Asunto viejo, nombre nuevo
- Alejandra Fonseca
El nombre nuevo es “Trata de personas”, el problema viejo es la explotación y esclavitud que realizan unos seres humanos en detrimento de otros por medio del engaño, abuso, coacción, secuestro, rapto y sometimiento para obtener beneficios (financieros o de otro tipo).
Primero fue la esclavitud en la época colonial. Desarraigaban a colonias completas de africanos e indígenas de sus lugares de origen para usarlos en mano de obra, servidumbres y como objetos sexuales. Por igual eran hombres que mujeres, jóvenes, en cualquier condición (embarazadas). Era una práctica aceptada por la población y por los Estados. Era “natural”. Ni por error era considerado delito. Los colonizadores trataban a los desarraigados o colonizados como seres sub humanos, se apropiaban de ellos como objetos y los usaban para los múltiples servicios que se les ofrecieran.
A finales del siglo XIX y principios del XX, se le llamó “Trata de Blancas”, y consideraba delito, ya que se trataba de mujeres de tez blanca para servir como prostitutas o concubinas en diferentes países. Se habla principalmente de países árabes, africanos o asiáticos. En 1904 hubo un movimiento fuerte de carácter abolicionista contra la esclavitud de las mujeres, contra la prostitución ajena y eso le dio rango de “problema social”.
En 1949 la Asamblea General de las Naciones Unidas realiza el Primer Convenio para la Represión de la Trata de Personas y de la Explotación de la Prostitución Ajena. Este convenio tiene 74 ratificaciones y continúa vigente. Lleva por nombre Protocolo de las Naciones Unidas para Prevenir, Reprimir, y Sancionar la Trata de personas, Especialmente Mujeres y Niños. En la Convención de Palermo, adoptado en Italia en el año 2000, se hizo complementario, junto con otros dos, a la Convención de las Naciones Unidas Contra la Delincuencia Organizada Transnacional.
Durante las décadas de los 70’s y 80’s del siglo pasado se empieza a poner en la mesa de la discusión que el concepto “Trata de Blancas” ya no corresponde a lo que está sucediendo: no son sólo mujeres, no son sólo de tez blanca, (son mujeres y hombres de todas las edades –bebés, niñ@s, adolescentes y adultos jóvenes-)- la manera de desplazarlas, de comercializarlas y la naturaleza y dimensiones de los abusos rebasaron toda predictibilidad.
Ahí comenzó a utilizarse el concepto de “Tráfico humano” o “Tráfico de personas” (Human trafficking or trafficking in persons, en inglés) para apelar a este fenómeno social. Pero el concepto de “Tráfico de personas” no englobaba todo el fenómeno que ya se manifestaba dado que el tráfico de personas es facilitar un cruce de fronteras sin cumplir requisitos administrativos o legales. Ahí los traficantes obtienen un beneficio financiero que se termina en la consecución del objetivo y el delito es contra el país que se introducen los seres humanos que son ingresados ilegalmente con su consentimiento.
El uso del concepto “Trata de personas” se adopta al haber engaño, abuso, coacción, secuestro, rapto y sometimiento. Los traslados de estas personas no son necesariamente a otros países. Y la relación entre el tratante y la víctima es de continua explotación y esclavitud en múltiples áreas como: la laboral, sexual, militar, narcotráfico, adopciones ilegales, servidumbre, tráfico de órganos, fábrica de niños, prácticas esclavistas y trabajos forzados, entre otros. Este delito es contra la persona al violar sus derechos y libertades humanas al no haber consentimiento, no es un delito contra el Estado.
Es bueno saber con claridad de qué estamos hablando y dónde nos estamos metiendo.
alefonse@hotmail.com
Trafficking es un vocablo en inglés que significa “trafico, comercio, mercancía.
http://oas.org/atip/Reports/Trata.Aspectos.Basicos.pdf