Se efectuó el 1er Encuentro de Dramaturgia en Puebla - Dramaturgos Contemporáneos Poblanos organizado en ÁGORA – Artes Escénicas por Pablo Cano, becario del Programa de Estímulos a la Creación y Desarrollo Artístico del Estado, durante el cual, tres escritores de literatura dramática y teatral compartimos además de fragmentos de nuestra obra creativa, especificidades de la estructuración dramática-escénica de nuestros proyectos más reconocibles, peripecias del tránsito entre la idea y la realización espectacular, más la movilidad de las obras y las complicaciones para sostener vigente un repertorio de teatro de autor. Pablo, a su vez, impartió un taller de dramaturgia, como parte de su retribución al programa que lo apoyó para esta y otras acciones artísticas y culturales.

De lo que problematizamos en la sesión de apertura del encuentro, es de la nimia referencia que se tiene de lo dramático y los componentes que estructuran la literatura dramática y sus catalizadores de progresión profunda. Lo que limita las lecturas para la puesta en escena e inclusive en lo que toca a la propia dramaturgización de la obra que se aspira llevar a cabo. Comprendiendo el campo de la dramaturgia, más allá del autor que escribe obras para ser representadas con las convencionalidades de lo teatral; la dramaturgia como herramienta y metodología para entramar fábulas y montajes más eficaces, verosímiles y congruentes.

La interacción con los actores o actrices – personajes, nos condujo a poner en consideración la poderosa carga de juego dramatúrgico – teatral, que recae en los sujetos de la acción dramática. Razón que exige mayor conocimiento del complejo andamiaje y motorización de lo dramático – teatral, además de los dramaturgos, en todos los partícipes de las prácticas escénicas. Lo que puede depurar la mirada externa, para articular montajes y lecturas más rigurosas y, poética-estéticamente más legibles.

No obstante la convocatoria abierta a la comunidad, sólo pocos cómplices se acercaron y compartieron este intercambio. Pues incluso los anfitriones de este evento, se mantuvieron al margen de las disertaciones y aportaciones de este, que busca ser un encuentro.

Por otra parte, en Casa del Escritor finalizaron los Talleres Literarios 2013 con la lectura de poemas en el caso de los alumnos del maestro Eduardo Langagne, los alumnos del maestro Hernán Lara Zavala leyeron fragmentos de sus narrativas, del maestro Felipe Garrido sus alumnos nos compartieron algunos de sus ensayos; finalmente con Fernando de Ita, dos compañeras compartimos, una crónica y algunas apreciaciones sobra la praxis de la crítica en Puebla.

A decir, si criticas, te devaneas entre la objetividad de lo que presencias y la subjetividad de tus indicios acerca de los contenidos internos y los formatos de la representación que intentas analizar, leer o, criticar. Luego, la calidad de factura de los constructos espectaculares, más los tratamientos temáticos o anecdóticos, lo cual demanda saberes mínimos respecto a la disciplina que se intenta tramitar.

Está también el gradiente de rigor en el ensamble y la ejecución de los componentes de las puestas en escena, además de las plataformas de producción, diferenciando a un conjunto independiente de una agrupación con subvenciones institucionales o las compañías auspiciadas por la iniciativa privada.

Más que orientar al público, porque no es precisamente la audiencia cautiva la que te lee, sino algunos de tus “colegas”, cuando los mencionas en tus notas de manera favorable o no, son los lectores posibles, que tal vez, puede tener una columna o espacio de reseña y crítica del arte escénico. Lo que deseamos son mejores productos de arte escénico, más aún para el público en ciernes, padres de familia con sus niños.

Comprometerse a la nada remunerable y sí a veces, muy desgastante labor de la crítica teatral, en contadas ocasiones genera diálogos y retroalimentación, pues los compañeros de gremio se resisten a una mirada alterna a la suya, que pueda manifestar una opinión contraria a los resultados a los que llegaron, aquellos quienes ofrecen públicamente sus funciones teatrales.

Parece que ni en las “altas esferas” de la academia y la investigación teatral, ni en los bajos fondos de los todólogos de la práctica espectacular, se consigue todavía una sinergia crítica, que analice oportuna y propositiva los distintos espectros del arte dramático – escénico.

No es suficiente con la enorme oferta que nos trae el FITHA por ejemplo, al cual asisten muy pocos autodenominados “teatreros”, puesto que, o están ensayando a marchas forzadas lo que han de estrenar en el propio festival, o están en temporada compitiendo con obras de talla internacional y gratuitas o, ¿para qué?

Lo que nos brinda este intento epistemológico de leer críticamente las obras de artes escénicas, es tratar de mantener la mente organizada para transmitir los filtros de nuestra mirada y escucha, nos obliga al estudio y la actualización continuos; nos involucra a buscar comprender del mejor modo posible lo que nos cruza axiológicamente, de las historias y los temas que de-construimos en la propia crítica, la cual, a su vez, nos vuelve más críticos para con nosotros y con los otros.

Del repudio por la ignota interpretación, al clic por la ignara concepción, hay miríadas de lecturas por de medio…

¡Felices fechas y prósperas incorporaciones!