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Condenan ONU-DH y ONGs asesinato de madre buscadora en Puebla
Blanca Esmeralda Gallardo era una madre buscadora en Puebla tras la desaparición de su hija Betzabé Alvarado, pero fue asesinada a balazos mientras esperaba el autobús que la llevaría a su trabajo, por lo que el crimen fue condenado por organizaciones civiles y la Oficina en México del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH).
Ante los reclamos de justicia, la Fiscalía General del Estado (FGE) aseguró que "agilizará" el esclarecimiento el asesinato cometido este martes en la unidad habitacional Villa Frontera, de la ciudad de Puebla, además de que otorgará protección a la familia de la víctima, quien desde el año pasado buscaba a su hija de 22 años.
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En un comunicado, Guillermo Fernández-Maldonado, representante en México de ONU-DH, reprobó que la Fiscalía General del estado (FGE) no haya otorgado protección a Blanca, a pesar de que ya había denunciado en medios de comunicación de quién sospechaba como responsable de la desaparición de su hija, y lamentó que el caso se sume al reciente asesinato de otra madre buscadora.
“Este caso, prácticamente un mes después del asesinato de la señora Rosario Lilián, es un nuevo doloroso recordatorio del alto riesgo y desprotección en que muchas familiares de personas desaparecidas se ven obligadas a realizar labores de búsqueda y exigencia de justicia. Reiteramos la gran importancia de que las instituciones responsables presenten resultados en la búsqueda e investigación y, simultáneamente, aseguren que las mismas se desarrollan en condiciones seguras”, sentenció.
La @FiscaliaPuebla emplea todos sus recursos para esclarecer en el menor tiempo posible la privación de la vida de Esmeralda G., y ordenó medidas de protección a las Policías Municipal y Estatal para las familias de Esmeralda, Betzabé y Fabiola.
— FGE Puebla (@FiscaliaPuebla) October 5, 2022
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“Es impostergable que México cuente con una estrategia efectiva para garantizar seguridad a quienes buscan a sus seres queridos. Nos sumamos a las expresiones de la sociedad mexicana, que considera inadmisible y contrario a sus valores que, tras la desaparición de un familiar, quienes exigen justicia y su localización con vida, tengan además que enfrentar agresiones, descalificaciones y, en algunos casos, asesinatos”, añadió Fernández-Maldonado.
Gobierno promete justicia
En tanto el gobernador Luis Miguel Barbosa Huera condenó el asesinato a través de sus redes sociales y aseguró que se esclarecerá el crimen.
“El gobernador Miguel Barbosa Huerta lamenta y condena el asesinato de la señora Esmeralda Gallardo, ocurrido en la colonia Villa Frontera; advierte que el gobierno estatal y las instancias correspondientes esclarecerán este crimen y se aplicará la ley contra el o los responsables”, se indicó en su cuenta de Twitter.
El gobernador @MBarbosaMX lamenta y condena el asesinato de la señora Esmeralda Gallardo, ocurrido en la colonia Villa Frontera; advierte que el gobierno estatal y las instancias correspondientes esclarecerán este crimen y se aplicará la ley contra el o los responsables.
— Gobierno de Puebla (@Gob_Puebla) October 4, 2022
Rector de la Ibero exige justicia
El rector de la Universidad Iberoamericana, Mario Ernesto Patrón Sánchez, exigió justicia por el asesinato y recordó que Puebla es uno de los estados con más personas desaparecidas, por lo que es necesario generar acciones para acabar con este problema social.
“La segunda casa del colectivo Voz de los Desaparecidos es la universidad Iberoamericana en Puebla, tenemos una agenda sumamente profunda y fraterna entrañable entre nuestro Instituto de Derechos Humanos y el colectivo las madres y padres que buscan a sus desaparecidos; tienen toda nuestra consideración, en Puebla es una agenda que tendría que ser prioritaria”, sentenció en entrevista.
El Instituto de Derechos Humanos Ignacio Ellacurría (IDHIE) de la institución, se sumó a la demanda de justicia al señalar que la labor de Esmeralda como madre buscadora debe ser la principal línea de investigación, además de que pidió otorgar protección a sus familiares.
Voz de los Desaparecidos exige garantías para familias buscadoras
El colectivo Voz de los Desaparecidos, del cual formaba parte la víctima, exigió a Barbosa Huerta y a la FGE dejar los “discursos superficiales” y dar garantías para quienes buscan a sus familiares desaparecidos, así como hacer frente a la crisis de desapariciones de personas en el estado.
“Exigimos justicia, que se aclare lo ocurrido y garantías de seguridad para todas las personas que buscan a un ser querido desaparecido. Hacemos responsable al gobierno del Estado de cualquier asunto de seguridad, ataque o incidente que les ocurra a las familias buscadoras en todo el estado”, sentenció en un comunicado.
Comunicado
— Voz de los Desaparecidos en Puebla (@VozdelosDesapa) October 4, 2022
Hacemos un llamado a la fiscalía de Puebla, al gobernador Miguel Barbosa y a las autoridades de Puebla
Déjense de discursos superficiales y garanticen los derechos y seguridad de las víctimas,los derechos y seguridad de las familias de personas desaparecidas#justicia pic.twitter.com/t1iDIPy9bd
Blanca y la búsqueda de su hija
El 9 de mayo Blanca Esmeralda señaló en una entrevista con e-consulta, que su hija desapareció junto con una amiga en Villa Frontera, y dias después la pareja sentimental de Betza, como la llaman de cariño, le quitó a su nieta y le prohibió verla.
En 2020 Blanca había perdido a su esposo, quien se contagió de covid-19 y murió, así que solo quedaban ella y su hijo Enrique, de 12 años.
Dispuesta a dedicarse solo a la búsqueda de su hija, envió al menor con familiares fuera del estado, pero él no quiso dejarla sola y se convirtió en su motor para salir adelante.
Betzabé fue vista por última vez en una motocicleta que era de su propiedad. Junto a su vecina y amiga, Fabiola Narváez Rojas, salió rumbo a la Central de Abasto y desaparecieron junto con la motocicleta en que viajaban.
El hombre que, al parecer, se llevó a su hija y a Fabiola, fue asesinado en los límites de Puebla y San Pablo del Monte. La pareja sentimental de este sujeto fue baleada a la puerta de su casa, ubicada también en Villa Frontera, y al salir del hospital la detuvieron por la desaparición de ambas jóvenes, pero no quiso hablar.
Blanca todavía en vida mencionó que su hija pudo haber sido víctima de trata de personas y en su desesperación ingresó a Tenancingo, Tlaxcala, tierra de nadie y paraíso de la explotación sexual. Ahí, un hombre le apuntó con una pistola en la cabeza; tiró a la basura la ficha de desaparición de Betza y le pidió que se retirara de inmediato.