Gobiernos que vienen

  • Elmer Ancona Dorantes
Hay elementos técnicos y principalmente humanos que son indispensables en los funcionarios

Ahora que el próximo gobernador Alejandro Armenta y el también electo presidente municipal José Chedraui están dando a conocer a los funcionarios públicos que estarán en sus respectivos gabinetes, lo primero que nos viene a la mente es qué tipo de perfil deben tener para dar excelentes resultados.

Por lo que se ha publicado, algunos de ellos tienen experiencia en el campo del servicio público, por haber sido secretarios en sexenios pasados o bien porque han pasado por los recintos legislativos a nivel local o federal.

Algunos de ellos, de acuerdo con información publicada, tienen trayectoria académica por haber estudiado posgrados no sólo en México, sino en el extranjero.

No dudo que estos gabinetes se caractericen por reunir a profesionales con un alto grado de expertise en las responsabilidades y tareas que se les encomiende, pero eso no basta hoy en día.

Hay elementos técnicos y principalmente humanos que son indispensables, vitales para hacer del estado y de Puebla capital algo muy diferente a lo que ahora son.

Desde mi punto de vista, los “nuevos” funcionarios públicos deberían reunir las siguientes características, propias de quienes hoy asumen responsabilidades de mando en el concierto nacional e internacional. Aquí algunas de ellas:

1.- Tener visión prospectiva: En México, la mayoría de los políticos están acostumbrados a caminar con la mirada hacia atrás, terminan aplicando viejas políticas de gobierno que ya no dan para más. Son más retrospectivos que visionarios. La mentalidad de la gente, pero esencialmente de las nuevas generaciones, demandan otros roles de autoridad.
2.- Apostar por gestiones disruptivas: Aunque no es un concepto tan nuevo en el mundo de la administración pública, en las naciones más adelantadas y progresistas, en las más modernas y desarrolladas, están apostando por nuevas formas de entender a la sociedad que gobiernan; las necesidades de la gente serán siempre las mismas: laborales, de alimentación, de salud, educación o seguridad, lo cierto es que los mecanismos que se deben aplicar o instrumentar deben ser eficaces, eficientes y efectivos para lograr una satisfacción colectiva. Ser “Maestro en…” o “Doctor en…”, en sí mismo, quizá no le aporte nada a la gente. Un campesino con sentido común podría gobernar mejor.
3.- Crear tejido y cohesión social: Este es el elemento más importante para todo gobierno que se diga digno de ser profesional e incluso ético; los nuevos gobernantes podrán dominar todos los aspectos de la administración pública, pero si no centran toda su atención en lograr un mayor tejido social, una desarrollada cohesión social, con alta participación ciudadana, estarán condenados al fracaso. Harán gobiernos de “soliloquios”.

En pocas palabras, si los funcionarios públicos entrantes no reúnen estas tres cualidades, difícilmente podrán hacer de este estado y de la ciudad capital algo más vanguardista que coloque a Puebla en un lugar privilegiado, ya no digamos en el concierto de las naciones, sino a nivel nacional.

¡Vaya tarea la que tendrá Alejandro Armenta y José Chedraui al asumir los cargos que les corresponde!

Como ciudadanos debemos apostar más por su virtudes y capacidades que por sus defectos y limitaciones que -créanme- es de lo que más estamos llenos los seres humanos, tan dados a querer seguir viviendo en el error.

De Alejandro Armenta se me quedó grabada una expresión que tuvo al final de su campaña: “Tengo temor de Dios”. Ojalá que se la crea en serio, porque si algo no perdona Dios en esta vida es que un gobernante haga sufrir a su amado pueblo.

@elmerando

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Elmer Ancona Dorantes

Periodista y analista político. Licenciado en Periodismo por la Carlos Septién y maestro en Gobierno y Políticas Públicas por el Instituto de Administración Pública (IAP) y maestrante en Ciencias Políticas por la UNAM. Catedrático. Ha escrito en diversos medios como Reforma, Milenio, Grupo Editorial Expansión y Radio Fórmula.