La presencia de más de medio centenar de granaderos en San Miguel Canoa provocó la movilización de la ciudadanía, ante el temor de un enfrentamiento y la imposición de un nuevo edil, hecho tras el que los elementos se retiraron. 

Los pobladores se mantienen alertas ante la posibilidad de un choque con los efectivos, pues aseguraron que se defenderán en caso de que éstos regresen a la comunidad.

Los hijos del alcalde auxiliar de esta comunidad, Raúl Pérez Velázquez, quien se encuentra detenido en el penal de San Miguel, acusaron que la administración municipal y el gobierno del estado buscan que en Canoa haya un enfrentamiento como el ocurrido en San Bernardino Chalchihuapan el pasado nueve de julio, en donde fue herido de muerte un menor de edad y golpeados varios pobladores, pues aseguraron que los granaderos iban armados.

Sin embargo, Rocío y Javier Pérez Pérez sentenciaron que la población está organizada para evitar que personal de la Secretaría de Gobernación municipal (Sgob) ingrese e imponga a una nueva administración.

Arriban granaderos

Al menos unos 50 granaderos arribaron a la junta auxiliar de San Miguel Canoa la mañana del viernes, lo que provocó la movilización de los pobladores, quienes se reunieron en la plaza principal de lugar para evitar que éstos tomaran posesión de la presidencia, inmueble que fue cerrado por grupos antagónicos a Raúl Pérez.

Debe recordarse que el jueves el secretario de Gobernación municipal Guillermo Aréchiga Santamaría –a quienes los pobladores acusan de buscar una negociación para lograr la liberación de Pérez Velázquez– señaló que la presidencia podría ser abierta “de un momento a otro”.

En entrevista, los hijos del edil preso, quienes fungen como voceros de los habitantes, aseguraron que la administración del alcalde José Antonio Gali Fayad pretendía aprovechar las festividades del 12 de diciembre, en las que pobladores de este lugar viajan a la Basílica de Guadalupe, para reabrir la presidencia e imponer como edil a Félix Flores García. “Pensaron que íbamos a estar solos por los peregrinos, pero todos nos estamos cuidando, somos un pueblo”, acotó.

Los efectivos iban armados, por lo que los pobladores temieron un enfrentamiento similar al que el pasado nueve de julio ocurrió en la junta auxiliar de Chalchihuapan, en el que elementos estatales hirieron a más de una decena de pobladores, entre ellos, al niño José Luis Tehuatlie Tamayo, quien posteriormente perdió la vida a causa de la lesión.

Javier Pérez aseguró que los pobladores no buscan una confrontación, sin embargo, aseguró que si los policías intentan agredirlos, ellos responderán, pues están dispuestos a defenderse.

 Policías venían armados por operativo de rutina: elementos

Los pobladores señalaron al comandante de la Policía Municipal, Benito Reyes, de decirles que el operativo obedecía a que arribaría personal de la Sgob, sin embargo, el señalamiento fue rechazado por el uniformado, no obstante, aceptó que sus compañeros acudieron armados ya que se trataba de un operativo de rutina.

En una discusión con los pobladores, el elemento aseguró que al lugar se trasladaron en unos 30 elementos, y que éstos realizarían un recorrido de rutina.

Recibimos una llamada de auxilio: SSPyTM

En una entrevista posterior, el secretario de Seguridad Pública de la comuna Oscar Santizo aseguró que los efectivos se trasladaron a Canoa por el operativo de seguridad de las festividades del 12 de diciembre así como por una llamada de auxilio que recibieron.

El funcionario municipal rechazó que la movilización policíaca tuviera como fin reabrir la presidencia auxiliar, pues insistió en que se trató de un operativo normal, que se llevó a cabo como parte de la vigilancia que se refuerza por los festejos guadalupanos.