Identidad fragmentada en la era digital

  • Carlos Anaya Moreno
Cómo las redes sociales, el metaverso y la inteligencia artificial afectan nuestras vidas

Hoy en día vivimos en una era en la que nuestras vidas están profundamente entrelazadas con la tecnología. Las redes sociales, el metaverso y la inteligencia artificial (IA) están transformando la manera en que interactuamos, nos percibimos a nosotros mismos y nos conectamos con los demás. Pero, ¿qué implicaciones tiene todo esto para nuestra identidad y vida social? Este artículo explora cómo estas herramientas tecnológicas, aunque poderosas, pueden fragmentar nuestra identidad y desorganizar nuestras comunidades.

La fragmentación de la identidad en la era digital

Vivimos en un mundo donde podemos ser múltiples personas al mismo tiempo: un profesional en LinkedIn, un aventurero en Instagram, y un crítico social en Twitter. Y si a esto le añadimos el metaverso, donde puede habitar identidades completamente diferentes, la fragmentación de la identidad se vuelve aún más compleja. Como lo señala Sherry Turkle, en su libro Alone Together (2011), la multiplicidad de identidades digitales puede llevar a una sensación de alienación, tanto de uno mismo como de la comunidad. En este entorno, nuestras relaciones pueden volverse superficiales porque se basan en versiones fragmentadas y cuidadosamente curadas de quienes realmente somos.

Comparación social y coherencia psicológica

La comparación social no es algo nuevo, pero en la era digital se ha vuelto más intensa. Constantemente nos comparamos con las vidas idealizadas de los demás que vemos en las redes sociales. Leon Festinger, en su teoría de la comparación social, explica cómo las personas evalúan sus propias capacidades y valores en comparación con los demás (Festinger, 1954). Hoy en día, esta comparación se magnifica porque la Inteligencia Artificial (IA) nos muestra solo las versiones más atractivas y exitosas de otras personas, distorsionando nuestra percepción de la realidad.

Esta constante comparación afecta no solo a nuestra identidad personal, sino también a cómo interactuamos con los demás. Nuestras interacciones sociales pueden volverse menos auténticas, más enfocadas en la autopresentación que en la conexión genuina. Y como resultado, las relaciones que construimos en estos entornos pueden ser menos significativas y más efímeras.

La pérdida de coherencia en la vida social

La sobrecarga de información y la exposición a múltiples realidades pueden llevar a lo que se conoce como decoherencia psicológica, una pérdida de coherencia interna en la identidad y en los procesos mentales. Según Bawden y Robinson (2009), la exposición constante a grandes volúmenes de información puede generar confusión mental y afectar nuestra capacidad para tomar decisiones. Esto no solo afecta a los individuos, sino también a las comunidades, que se vuelven más fragmentadas y menos cohesionadas.

Entropía social y desorganización comunitaria

La entropía, un concepto de la Física que se refiere al desorden en un sistema, también se aplica al ámbito social. Schroeder (2014) explica cómo un exceso de información puede desbordar nuestra capacidad mental, llevando al caos y la desorganización. En el contexto social, la entropía se manifiesta cuando nuestras interacciones se vuelven caóticas y nuestras comunidades, más fragmentadas. La IA, que personaliza nuestras experiencias, puede contribuir a esta entropía al crear burbujas de información que nos aíslan de diferentes perspectivas, aumentando la polarización y el conflicto.

Pericoresis psicológica y social: un camino hacia la coherencia

El concepto de pericoresis, tomado de la teología, se refiere a la interconexión y comunión perfecta entre las personas, sin pérdida de individualidad. Catherine Mowry LaCugna (1991) sugiere que este concepto puede adaptarse a la era digital, ayudándonos a mantener una coherencia en nuestra identidad y nuestras relaciones sociales, incluso en un entorno tan fragmentado. La pericoresis psicológica implica que nuestras diferentes identidades no solo coexisten, sino que se enriquecen mutuamente, creando una identidad robusta y flexible que puede adaptarse a diferentes contextos sin perder su coherencia.

Estrategias para reducir la entropía y fomentar la pericoresis social

Para enfrentar los desafíos de la fragmentación de la identidad y la entropía social, es fundamental desarrollar estrategias que nos permitan integrar y armonizar nuestras identidades digitales y reales. Anthony Giddens (1991) subraya la importancia de mantener una narrativa coherente de uno mismo, incluso en un mundo en constante cambio. Prácticas como la atención plena (mindfulness), promovida por Jon Kabat-Zinn (1990), pueden ayudarnos a observar cómo nuestras diversas identidades se afectan mutuamente y a hacer ajustes conscientes para mantener la coherencia interna y social.

Además, la creación de espacios para la interacción social genuina, libres de las distracciones digitales, es crucial para fomentar relaciones auténticas y reducir la entropía social. Al desconectarnos periódicamente del metaverso, las redes sociales y las plataformas impulsadas por IA, podemos reflexionar sobre cómo nuestras identidades digitales se alinean con nuestros valores fundamentales y mantener un sentido de coherencia en nuestras vidas.

Conclusión

La era digital ha transformado nuestras vidas de maneras que apenas comenzamos a comprender. Si bien las redes sociales, el metaverso y la inteligencia artificial ofrecen oportunidades sin precedentes para la conexión y la creatividad, también presentan desafíos significativos para nuestra identidad y vida social. Al comprender los conceptos de fragmentación de la identidad, decoherencia psicológica, entropía social y pericoresis, podemos desarrollar estrategias para navegar este nuevo mundo digital con mayor coherencia y autenticidad.

Referencias
Bawden, D., & Robinson, L. (2009). The dark side of information: Overload, anxiety and other paradoxes and pathologies. Journal of Information Science, 35(2), 180-191.
Festinger, L. (1954). A Theory of Social Comparison Processes. Human Relations, 7(2), 117-140.
Giddens, A. (1991). Modernity and Self-Identity: Self and Society in the Late Modern Age. Polity Press.
Kabat-Zinn, J. (1990). Full Catastrophe Living: Using the Wisdom of Your Body and Mind to Face Stress, Pain, and Illness. Delacorte.
LaCugna, C. M. (1991). God for Us: The Trinity and Christian Life. HarperOne.
Schroeder, M. (2014). The Entropy of Human Cognition: How Information Overload Affects Mental Functioning. Journal of Cognitive Psychology, 26(3), 244-259.
Turkle, S. (2011). Alone Together: Why We Expect More from Technology and Less from Each Other. Basic Books.
Anaya, C. Suarez D. Impacto psicológico de la decoherencia y la entropía*.  e-consulta. Agosto 21, 2024.
Anaya, C. Biología Cuántica y Filosofía: una forma de comprender la vida. e-consulta. Agosto 16, 2024.
Anaya, C. Física cuántica y filosofía. e-consulta. Agosto 7, 2024
Anaya, C. El universo como información. e-consulta. Enero 17, 2024

Opinion para Interiores: 

Anteriores

Carlos Anaya Moreno

CEO de Servicios Geo Enlace, empresa de Internet de las cosas desde el año de 2010; y fundador de la Unión de Servicios Solidarios-Banco de Tiempo (2018). Se desempeñó como director General del Registro Nacional de Población de 2004 a 2010.