El crecimiento urbano desordenado en Cuautlancingo es el problema medioambiental más importante que enfrenta el municipio, reveló Rafael Ramírez, regidor de Migración, Trabajo y Medio Ambiente, y alertó que en la cabecera se ha empezado a registrar un déficit de más del 80 por ciento en el suministro de agua potable.

En entrevista Ramírez precisó que uno de factores ha sido el disparo de permisos para la construcción de fraccionamientos en el municipio, donde se ha detonado la industria, que ha traído consigo una voracidad inmobiliaria que no ha encontrado freno.

“Cuautlancingo enfrenta un grave problema en el suministro de agua, que se ha visto disminuir en la cabecera y que ya trastoca el bienestar de los habitantes. Este es un problema que nos estallará muy pronto”, reconoció.

Refiriéndose a las protestas de la pasada semana por vecinos del fraccionamiento Las Trojes Almecatla por el suministro de agua sucia, confesó que estos conflictos no son los únicos que enfrenta la entidad.

Refirió que en las horas pico, las vialidades de la zona del Parque Fimsa presentan un congestionamiento comparable al del Distrito Federal, dado el crecimiento urbano del lugar,  sin que autoridades hayan tomado acciones para revertir este fenómeno.

Ramírez dijo que el impacto medioambiental no se ha dimensionado así como tampoco se ha atendido a la población que necesita urgentemente mejores servicios y la infraestructura que los mantenga conectados con escuelas y puestos de trabajo y atención médica digna.

Llamó a funcionarios a “poner orden” y actuar con mayor  firmeza a constructores vigilancia del proyecto pero también a “ver” la urbanización como un fenómeno integral y diseñar un plan de dirección.

Foto archivo El Sol de Puebla