- Economía
Informalidad y bajos salarios impactan al PIB de Puebla
La tasa de informalidad laboral en Puebla es más alta que el promedio nacional, es decir que el 80 por ciento de los poblanos perciben salarios bajos y esto no permite aumentar su consumo, un indicador económico clave para el crecimiento, informó experto de la UPAEP.
El doctor Marcos Gutiérrez Barrón, catedrático de la Facultad de Economía de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP), señaló que los empleos informales son de mala calidad, no dan prestaciones y pagan muy poco, lo que lastima la economía familiar.
El economista afirmó que es el 3 por ciento de la población la que no se encuentra ocupada, pues de la Población Económicamente Activa (PEA) el 97 por ciento tiene algún tipo de empleo, pero la mayoría percibe apenas un salario mínimo.
El 33.8 por ciento de las personas ocupadas reportó percibir un salario mínimo, otro 33.3 por ciento dijo que gana de uno a dos; 9.7 por ciento dijo que recibe de 2 a 3 salarios mínimos; 3.9 gana de tres a cinco y sólo 1.5 por ciento gana más de cinco salarios mínimos.
La afectación es principalmente a la economía familiar, lo que impacta a la economía en su totalidad, señaló Gutiérrez Barrón quien detalló que con salarios muy modestos y con precios al alza, se afecta mucho el bienestar de las familias”.
Se suma la inflación a la radiografía económica
El consumo forma parte de los indicadores económicos clave para el crecimiento, pero con los salarios tan bajos y la inflación elevándose, sobre todo en el precio de los alimentos, las familias poblanas y mexicanas no pueden participar para incrementar el indicador, aseveró el experto.
El catedrático indicó que la inflación en Puebla fue de 7.18 por ciento durante la primera quincena de mayo y la nacional, de 7.58 por ciento pero la inflación en los alimentos fue de 11.23 por ciento.
Consideró que aunque se espera que la inflación cierre el año entre 6.5 o 7 por ciento, está por encima de la inflación objetivo del Banco de México, que es de 3 a 3.5 por ciento.
En términos anuales, el consumo privado en general aumentó 8.5 por ciento; el consumo de bienes, 4.4 por ciento, y el de servicios, 11.2 por ciento, mientras que el de bienes de importación creció 14.6 por ciento, de acuerdo con el catedrático.
“El consumo es el motor que necesita la economía y lo tenemos así, porque tenemos un mercado laboral frágil y tenemos salarios bajos”, lamentó Gutiérrez Barrón.
La inversión a la baja, otro indicador que golpea al PIB
La inversión indica qué se está llevando a cabo en el proceso productivo del país y engloba a la maquinaria y equipo, así como la construcción.
Aunque en maquinaria y equipo hubo un crecimiento de 6 por ciento anual, la construcción, que engloba a más de 100 industrias entre ellas las del vidrio, el ladrillo y el cemento, solamente creció 1.7 por ciento, lo cual representa una debilidad en este indicador.
Por todo lo anterior, el Producto Interno Bruto (PIB) no tiene un buen pronóstico de crecimiento este año, dijo el experto de la UPAEP pues dijo que se espera un cierre cercano a 1.5 por ciento, cuando ya este indicador cayó un 4.4 por ciento respecto al año pasado.
El PIB es el indicador global de la producción económica que revela cómo van las cosas en la economía de un país o un estado y se ve afectado por la inversión, el gasto de gobierno y el consumo, que a su vez se ve impactado por la inflación y los salarios.
Marcos Gutiérrez Barrón dio a conocer que por cada punto porcentual que el PIB avanza, se crean aproximadamente 100 mil empleos nuevos en el país, de ahí la importancia de que el estado de Puebla desarrolle su economía.