Mark Alexander, presidente de la Federación Sudafricana de Rugby, señaló este lunes a algunos equipos que militan en la versión local del Super Rugby por jugar con demasiados jugadores blancos, en detrimento de los de otras razas.

Mediante una carta enviada a los equipos y que la AFP pudo consultar, Alexander destacó que los Pumas de Mbombela (ciudad ubicada al nordeste del país) jugaron contra Stormers el mes pasado con únicamente dos jugadores negros dentro de su XV inicial.

Además, explicó que no encuentra justificación ante el ministro de Deportes, Nathi Mthethwa, sobre que todos los entrenadores de los equipos del Super Rugby sean blancos, por lo que el dirigente recordó que no es válida la excusa de que los negros podrían no jugar tan bien como lo hacen los blancos.

“El triunfo en la Copa del Mundo no da un salvoconducto a los contrarios al cambio", criticó el dirigente en referencia a las medidas adoptadas para que haya más diversidad racial tanto en la selección nacional como en los propios clubes. Apenas seis de los quince titulares que disputaron la final en el último Mundial (con triunfo ante Inglaterra hace un año en Japón) eran negros.

Desde la época del apartheid la segregación racial se vio como una norma en el rugby y los Springboks jugaron sólo con jugadores blancos durante 90 años, hasta que (en 1981) Errol Tobias fue seleccionado para un partido contra Irlanda.

Tras el nacimiento de un Estado multirracial en 1994 la situación no cambió mucho para el rugby sudafricano. En 1995, el wing Chester Williams figuró como el único titular en el equipo que se proclamó campeón del mundo; en 2007, en su segundo título mundial, fueron dos: Bryan Habana y JP Pietersen.

No fue sino hasta 2018 que Rassie Erasmus fue elegido seleccionador nacional, para que los negros estuvieran mejor representados en los Springboks y una de las primeras decisiones del técnico fue nombrar como capitán a Siya Kolisi, que fue quien levantó la copa de campeón en Japón luego de derrotar en la final a Inglaterra por 32-12 hace un año.

Con información de Excélsior y Marca España