El escenario político apunta a que el Peña Nieto enfrenta un momento de alto riesgo, tanto real como simbólico. Se dice que nunca antes la CNTE había movilizado tanta fuerza en el DF para impedir algo opuesto a sus intereses. Desde el principio era obvio que el desquiciamiento en las calles no iba a cesar, aunque se quitase la propuesta sobre el Servicio Profesional Docente. La meta es alargar el conflicto hasta el 1 de septiembre para poner en jaque al Presidente en el contexto de su Primer Informe. Saben que el mexiquense llega sin grandes resultados y en medio de un conflicto con la CNTE por las reformas en cuestión…
Un conflicto de baja intensidad, aunque puede incluir el uso de las armas, es una guerra sin enfrentamiento armado porque el objetivo final es poner de rodillas al gobierno y forzarlo a una negociación que en el fondo constituye una claudicación. En otras palabras: se quiere demostrar que se posee más fuerza que el Presidente, al que pueden obligar a dar marcha atrás. Manlio Fabio Beltrones ha entendido muy bien el esquema de ingobernabilidad que desarrolla la CNTE y por eso insiste en que se aprobará la reforma. Lo contrario, sería desastroso para el gobierno federal a menos de un año de haberse iniciado. Si el Presidente ha estado insistiendo en que las reformas son necesarias para el desarrollo del país, no hacerlas se entendería como un golpe muy severo para la imagen del gobernante…
Revisando la evaluación ciudadana, con mayor razón se comprueba que el momento es complicado: Peña Nieto cayó del 43 al 38%. Para poder recuperar la Presidencia se crearon muchas expectativas y esa es una de las principales presiones contra el gobierno, aspecto que se agrava si consideramos que, en 2012, la mayoría de los mexicanos no votó por él. Las fallas, aunque no sean graves, crean fácilmente tendencias en su contra que no es sencillo revertir y la CNTE lo sabe. El Presidente está en un dilema porque no puede permitir que lo arrollen…
“Cortando Cabelleras…”
No se trata de una coyuntura cualquiera, sino de un cruce que podría catapultar al mexiquense o echar por tierra su proyecto de gobierno. Por la naturaleza del conflicto, está en juego el secretario de Gobernación y sin duda los desestabilizadores apuntan hacia allá sus baterías. Al margen de las convicciones políticas de cada cual, lo cierto es que no se puede permitir la quiebra de las instituciones. El Presidente tendrá que ser muy listo para no caer en la trampa del autoritarismo ni en la decisión ingenua de sentarse a negociar porque ya sabemos que de entrada la condición es que no haya cambios y la entrega de los dineros…
El gobierno federal cuenta con mecanismos para sortear la fecha del Informe, pero lo que sigue en pie es que, mientras unos se dedican al arte de la guerra urbana de baja intensidad, los alumnos siguen sin clases…
“Los derroteros de la sucesión…”
En perspectiva, se puede apreciar que otro asunto que está en juego es la permanencia del PRI en Los Pinos. De no lograr detener la caída del índice de aprobación de Peña Nieto, resultará difícil ganar en 2015 y en 2018. En mi opinión, es legítimo luchar por el derecho a gobernar al país, pero no a cualquier precio. La experiencia demuestra que los países que ha logrado resolver sus problemas y desarrollarse, han tenido en la educación a uno de sus principales recursos, y está visto que a algunos no les interesa…
Buscan chantajear a los gobiernos para mantener prebendas y conservar intactos sus nichos de poder. Hay dos formas de fugarse del presente: brincando hacia el futuro o saltando hacia el pasado. Bloquear aquellos cambios que resultan urgentes, es una forma de evadirse del presente. Pero hay que ser justos: el PRI también hizo lo mismo durante los doce años de gobiernos panistas. Ahora presionan por todos lados para lograr sus propósitos y señalan al gobernador de Oaxaca como presunto responsable de lo que está ocurriendo. Sea o no causante de algo, el PRI tiene mucho que reflexionar…
La caída de Peña Nieto ante la opinión pública podría convertir a don Máximo en beneficiario por sus planes presidenciales, además sin que lo culpen de nada porque manifestó su apoyo a las reformas. Hoy ya sabe que con 38% el PRI está en riesgo de perder la próxima elección presidencial y quizá también la de 2015…
“Los mensajes de los ejes del poder…”
Es un síntoma de nuestro tiempo: más tarda en empezar un gobierno que en arrancar la siguiente sucesión. Así como ya se registra en el ámbito nacional, en Puebla igualmente se experimentan las escaramuzas. Al margen de lo que resulte más adelante, los que saben dicen que son dos los ejes que se disputan el poder: el de Manzanilla-Gali con el eje de Eukid-Aguilar Chedraui. Forcejean por los mecanismos del Congreso, la próxima alcaldía capitalina, la gubernatura y el control del CDM del PAN en Puebla…
El escenario político indica que el panismo tradicional cometió el error de mantenerse a la expectativa, confiando en que las pugnas en territorio de don Máximo les daría la oportunidad de recuperar terreno o al menos de conservar lo actual. Craso error porque nunca hay que apostar al fracaso de otros. Pase lo que pase, debes poseer un proyecto viable y realizarlo…
Sin embargo, hay una pieza que no encaja: si don Máximo ya se hubiese decantando por uno de los dos bloques, ¿para qué mandarse mensajes mediáticos? Equivaldría a poner en riesgo la decisión si el mero mero se irritase por ventilar las cosas de esa forma. Lo que se puede apreciar es que don Máximo ha dispuesto las variables de tal modo que él no saldrá perdiendo, se incline en un sentido o en otro. Más bien el factor de riesgo está en dos aspectos: algunos olvidan que pretender brillar por encima del gobernante no es la mejor forma de ganarse su respaldo y, segundo, las divisiones internas no favorecen precisamente a la cabeza…
Los jaloneos están llegando a tal punto que, como ya vimos, Micalco tuvo que dar de manotazos en la mesa para que respeten su autoridad y la respuesta vino de inmediato: “la decisión no es tuya sino de don Máximo, y será él quien reparta los espacios y designe al dirigente municipal del PAN capitalino”. Igualmente se han enviado mensajes a todo aquel que ha opinado sobre el tema para que no se metan. El hecho de que el polo tradicional haya optado por la expectativa, está metiendo a Gerardo Maldonado en un callejón sin salida…
Si el 7 de julio don Máximo consolidó su poder hegemónico, es obvio que su papel será decisivo. Desde el principio manifiesta estar convencido de que los espacios que ha tenido el panismo tradicional son mayores a su verdadera fuerza y por lo tanto, busca redimensionarlo a la baja…
El correo político sigue álgido. El ala dura de don Máximo dice: “no les vamos a dar ni agua y más vale plegarse porque el elegido en el CDM será alguien ajeno a ustedes”. El sector moderado precisa: “podría ser uno de ustedes, pero el que don Máximo quiera o de lo contrario perderán todo”. El panismo tradicional sostiene: “si don Máximo no nos va a cumplir lo de las suplencias ni la diputación federal, entonces que el CDM sea la compensación”. Sólo resta que los últimos decidan si van a pactar con los primeros o con los segundos. Don Máximo no se ha decantado todavía por ninguno de los ejes. La única decisión en firme parece ser que ocurra el relevo en el CDM…
Hasta entonces…
Comentarios: confinespoliticos@yahoo.com
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Politólogo. Analista político y asesor. Especializado en historia y política mexicana, geopolítica y geoestrategia, Historia de las ideas políticas, teoría política y análisis de escenarios. Autor de la columna Confines Políticos