Pueblo en vilo

  • Atilio Peralta Merino

En el señero año de  1968  ,  Luis González y González publicó “Pueblo en Vilo”, a no dudarse,  una de las obras  clásicas y fundamentales  de la historiografía mexicana  ,  en la que se relata la evolución sociológica y urbanística del poblado de San José de Gracia, “tenencia”, como se les dice por aquellos lares a los   equivalentes  de nuestras “juntas auxiliares”, del Municipio de “ Marcos Castellanos” en el estado de Michoacán de Ocampo.

Los poblados actuales no guardan relación alguna con los pueblos que  los hombres de nuestra generación habrían  conocido en su  infancia;  el abandono de las actividades agrícolas o su concentración específica en nichos y espacios altamente tecnificados por un lado,  y  la especulación desmedida de constructores y desarrolladores urbanos; terminó por convertir  aquellos antiguos puebla   en  suburbios citadinos extirpando por completo de nuestro panorama la civilización rural.

La memoria de los sucesos de la “Guerra Cristera” en aquel poblado limítrofe a Jiquilpan, resulta clave para conformar la identidad de San José de Gracia tal y como lo refiere el propio Luis González y González,  y   el cultivo de la mariguana formaba desde el año de 1968 una de las alternativas a contemplarse en la localidad.

En núcleos urbanos como lo es hoy por hoy San José de Gracia,  el  silencio de la nocturnidad no es ya interrumpido esporádicamente por los ruidos emitidos por la fauna de la localidad  conformada eventualmente  por  zorrillos, coyotes  u otras especies  ;  tampoco las creaturas mágicas habitan ya los bosques despoblados de faunos y de hadas; en lugar de ello las ráfagas de los disparos interrumpen el silencio de la noche que ante las luces de  neón de los promocionales espectaculares han eliminado todo espacio para el mito y la leyenda, a no ser aquellas que se acrisolan en las letras de los narcocorridos.

El libro formidable de Luis González y González,  brinda inmejorables elementos de reflexión en torno a los álgidos sucesos que se viven en Michoacán en los días que corren, en los que, con las peculiaridades pertinentes  que indudablemente asisten al caso, pueda verse reflejada la nación entera.

albertoperalta1963@gmail.com

Opinion para Interiores: 

Anteriores

Atilio Peralta Merino

De formación jesuita, Abogado por la Escuela Libre de Derecho.

Compañero editorial de Pedro Angel Palou.
Colaborador cercano de José Ángel Conchello y Humberto Hernández Haddad y del constitucionalista Elisur Artega Nava