Sus reuniones en el taller de zapatos en el boulevard Sánchez Piedras de Apizaco, ahí se aquerenciaban; sin invitación llegaban toreros, aficionados y palomilla a comer, echar trago y, por supuesto, hablar de toros
Se lidiaron seis toros de la ganadería de Tenopala: ninguno tuvo embestidas con transmisión, emocionante; hubieran dejado torear al espontáneo, un chaval ecuatoriano