- Seguridad
Una sentencia condenatoria y 17 procesos por feminicidio: TSJ
Una sentencia condenatoria y 17 procesos por casos de feminicidio registra el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de Puebla, aunque organizaciones sociales calculan más de 144 muertes violentas de 2013 a la fecha.
Cuestionado sobres estas cifras, el presidente del TSJ, Roberto Flores Toledano, manifestó: "por supuesto que se han dictado sentencias de feminicidios en Puebla (...) no tengo el número. Para ser más precisos yo sí le rogaría que, para ser más precisos, el día de mañana (se proporcionarían los datos) con todo gusto”.
Posteriormente el TSJ informó que desde noviembre de 2012, cuando se tipificó el delito de feminicidio en Puebla, se fijó una sentencia condenatoria y 17 procesos abiertos, aunque no se aclaró de qué caso se trata por “la ley de protección de datos personales”.
Sin embargo el Observatorio de Derechos Sexuales y Reproductivos (Odesyr) contabilizó, tras un análisis hemerográfico, 144 casos de enero de 2013 al 31 de agosto de 2015.
No hay certeza
El Tribunal Superior de Justicia, en respuesta a la solicitud de información con folio 429/2015, hecha por Brahim Zamora Salazar, del Observatorio de Derechos Sexuales y Reproductivos (Odesyr), dijo que de enero de 2013 a marzo de 2015 no se emitió ninguna sentencia por feminicidio en el estado.
Esta cifra contradice información proporcionada por el propio tribunal a la periodista Mely Arellano Salazar, del portal Lado B, en respuesta a la solicitud de información 230314, donde se reconoce una condena por el feminicidio de Patricia Limón Méndez, en febrero de 2013.
La información proporcionada a Arellano habla de que se sentenció a Nicolás Pérez Pantoja, alias "El Nico", por agredir sexualmente a Patricia y luego matarla con una piedra de más de 30 kilogramos.
Sin embargo se desconoce cuántos años pasará en prisión pues en la tipificación de feminicidio de noviembre de 2012 se habla de que las sentencias serían de 30 a 50 años de prisión para los culpables de matar a una mujer por odio, celos extremos, cuando existan datos que establezcan en la víctima lesiones infamantes, violencia sexual, amenazas o acoso, tormentos o tratos crueles, inhumanos o degradantes.
Agravantes ayudan
Sobre las agravantes que se han dado por feminicidios, Flores Toledano confió en que sean una forma de disuadir a los agresores, para que no cometan esta clase de delitos.
"Siendo muy respetuoso de la legislatura, creo que todas las acciones que se puedan emprender, como endurecer las penas, pueden resultar sin duda alguna en beneficio de la sociedad poblana y para combatir estos terribles crímenes (...) Agravar las penas para estos delitos puede contribuir para bajar el número de acontecimientos", agregó el magistrado.
De igual forma comentó que el número de sentencias, pese a que no dio una cifra, no variará con la implementación del nuevo sistema penal acusatorio pues -desde su perspectiva- no guarda relación alguna.
Es importante recordar que tras la tipificación del feminicidio en 2012, se aprobaron en el Congreso del estado dos agravantes por este delito.
La primera fue en agosto este año, cuando se aumentó la pena para los feminicidas de tal forma que las sentencias pasarán de entre 30 a 50 años a entre 40 a 60 años. La segunda fue este mes, cuando se discutió una propuesta para que las sentencias sean de hasta 70 años si la víctima es una embarazada.
Un caso reciente es el de la desaparición de Paulina Camargo Limón, de 19 años de edad y 18 semanas de embarazo, quien habría sido asesinada por su novio y luego su cuerpo arrojado a un contenedor de basura.
Antes que Paulina hubo otros dos casos muy sonados de feminicidios de mujeres embarazadas. A principios de 2014 fue encontrado el cuerpo sin vida de Karla López Albert, quien tenía cinco meses de embarazo. El padre del bebé, Manuel Forcelledo Nader, estaría implicado con la muerte.
En octubre del año pasado Iraís Ortega Pérez, estudiante de Cultura Física de la BUAP y con seis meses de embarazo, fue presuntamente asesinada por su ex novio al negarse a abortar.