia mantenida por lo demás en el más absoluto de los silencios, incluso Ricardo Flores Magón, ejemplo de adalid de las luchas sociales, llegó a establecer como base de su programa de gobierno la proscripción de la migración proveniente de aquel país.
Los chinos, que en algún momento habrían sido hacinados por las autoridades migratorias en Tijuana y en Tapachula como puntos extremos de la cartografía nacional, fueron extendiendo su presencia y con ella sus costumbre, algunas por demás encomiables y otras no tanto como la que concierne a la ingestión del opio; con el paso del tiempo, miembros de la comunidad asentados en Sinaloa llegaron a tener cultivos relativamente significativos de la flor de adormidera; muy pronto, sin embargo, aparecerían en el horizonte otras personas interesadas en controlar el negocio del opio y en desplazar a los chinos.
México fue un centro importante de actuación del espionaje alemán durante la primera guerra mundial, y , desde los días del ascenso de Hitler al poder, los residuos de aquel núcleo de informantes se habrían sumado a la cruzada antisemita del tercer reich conformando lo que con el paso del tiempo sería denominado como “la quinta columna”, la que , de más está decirlo, decidió financiar sus actividades con las utilidades que le brindaba el trasiego de droga a los Estados Unidos.
La “quinta columna” contaría en México con la cobertura que le brindaba el gobernador de San Luis Potosí Gonzalo N. Santos , quién por conducto de un aviador de su confianza llamado Rodolfo Traws ,terminaría estableciendo una importante alianza estratégica de negocios con Maximino Ávila Camacho , responsable de las comunicaciones en el gabinete y hermano del presidente de la república ; cuando el gobierno de Sinaloa a cargo de don Rodolfo T. Laoiza inició una importante campaña de erradicación del cultivo de la amapola, los terratenientes afectados, respaldados por el propio Maximino , llamaron a un sujeto que les había servido para someter a los agraristas e impedir con ello el reparto de tierras en la región, era un hombre llamado Rubén Valdés y que respondía al pintoresco sobrenombre de “el gitano”.
El Lunes 20 de febrero de 1944 se había dado inicio al trágico Carnaval de Mazatlán, el coronel Loaiza se había traslado desde Culiacán para presidir los festejos en su carácter de gobernador de la entidad y al fragor de la fiesta habría terminado por contagiarse de la alegría desbordada de los lugareños por lo que decidió trasladare con su comitiva al “Patio Andaluz” del Hotel Belmar; en donde su reloj Elgin de oro se paró a las 2 de la mañana menos 10 de minutos de aquel fatídico martes de carnes tolendas ; tras su asesinato, el gobierno recayó en Pablo Macías Valenzuela, último titular de la secretaría de guerra y marina antes de su transformación con motivo de la declaración de guerra al “eje” y con quién los terratenientes de Sinaloa, por lo demás, no volverían a tener la más mínima de las rispideces
-Le manda muchos saludos don Facundo.- le dijo Anselmo a Fernández.
- Leí puntualmente lo que escribió en relación a su detención , desde hace algún tiempo quería felicitarlo por eso; comí con él cuando dejé el consulado en Huston, en esa ocasión , me expresó la más amplia gratitud a nombre del ejército ya que, según él, gracias a mis informes la inteligencia militar detectó a los principales implicados en los magnicidios que azolaron al país hace veinte años, aun cuando, claro está, los militares no se mandan solos y recibieron las órdenes de dejar las cosas como estaban.
-Quiero decirle que hay otro motivo por el que tenía deseos de felicitarle , uno de sus escritos me hizo recordar momentos muy delicados de la vida del país que ya han sido olvidados pro casi todo el mundo ; aun cuando, déjeme decirle, encontré un error en uno de ellos : no fue en marzo del 70 cuando el canciller declaró personas “non gratas” a los funcionarios de la legación soviética , dicha expulsión se llevó a cabo en realidad en 1971..
Fernández se refería a un escrito de Anselmo sobre la expulsión de Oleg Netchiporenko, jefe de estación de la KGB en nuestro país en los momentos más álgidos de la “guerra fría” y quién al subir al avión que lo repatriaría a Moscú acuñó una expresión que se haría celebre entre nosotros con el paso del tiempo: “como México no hay dos”.
Agustín Arriaga Rivera en su carácter de gobernador del estado de Michoacán habría dispuesto años atrás la intervención del ejército mexicano al mando de José Hernández Toledo en el campus de la universidad michoacana de San Nicolás de Hidalgo; hecho que trajo como consecuencia la conformación del grupo subversivo denominado “Movimiento de Acción Revolucionario” ; integrante de la dirigencia del MAR, Fernando Pineda Ochoa fue detenido y encausado ante la justicia mexicana bajo el cargo de haber realizado prácticas subversivas con el respaldo logístico de Netchiporenko.
En sus declaraciones , Pineda habría manifestado sin la menor reserva la existencia de los nexos del “MAR” con Corea del Norte, la Unión Soviética, sin embargo, no habría tenido al parecer participación alguna en la conformación del “MAR”; el hecho de que Fernando Pineda hubiese estudiado en la “ Patricio Lumbumba”, habría servido como excusa para que el célebre jefe de estación de la C.I.A. en nuestro país en aquellos años, Winston Scott, realizara uno de sus montajes acostumbrados.
Scott conformó en México un programa secreto conocido con la denominación clave de : “LITEMPO” , y mediante el cual, reclutó a altos mandos de la vida nacional entre los que se encontrarían los presidentes Adolfo López Mateos, Gustavo Díaz Ordaz y Luis Echeverría Álvarez , el último de los cuales se encontraba en funciones al momento de suscitarse, tanto la detención de Fernando Pineda Ochoa, como la ya referida expulsión de los diplomáticos soviéticos.
-La figura de Pineda siempre me ha parecido un misterio digno de ser dilucidado, le comentó Anselmo al senador, yo era un niño cuando mi abuela que estaba emparentada en grado un tanto lejano con él, me mostró el periódico en el que se daba cuenta de su detención, se le acusaba de todo lo inimaginable, era de esperarse que a la fecha fuese una figura importante entre las formaciones políticas de izquierda, sin embargo , al paso del tiempo terminó por hundirse en el más absoluto anonimato.
-a mi me eligieron diputado por primera vez al año siguiente de su detención, comentó Fernández, e inquirió con curiosidad ¿cómo se explica ese fenómeno?
-Creo que en su momento fue el tonto útil al que agarraron y le colgaron todos los milagros y los muertos que quisieron imaginarse , me llama la atención el hecho de que platicando recientemente con don Facundo, él identificaba plenamente al recientemente desaparecido Gómez Roaro como dirigente del MAR, sin que el nombre de Fernando Pineda le significara absolutamente nada.
- Eso resulta digno de llamar la atención, atajó Fernández, atendiendo sobre todo al profundo conocimiento que tiene de esos temas , fue precisamente a partir del abatimiento de los brotes guerrilleros , desatados desde el asalto al cuartel de Ciudad Madera en la Sierra de Chihuahua y del movimiento estudiantil de 1968 , e incluso del movimiento de Rubén Jaramillo en Morelos , cuando comenzó a consolidarse el narcoestado en México, teniendo como colofón los magnicidios de hace veinte años en torno a los cuales Fuentes habría un jugado un papel fundamental.
-¿Cuáles son las relaciones que encuentra Usted entre esos acontecimientos?
- El movimiento estudiantil de aquellos tiempos recibió un impulso inusitado por parte de Winston Scott quién quería desestabilizar a Díaz Ordaz por haber hecho aprobar disposiciones fiscales que afectaban a los consorcios americanos, pensaba que por medio de la agitación podrían sentarse las bases de un golpe de estado que entronizara en el poder a Corona del Rosal, la estrategia abortó, finalmente, gracias a la denodada lealtad institucional del secretario de la defensa que era don Marcelino García Barragán, pero, a partir de ese momento, comenzó a disponerse de las fuerzas armadas en funciones de índole policial y específicamente contrainsurgente.
Palabras con la que finalizaría el diálogo y el encuentro entre ambos. Diálogo que no dejaba lugar a la menor duda : a lo largo de nuestro transitar por el mundo, todo se encuentra imbuido de acertijos, enigmas y misterios.
Efectivamente, la denominada “brigada blanca” recibiría de las más altas autoridades del país carta blanca como botín de guerra por haber extirpado de raíz a aquellos grupos guerrilleros , por esos días la C.I.A. comenzaría a desplegar las acciones del denominado operativo Irán-contras, y los integrantes de la tristemente célebre brigada terminarían por enlistarse en las filas del “Cártel de Guadalajara” ; algo habría quedado para siempre y desde entonces “podrido en Dinamarca”; a partir de tales acontecimientos se sucederían treinta años sin rumbo en medio de desplomes económicos, magnicidios y transformaciones infructuosas y las palabras del profeta Daniel se evocarían una y otra vez : “ el reino fue medido y su tiempo se encontró fenecido y acabado al ser puesto en la balanza ” , y, como colofón dramático, la hija de Renata se hundiría en el dulce sueño de un príncipe velado por un coro de ángeles.
LA ANAGNÓRISIS DE ANSELMO
Meses después de haberse llevado a cabo tales encuentros, Anselmo recibió la invitación de las autoridades locales de Chiapas para asistir a un encuentro en Tuxta, al llegar al aeropuerto lo primero que hizo fue trasladarse a San Juan Chamula para visitar la singular capilla en el que el rito de la Iglesia de Roma es sustituido por creencias animistas de veneración al sol, la luna y las estrellas.
La capilla permanece siempre en la penumbra con el suelo cubierto de ramas de pinos y de una abrumadora cantidad de veladoras tan sólo superadas a las que se enseñorean en el altar mayor circundadas por las ofrendas que ahí se depositan, en sus muros, las imágenes de los santos vestidos con atuendos de la región , se erigen en testigos silentes de los ritos de diversa índole que los feligreses llevan a cabo en su presencia; entrar a la capilla de San Juan Chamula es iniciar un viaje a la región a la que habría descendido la hija de Renata en la fría noche de septiembre en la que conciliaría un sueño sempiterno.
En el camino desde Tuxtla a la región denominada “los altos”, puede apreciarse paso a paso el cambio en el clima y en la vegetación que pasa del ramaje subtropical al verdor propio de las variedades alpinas , asimismo, también quedan a la vista del viajante las instalaciones de la región militar que fuera materia de un connotado asalto guerrillero veinte años atrás.
El comandante de la región militar en aquellos años, habría recibido la desconcertante indicación de hacer caso omiso de la formación del grupo subversivo en cuestión que, por lo demás, habría sido detectada con toda oportunidad; al batir a los agresores recibiría asimismo la indicación, absurda tanto desde la perspectiva militar como política, de declarar un cese unilateral al fuego cuando el abatimiento de los rebeldes estaba prácticamente consolidado; y, como colofón a lo ya señalado, meses después recibiría la contraorden de capturar a los cabecillas del movimiento, los cuales, debidamente informados del avance, huyeron oportunamente del lugar arrojando la ofensiva un cuestión un saldo peculiar: la baja de un oficial abatido que fuera promovido postmortem al grado de coronel, así como la desazón , la división permanente y el encono entre los altos mandos del ejército.
Fueron sometidos a consejo de guerra, generales que décadas atrás habían dirigido las operaciones de contrainsurgencia en las montañas del sur , consejos de guerra en la que los oficiales en cuestión tendrían que hacer frente a acusaciones tan graves como la de haber colaborado con las más importantes bandas delincuenciales del país ; asimismo, el general Estrada, encargado por aquellos años de dirigir la lucha contra el hampa , sería indiciado ante la justicia bajo el cargo de haber recibido cohechos por parte de los propios narcotraficantes , acusación que sobrevendría precisamente en los momento en que Estrada cosechaba incontables éxitos y era objeto de la admiración generalizada por haber desentrañado, entre otras intrincadas situaciones, los nexos existentes entre personajes allegados a la familia del presidente con los traficantes de anfetaminas; al unísono, los más negros augurios se ceñirían en aquellos momentos sobre el horizonte de México , cuando Gonzalo Lara, prominente oficial de la fuerza aérea nacional, falleciera en un percance que habría sobrevenido en pleno desfile conmemorativo de la independencia , mientras se dejaba sentir con insistencia la demoledora sospecha de que el incidente en cuestión se habría debido en realidad a un ajuste de cuentas en su contra.
Los oficiales procesados ante el fuero de guerra fueron encontrados inocentes , y, al paso de los años, uno de ellos, Sergio Ibarra, habría recibido la encomienda secreta del presidente de negociar una tregua con los principales jefes del narcotráfico, encomienda secreta que quedaría al descubierto al momento en el que fuera asesinado por un jovenzuelo en las afueras de un taller mecánico, precisamente a unos cuantos días de haberse reunido con don Facundo.
En el encuentro de Tuxtla se abordarían diversos tópicos de seguridad, y Anselmo tendría la oportunidad de intercambiar comentarios e interesantes puntos de vista con Juan José Itziwara, uno de los principales ponentes en el referido evento.
Hace algún tiempo , un autobús oficial que trasladaba un grupo de 37 cubanos que habían inmigrado ilegalmente al país fue asaltado cuando transitaba por las carreteras del estado de Chiapas, se dirigía a la estación migratoria ubicada en Chetumal, sin embargo, algunos de aquellos cubanos sólo serían localizados algún tiempo después y en otra latitud muy distante , al ser detenidos por las autoridades migratorias del estado de Texas .
La tregua signada entre los “z” y el Chapo comenzaba a desfallecer por aquellas fechas, en enero de aquel año, “El Mochomo” habría sido detenido en Culiacán y el 9 de mayo sería asesinado en Culiacán Edgar, el hijo en el que el Chapo tenía colocados sus mayores afectos, iniciándose a partir de tales hechos un interminable entrecruzamientos de suspicacias y acusaciones que culminarían en un verdadero baño de sangre, enfrentamientos que incidirían drásticamente en la desaparición de un oficial de inteligencia del ejército de los Estados Unidos en la ciudad de Saltillo, según habría logrado esclarecer Itziwara con alto grado de certeza.
- El agente de la inteligencia militar de los Estados Unidos que desapareció en Coahuila era también de origen cubano.
- Así es, bien pudo quedar atrapado en medio de un fuego cruzado de enormes proporciones, actuando como si ignorase las hostilidades entre bandas rivales , o bien, pretendiendo imponerse sobre ambas, invocando antecedentes y poderes cuyos tentáculos se extienden más allá de las meras adscripciones de índole delincuencial.
En el banquete ofrecido en el salón privado de un restaurant al que concurren los principales mandos políticos de la ciudad de Tuxtla, en medio de la charla , Anselmo reconoció de improviso por entre las señas del tiempo el rostro juvenil de Juan José Itziwuara , años atrás , ambos habían compartido alguna responsabilidad de trabajo y Anselmo lo reconoció repentinamente precisamente en el momento en el que Itziwara mencionó a un importante magistrado, antiguo mentor suyo, al unísono de que se negaba a aceptar el ofrecimiento del mesero del establecimiento a servirle alguna bebida con la que acompañar los alimentos .
En alguna ocasión, en una época ya ida, Anselmo habría coincido ocasionalmente con el mentor de Itziwara del que éste pretendía alejarse por aquellas fechas, encuentro en el que se habría hecho receptor de una brutal confidencia: “Juan José no puede beber una sola gota de alcohol”.
Efectivamente, el rostro que se le presentaba por entre las señales del paso del tiempo, era el de un joven estudioso dispuesto a hace cualquier cosa para dejar atrás un pasado menesteroso y triste que le atormentaba, aquella misma fisonomía rejuvenecida en el recuerdo que repentinamente se agolpaba en los recuerdos de Anselmo, se alejaba tras el primer sorbo a una copa de otro establecimiento en el que también departían, distante sin embargo en tiempo y distancia de aquel restaurante de Tuxtla , volvería a encontrarlo días después en las inmediaciones de la oficina que compartían con la mirada extraviada y un desalineo que dejaba en claro que había dormido en la calle, bregando entre las llamas atado al potro del alcohol por vómito de fuego, después , no volvería a verlo ni a saber de él hasta su inesperado encuentro en la capital de Chiapas; Anselmo experimentaría entonces, el fenómeno descrito por Aristóteles con el nombre de anagnórisis y la sensación abrazadora y contundente que dicho fenómeno produce , el terrible impacto que recibe el espíritu cuando desentrañamos a cabalidad la identidad de un sujeto que resulta clave para dilucidar alguna incógnita o misterio.
Al regresar de Tuxtla , se encontraría al aeropuerto de la ciudad de México tapizado con promocionales de la temporada de Ópera de Bellas Artes y decidió entonces asistir a la presentación del “Macbeth” de Verdi, cuya puesta en escena no dejaría de parecerle sorprendente, los hombres de teatro, supersticiosos por antonomasia, consideran a tal grado abominable la trama schakespereana en la que las brujas del bosque muestran al protagonista un camino de impunidad que le conduce a la corona de Escocia, que prefieren llamarla “la obra maldita” sin mencionarla jamás por su nombre , convencidos de que su puesta en escena, trae aparejada las más terribles desgracias.
Tras comprar el boleto de la función Anselmo se trasladó al bar del sanborn´s en cuya barra casualmente se encontraría con Jesús María Gallardón, y, tras los saludos pertinentes al encuentro compartiría con éste algunas copas en el trascurrir de aquel soleado medio día , cuyas luces de postrimería invernal bañaban lo mismo a la alameda central, que al Palacio de las Bellas Artes , al elegante edificio de coreos y al propio palacio del Conde de Orizaba comúnmente conocido con el nombre de “Palacio de los Azulejos”; formidable conjunto urbanístico que evoca las glorias de un país que ya no existe.
-Supe que has estado de visita tanto con don Facundo.
-así es, no deja de sorprenderme lo que sucedió ¿ tú cómo te lo explicas?
-Por la acentuada inseguridad psíquica que acomete desde siempre a mi amigo el presidente, aunada a la presión que sobre él ejercen los gringos y a su incontrolada afición por el consumo de alcohol
-También me enteré de que asististe al sepelio de la hija de Renata, yo estaba fuera del país en esos momentos.
-Me llamó mucho la tención que Renata luciera tan entera de ánimo en medio de la pena, y además y sobre todo más hermosa que nunca.
-No tendría nada de extraño, ni de particular si lo ves bien, Renata es ahora la madre de un ángel. Palabras que tuvieron sobre Anselmo los efectos de una revelación deslumbrante que nuevamente le haría experimentar la sensación de la anagnórisis.
LA DANZA DE GISELLE EN LOS BOSQUES.
En su trayecto Anselmo pensaba que los actuales no guardan relación alguna con los pueblos que había conocido en su infancia, ante el abandono de las actividades agrícolas o su concentración específica en cultivos altamente tecnificados y en medio de la especulación desmedida de constructores y desarrolladores urbanos, aquellos antiguos pueblos se han convertido con el paso del tiempo en suburbios citadinos, extirpando por completo de nuestro panorama las expresiones propias de una civilización rural.
El silencio de la nocturnidad ya no es esporádicamente interrumpido por los ruidos emitidos por la fauna de la localidad, ya fuese conformada por tlacuaches o zorrillos, coyotes o jaguares; tampoco las criaturas mágicas habitan ya los bosques despoblados para siempre de faunos y de hadas; en lugar de ello, el silencio es desgarrado por las ráfagas de los disparos y las luces de neón de los promocionales espectaculares le han cerrado el paso al mito y a la leyenda.
Las luces artificiales y los lamentos provenientes de los asaltos , crean los nuevos espacios y las nuevas referencias, en las que quedan excluidos por completo brujos, demonios y ánimas en pena; seres, cuya presencia , se invoca , según de todos es bien sabido, frente a oscuras encrucijadas en las que el sonido de los vientos sacudiendo los ramajes de pirules, abetos y sauces hacía estremecer de pavor en otro tiempo a todo aquel que llagara a escucharlo.
En la trama del ballet clásico, Giselle se levantaba del sepulcro para danzar en los bosques y atraer con su baile al joven apuesto de corazón puro que estuviese dispuesto a seguirla, muy difícilmente, en los días que corren, la hija de Renata danzaría en las inmediaciones de los caminos; la vida contemporánea desprovista de mito y de ritual, tampoco conoce del honor, ni siquiera en el campo de la guerra que se sigue a la fecha por medio de la calumnia y la arbitrariedad.
- Le manda munchos saludos el senador Fernández a quién me encontré en la reunión de cumpleaños de Werther Alatriste
-¿Qué ha sido de él? dijo don Facundo con manifiesto entusiasmo.
- Atendiendo sus asuntos y viendo como marchas las cosas en el país, pareciera que se están saliendo de control ¿no lo cree usted así?
-La verdad es que así pareciera.
- ¿no ha visto a Jesús María Gallardón? preguntó Anselmo.
-Fíjese que extravié su número telefónico.
- Casualmente aquí lo traigo.
-Magnífico, me comentó que ustedes habían sido compañeros en la escuela.
- Lo fui de su hermano Fernando, él es mayor que nosotros, de hecho ya había estudiado en Navarra con el hijo del filósofo Eugenio Dors. ¡¡ah porqué de eso no cabe la menor duda¡¡ , todo lo que concierne a Jesús es de una gran altura en todos los órdenes, tanto en lo intelectual como en lo social, y ni que decir en el ámbito moral, eso sí, no está cuerdo , pero eso ya es otra historia
-jajajaja, festejó con una discreta risa don Facundo.
-cuénteme algo más del senador, hace mucho que no le veo.
-Estuvimos platicando sobre la expulsión del personal de la embajada Soviética en el 71 y de Fernando Pineda Ochoa, quién para mi encierra un verdadero misterio.
-¿Porqué lo dice?
-En su momento la prensa lo llegó a considerar una figura clave en el accionar de los movimientos subversivos, era como para que a la fecha tuviese una muy alta responsabilidad, sin embargo se esfumó del escenario público sin dejar huella alguna.
-Bueno yo identifico muy bien como líder del MAR a Gómez Roaro.
-Quién por cierto acaba de fallecer hace unas cuantas semanas.
-exactamente.
-Mire yo conozco muy bien los sótanos del país, acaso como Jesús , nuestro común amigo se mueva entre las luces, y déjeme decirle una cosa, la certeza y la certidumbre terminan por convertirse en un lujo que nos es asequible sólo muy raramente.
Anselmo se quedó pensativo ante las palabras del general; antes de haber orquestado su encarcelamiento, el presidente le había encomendado entablar negociaciones con un grupo subversivo que había perpetrado atentados dinamiteros en instalaciones petrolíferas de Guanajuato y Querétaro, una guerrilla que habría sido combatido por el ejército desde lustros atrás por medio de estrategias contrainsurgentes , arrojando como saldo perturbador el que una parte considerable de los cuerpos especiales destinados a combatirla habían terminado por desertar para conformar un sicariaje de élite al servicio de los barones de la droga; por su parte, las negociaciones que don Facundo había llevado a cabo en los sótanos del país habían fructificado a grado tal de que no volvería a saberse más de atentados dinamiteros durante el mandato presidencial; el diablo, sin embargo, siempre presente entre nosotros , pagó los favores que habría recibido de la mima manera en que lo ha venido haciendo desde los días del santo Job .
-lo encuentro muy repuesto.
-si ya, muchas gracias.
-bueno pues ya no le quito más su tiempo, me dio muchísimo gusto saludarle y espero volver a visitarle próximamente.
La civilización misma tal y como la conocemos se desmoronan ante nuestros ojos en un plazo tan breve como el de un suspiro, mientras se nos va la vida en cantar una canción, en perseguir a las aves y en deshojar una flor ; la más diáfana pureza se esfuman de nuestra conciencia dejando tan sólo incertidumbre y zozobra; ni siquiera nos hemos percatado de que vivimos en un estado prolongado de guerra librada sin honor y sin decoro ; mientras la hija de Renata , como Ifigenia, habría sido sacrificada a los dioses para consolidar el avance de las tropas o quizá, acaso, habría sido terroríficamente rescatada por esos mismos dioses para que, una vez privada ya de todos sus recuerdos, fuese traslada en imagen a la roca de Tauris , en donde habría recibido la terrible encomienda de sacrificar a todo aquel que llegase a arribar a sus playas.
Un viernes por la tarde al ir de compras al supermercado, Anselmo coincidiría en la entrada del establecimiento con una prima lejana de Renata quién le saludó con un marcado dejo de coquetería, había un asombroso parecido entre ambas pese a la lozanía de Leticia que era algunos años más joven, en medio de un breve intercambio de frases amistosas y cordiales , quedaron de encontrarse una tarde cualquiera para tomas un café y charlar largamente , al despedirse, la brisa vespertina acarició a Anselmo en las mejillas quién dio vuelta al rostro para contemplar a aquella atractiva mujer que se alejaba caminado de manera alegre y despreocupada con la firme actitud de que la vida se abriría camino ante su paso una y otra vez.
Opinion para Interiores:
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De formación jesuita, Abogado por la Escuela Libre de Derecho.
Compañero editorial de Pedro Angel Palou.
Colaborador cercano de José Ángel Conchello y Humberto Hernández Haddad y del constitucionalista Elisur Artega Nava