El nuevo patronato de la UDLAP y la Fundación Mary Street Jenkins (FMSJ) se enfrentaron otra vez por el control del campus mientras que la comunidad estudiantil denunció acoso y hostigamiento para apoyar a la nueva administración.

Las instalaciones de la Universidad de las Américas Puebla (UDLAP) se encuentran cerradas debido a la pandemia y “es falso que las instalaciones se encuentran tomadas y que exista presencia de fuerza policial armada en el campus”, declaró el nuevo patronato.

No obstante, la comunidad estudiantil  calificó de preocupante “las reiteradas llamadas al número personal” de los alumnos de parte del nuevo patronato, el cual no reconocen por el conflicto legal que aún no tiene resolución definitiva.

Para el nuevo patronato, no está tomada la escuela y se protege en la mayor medida posible, la salud del personal administrativo, sindicalizado, académico y estudiantado frente al Covid-19.

El campus se encuentra cerrado  “en concordancia con los lineamientos de las autoridades de Salud y Educación del estado de Puebla y para la protección de la comunidad universitaria”.

La comunidad universitaria informó en un comunicado que se debe devolver la universidad en las condiciones en las que se encontraba antes “de la entrada de los elementos armados”, el 29 de junio, cuando estaban en poder de la administración de Luis Ernesto Derbez.

El nuevo patronato defendió que el 28 de abril fue nombrado por la Junta para el Cuidado de las Instituciones de Asistencia Privada del Estado de Puebla y su designación es legal.

En tanto, las actividades académicas y laborales de la UDLAP continúan, además del cuidado del campus de San Andrés Cholula. Actualmente, refiere, se realizan las inscripciones con miras a regresar a clases en línea el próximo 9 de agosto.

También dio a conocer que “aun cuando prevalece un litigio en tribunales, en todo momento se han cubierto los pagos del personal que labora en la universidad”.

El nuevo patronato, que dirige Horacio Magaña, hizo un llamado para que la vida universitaria no se vea afectada por “el conflicto que hoy se dirime en tribunales” y que no exista información distorsionada, pues ésta sólo genera confusión y afecta el prestigio de la UDLAP.

La postura de la comunidad estudiantil es la misma, que el conflicto legal no debe afectar más la vida universitaria, pero que eso sólo será posible devolviendo la universidad.

FMSJ: juez ignora devolución del campus

La Fundación Mary Street Jenkins (FMSJ) acusó que Roberto Yáñez Quiroz, Juez 24 Civil en la CDMX, quien permitió al nuevo patronato tomar el campus de la UDLAP, se ha declarado incompetente en el caso, evadiendo su responsabilidad de dar cumplimiento a la suspensión de amparo vigente, que ordena devolver el campus al patronato presidido por Margarita Jenkins de Landa.

La FMSJ detectó que, con el propósito de eludir su cumplimiento, se enviaron a la Oficialía de Partes del Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México las actuaciones que ordenan a Yáñez el acatamiento de la suspensión otorgada desde el Poder Judicial de la Federación.

Por su parte, Yáñez Quiroz envió un oficio al Juez Federal de Puebla, en el que le informa que ya no tiene el expediente. Esto luego de que el día de hoy se declarara “incompetente” para seguir llevando el caso y se lo enviara al Juez 60 de lo Civil.

Finalmente, la FMSJ realizó un llamado al Consejo de la Judicatura de la Ciudad de México para que investigue las acciones de Yáñez Quiroz, las cuales violan el Estado de Derecho buscando facilitar el apoderamiento ilícito de patrimonio privado a través de medidas que ya fueron anuladas por un juzgado federal.

Alumnos denuncian acoso

La comunidad estudiantil manifestó su rechazo a la situación que se vive en la institución y desde el comité #YoSoyUDLAP '' condenó la llegada del nuevo patronato.

“Lo más preocupante son las reiteradas llamadas al número personal de integrantes de nuestra comunidad, presionándolos para entablar un diálogo, con la intención de poder decir cuanto antes “hay diálogo con la comunidad estudiantil”. Estos métodos, invasivos e intimidantes, son peligrosos y ponen en riesgo la integridad de nuestros compañeros”, acusan. 

En su opinión, falta transparencia y existe simulación para entablar diálogo con las autoridades, incluido el nombrado rector Armando Ríos Piter.

“El acoso y la  intimidación a la comunidad universitaria están muy lejos de ser parte de un funcionamiento normal. Estas formas, más que acciones propias de una rectoría, parecen simulaciones”, refieren.   

Una versión previa de este texto fue enviada al diario Excélsior, como réplica a una columna de @RiosPiterJaguar. A la feecha, no recibimos respuesta alguna. pic.twitter.com/zyX1u3k2OI

— Yo soy UDLAP (@YUdlap) August 5, 2021

Hay compromiso, dice nuevo patronato

El nuevo patronato de la UDLAP informó que su compromiso es garantizar que la administración mantenga la excelencia académica, los convenios internacionales y las becas.

“También respaldamos el llamado del rector (Armando Ríos Piter) nombrado por este Patronato, en el sentido de evitar que los procesos legales interrumpan la vida cotidiana de la comunidad universitaria e interfieran con la calidad académica. Ésta es responsabilidad de todos los involucrados. Haremos lo que nos corresponde”, expone.

Confió en que en este proceso prevalezca el respeto de la ley sobre intereses o conflictos particulares.