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Calpan, sus casas gastronómicas y el chile en nogada
“Casas gastronómicas” es el concepto que este año comenzó a usarse para hacer referencia a los lugares de Calpan que se dedican a la preparación y venta de los chiles en nogada, platillo tradicional poblano, que se encuentra celebrando su feria número 19 en dicho municipio de Puebla.
La cronista gastronómica Ana Teyssier es la creadora de este término, el cual surgió mientras escribía el libro “Puebla: Un amor glotón por los chiles en nogada” (2021). Teyssier señala que buscó vincular el significado náhuatl de Calpan: “sobre el caserío” o “lugar de las casas”, con la necesidad de dignificar los espacios para elaboración y venta de este platillo.
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Según detalla la investigadora poblana, a raíz de la pandemia por covid-19, las cocineras y expositoras, ahora llamadas cocineras tradicionales, llevaron a la venta de este producto de los stands a sus casas.
“Las restricciones sanitarias por el coronavirus-19 impidieron llevar a cabo la Feria del Chile en Nogada, donde las expositoras o cocineras tradicionales ofertan chiles en nogada en stands o estanquillos, otras lo hacen en sus casas y, en los últimos años, algunas lo hacen en ambos lugares con la tendencia a llamarse ‘casas’ más un nombre propio”, detalla Teyssier.
Este término “casas gastronómicas” fue presentado a la Dirección de Cultura y Turismo del Gobierno Municipal de Calpan, siendo la 19 Feria del Chile en Nogada de Calpan 2022, la primera vez que se utiliza.
“La Casa de Chile y Nogada es la primera casa gastronómica, la cual forma parte de la Escuela Comunitaria del Tradicional Chile en Nogada”, añade Ana Teyssier, quien además coordina dicha escuela.
Finalmente, la investigadora señala que las casas gastronómicas no solo hacen referencia a los espacios dedicados a la mercantilización del chile en nogada, ya que los hogares que preparan este platillo para sus familiares o personas más allegadas también son guardianes de esta tradición.
Respecto a la importancia de estos espacios, la experta enfatiza en que sirven para dignificar “los espacios llamados comúnmente fondas, restaurancitos, changarros, etcétera. No se trata únicamente de cambiar el nombre de estos espacios sino de resignificarlos y convertirlos en espacios gastroculturales que van más allá del lucro, son para la conservación, difusión y salvaguarda del chile en nogada tradicional, los frutos tradicionales para su elaboración y la de otros platillos tradicionales”.