• Deportes

México-USA, uno de los mejores clásicos hasta ahora que tendría revancha en Copa Oro

  • Edwin García
Los estadounidenses se impusieron ante los dirigidos por Gerardo Martino y se perfilan como los nuevos 'Gigantes de CONCACAF'
.

La caótica final de la Liga de Naciones de la Concacaf en Denver dejó el escenario armado para que la Selección Mexicana busque revancha ante Estados Unidos en la Copa Oro de julio próximo, luego de que el equipo de las barras y las estrellas derrotara 3-2 a los tricolores en un partido que tuvo de todo, por lo que ahora la responsabilidad cae completamente sobre el Tri para sacarse la espina en un mes ahí mismo, en territorio estadounidense.

El pasado domingo 6 de junio, México y Estados Unidos demostraron una vez más por qué sus enfrentamientos son denominados los Clásicos de la región, pues no se guardaron absolutamente nada y dejaron todo sobre el terreno de juego, tras de más de 120 minutos de locura y pasión.

La partida también tuvo protagonismo negativo del árbitro panameño John Pittí, a quien se le fue el cotejo de las manos. El canalero no expulsó a Héctor Herrera al inicio del tiempo extra (minuto 94) cuando el mediocampista de la selección mexicana hizo una brutal entrada sobre un defensa de Estados Unidos.

El futbolista del Atlético de Madrid ya tenía una amarilla luego de golpear al portero Ethan Horvath a los 94 minutos, cuando se generó una bronca entre los jugadores de ambos combinados.

Otra acción que no quiso marcar fueron las incontables faltas hacia Hirving Lozano, pues incluso hubo una que mereció tarjeta roja; sin embargo, el panameño no quiso sacarla y con ello provocó la ira de los jugadores.

Ya en el tiempo extra, el árbitro expulsó Gerardo Martino, entrenador de México y quien no estuvo de acuerdo en que se marcara penalti luego de que Carlos Salcedo derribara a Christian Pulisic dentro del área, no sin antes sacarle el balón de forma limpia. La jugada tuvo que revisarse en el VAR y el propio Pulisic cobró de gran forma para hacer el 3-2. El jugador del Chelsea celebró de forma exagerada, pues además de que se quitó la camiseta, mandó callar a la afición mexicana en el Empower Field, donde hubo más de 30 mil espectadores, en su mayoría mexicanos.

Pulisic celebró junto a sus compañeros cerca del banderín de tiro de esquina, donde un proyectil lanzado desde la tribuna golpeó la cabeza de un jugador local que luego tuvo que ser atendido por el cuerpo médico.

Por si fuera poco, antes de que terminara el tiempo regular, el partido estuvo detenido unos minutos tras aparecer el grito homofóbico en las tribunas. El comportamiento del público mexicano fue malo en Denver, pues cuando se jugaban los últimos segundos del cotejo, lanzaron todo tipo de objetos hacia la cancha tras una falta sobre Pulisic y en la que el jugador estadounidense se quedó tirado en el pasto mientras algunos jugadores mexicanos intentaban levantarlo de mala manera.

Pulisic desquició al Tri así como lo hacía el veteranazo Landon Donovan en sus buenos tiempos, cuando se había convertido en el 'enemigo número uno de la selección mexicana'. El actual campeón de la UEFA Champions League vivió una noche redonda ante el acérrimo rival y seguramente en la Copa Oro será objeto del enfado de los aficionados mexicanos.

Ya cuando el juego se extendió demasiado y casi llegaba a los 130 minutos, hubo invasión de cancha por parte de varios espectadores, quienes fueron correteados por los elementos de seguridad del inmueble para, finalmente, ser sometidos.

Minutos antes, Andrés Guardado había fallado el penalti con el que el duelo se hubiera empatado 3-3. El jugador del Betis no salió más que como el villano de la noche, una llena de futbol, pasión, polémica, VAR y locura en Denver, donde todo apunta a una posible revancha mexicana en la Copa Oro, ahora que el rival del norte se apunta para ser el nuevo ‘gigante de Concacaf’.

Foto: Twitter

Tags: 

Comentarios de Facebook: