Palabras que pierden significado

  • David Bravo Cid de León

¿Qué no es dignidad?.-No es fruncir el seño y hacer muecas de seriedad; No es la acumulación de saberes en las investigaciones en del campo de las ciencias; tampoco es el cultivamiento de la inteligencia [que a veces es ficticio] ni las apariencias que afloran en el rostro cuando se pone adusto; tampoco los ademanes estudiados y el modo de andar  del vestir; tampoco el hablar engolando la voz en matices graves y agudos; tampoco todo aquello que es fingido y oculta  el verdadero modo de ser, la verdad en el actuar o lo que nos atribuimos a nosotros mismos por nosotros mismos; tampoco está en la acción filantrópica o la de asistencia social.  ¿ entonces que es?:No hay  multiplicidad de respuestas; solo hay una:

La dignidad es un Don recibido gratuitamente desde el inicio de la existencia, se nos da, nadie tiene la potestad de darla, nadie la puede otorgar sea autoridad pública como lo es el Estado, o la legislación escrita vigente por obra de los legisladores. El simple civil, ya sea sabio o ignorante, afortunado en su hacienda y menesteroso con hambre; el criminal que de la violencia hace su negocio o el sufriente por la perversidad y maldad de los malhechores de todo tipo y número, todos son personas y por ese hecho tienen dignidad;     ¿Cómo se nos da ese don de la dignidad?:    cada persona al ser creada, es creada a imagen y semejanza de su Creador y por la pasión y resurrección de Jesucristo, es sujeto de dignidad; aunque se esfuerce en asemejarse a las bestias que están privadas de la capacidad de reflexionar sobre sus actos y no pueden ser sujetos de redención: la dignidad de la persona, persiste en la persona.

En este contexto son tres los elementos que intervienen el cultivo, defensa y enriquecimiento de tal don propio solamente de de la persona humana: LA LIBERTAD, LA FE Y LA CAPACIDAD DE SER Y ACEPTAR SER SUJETO DE LA GRACIA QUE TAMBIEN ES UN DON GRATUITO.     La Libertad porque la persona puede aceptar o rechazar la bondad o maldad de sus actos, porque sus actos son producto de una elección que es tomada individualmente por obra de la voluntad.    La Libertad [ que trambien es un don recibido] no es capricho que degenera en libertinaje, no es querer hacer y deshacer a conveniencia personal lo que se quiere para comodidad o para satisfacción individual de las tendencias de los instintos de la parte animal que a todos los humanos acompaña . La Libertad tiene los límites que la conciencia revela diciéndonos: no la riegues, deja de hacer esto que sabes es malo o bien nos dice la estás haciendo bien sigue en ese sentido y orientación de tus actos. Esta voz nadie solo se escucha en la intimidad, a donde no entra el ruido o la falsedad de los decires convenencieros. Solo se escucha por la persona que la oye sin que se lo diga nadie;  Es connatural a la existencia humana y se hace presente en la persona en cuento- en la edad temprana- alcanza  el uso recto de razón.

La FE es creer, de verdad, en la verdad que dignifica a la persona. Se suele llamar fe a muchos estados de ánimo que son generados por obsesiones sin reflexión de su significado; o por los distorsionamientos de orientación egoísta y utilitarista, o por costumbres y circunstancias que resultan- muchas veces-, invencibles por su orientación política, ideológica o cultural, como sucede  en determinados pueblos y naciones. La FE es un Don que respeta el libre albedrio para que sea aceptada o rechazada por la persona; no presiona ni exige ser aceptada, respeta, pero es la verdad, que encierra la verdad del hombre[ en masculino y femenino] y que se recibe gratuitamente, o se alcanza por la búsqueda sincera de la verdad absoluta, o por la reflexión personal sin sesgos ideológicos y convenencieros.

La libertad, en el sentido ya descrito, respeta la fe ajena, pro proclama la única verdad que da trascendencia a las acciones y actos que hacen sujetos de la gracia a las personas.  La llamada buena fe, las buenas intenciones no están por encima del esplendor de la verdad que dignifica al hombre. En este orden es cierta la frase que dice: el camino del infierno está empedrado con buenas intenciones.

La gracia, es también un don que se otorga a la persona cuando esta busca de buena fe apoyo en quien le otorgo la existencia. Esta actitud le injerta con su creador y le convence que no solo es peregrino de la tierra sino también ciudadano que camina buscando la paz del más allá que es su destino por ser creatura, creada.  La dignidad de la persona nos impulsa a buscar ese destino.

davidbravocid@yahoo.com.mx

 

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