Como cada año desde 1982, el 29 de abril celebramos el Día Internacional de la Danza. Esta conmemoración fue propuesta por el Comité Internacional de Danza, que forma parte del Instituto Internacional de Teatro (ITI/UNESCO). Se propuso esta fecha, debido a que corresponde al natalicio del bailarín francés, profesor y revolucionador del ballet, Jean-Georges Noverre.

El Día Internacional de la Danza, es una fiesta gozosa para: los creadores, los intérpretes, los aprendices; en fin, para todos los amantes de esta apasionante manifestación artística; que es más que sólo movimiento en códigos determinados.

La cartelera está llena de una oferta cultural diversa en sus estilos y esquemas de realización y producción. Hay programación de actividades académicas y recreativas, y un sinfín de bailes y propuestas coreográficas.

Instituciones públicas y privadas se suman al festejo, y lo mismo bailan: los grupos infantiles, los cuadros juveniles, elencos en proceso de perfeccionamiento y también bailarines y grupos profesionales. Lo que nos permite vislumbrar el amplio espectro que contiene el concepto “danza”.

En nuestro territorio, hay un abanico amplio de posibilidades de apreciación de la danza. A decir, compañías posicionadas como la cebra danza gay, creada en 1996 por su director y coreógrafo José Rivera; quien leerá en Puebla el mensaje correspondiente a este año internacional de la danza; grupos amateurs, tríos, solos, cuartetos. Géneros variados como: bailes populares, danzas africanas, baile callejero, ballet clásico, danza contemporánea, baile coreográfico, performance, acro – danza, danza árabe, jazz dance, hip hop, telas, neo – ballet.

Como cada 29 de abril, el mundo celebrará esta fecha, bailando. Para este 2016, Lemi Ponifasio de Nueva Zelanda, nos comparte su poético mensaje, traducido al castellano por Arantxa Azurmendi:

KARAKIA

(Oración)

Toca el cosmos

la fuente de la divinidad,

iluminando

el rostro de los ancestros

para que podamos ver a nuestros niños.

Entretejida por encima, al lado, debajo,

armoniza todo lo que hay dentro de

nuestra carne y de nuestros huesos

y de la memoria.

La Tierra gira,

los humanos emigran en masa,

las tortugas se reúnen en silenciosa alerta,

el corazón está herido.

Haz de la danza

un movimiento de amor,

un movimiento de justicia,

la luz de la verdad.