Atracos financieros y neoliberalismo en México

  • José Pascual Urbano Carreto
Casos de endeudamiento público como el Fobaproa y los Proyectos para la Prestación de Servicios

Ahora que el expresidente Ernesto Zedillo visitó México, cuando se le preguntó la razón que tuvo para rescatar al sistema financiero mexicano a costa de los mexicanos, respondió con arrogancia y soberbia, que él estudió en la Universidad de Yale; el que lo interrogaba al respecto solamente realizó sus estudios en la UNAM. En efecto, él hizo estudios en el extranjero lo que lo exime de informarnos que la operación de convertir el endeudamiento de los miembros de la oligarquía financiera y de la elite política pudo corresponder con ignorancia o inconsciencia.

Su iniciativa llevada ante el Congreso fue producto de su subordinación con los magnates y la clase política de ese momento, y de una conducta orientada por sus ambiciones y de su perversidad, así convirtió la deuda de los banqueros, industriales y comerciantes que se auto prestaban con avales sin sustento y los créditos que otorgaban a los miembros de la clase dominante respaldados con deuda, sin respetar los reglamentos que debían considerar para realizar la apertura de créditos. Fue así como se constituyó en todos los bancos del país una cartera vencida, la que se convirtió en incobrable y además impagable por los deudores.

El egresado de la Universidad de Yale envió su iniciativa para que el Congreso comprara a los banqueros y sus deudores los valores financieros basura que no tenían valor alguno y con ello convertir las deudas de ellos en deuda de los mexicanos, así fue que el súper economista Ernesto Zedillo, salvo de la quiebra merecida a los pillos banqueros y a sus clientes preferidos, de los cuales hay nombres de prominentes miembros de la pandilla denominada PRIAN.   

Seguramente tomó clases en la Universidad de Yale, pero no entendió que además de tener conocimiento había que tener valores éticos y morales; además quedó demostrada la baja catadura académica cuando sus maestros, más adelante evidenciaron que si había una opción distinta a la aplicada por él. De hecho, se desarrolló cuando los Estados Unidos en 2008 se enfrentó a una crisis de tipo financiero (carteras vencidas; incobrables e impagables) porque se dejaron de pagar las hipotecas, se financió el incremento de créditos fondeadas con deudas hipotecarias y así se presentó la crisis. Las autoridades estadounidenses rescataron el sistema financiero, pero en lugar de asumir la cartera vencida de los banqueros lo que hicieron fue prestarles para que hicieran frente a sus problemas, el resultado es que los descuidados banqueros quedaron como deudores del Estado y tuvieron que pagar, y lo hicieron. Así que el señor Ernesto Zedillo, por lo mencionado anteriormente, quedó como un ambicioso y perverso mal estudiante.

El Fondo Bancario de Protección al Ahorro (Fobaproa, por su acrónimo) fue un fondo de contingencia creado en 1990 por el gobierno mexicano en conjunto con la totalidad de los partidos políticos en aquel entonces, a fin de enfrentar posibles problemas financieros extraordinarios, protegiendo a los ahorradores bancarios.

Es a través de la Ley de Instituciones de Crédito, publicada en el Diario Oficial de la Federación el día 18 de julio de 1990, que se ordena la creación del Fondo Bancario de Protección al Ahorro durante el gobierno de Carlos Salinas de Gortari, que dispuso en su artículo 122:

1. El Banco de México administrará un fideicomiso que se denominará Fondo Bancario de Protección al Ahorro, cuya finalidad será la realización de operaciones preventivas tendientes a evitar problemas financieros que pudieren presentar las instituciones de banca múltiple, así como procurar el cumplimiento de obligaciones a cargo de dichas instituciones, objeto de protección expresa del Fondo. La constitución del fideicomiso por el Gobierno Federal no le dará el carácter de entidad de la administración pública federal, y por lo tanto, no estará sujeto a las disposiciones aplicables a dichas entidades.
2. En diciembre de 1998 el Fobaproa fue sustituido por el Instituto para la Protección al Ahorro Bancario  (IPAB).
3. Resultó ser el programa más dañino para las finanzas públicas del gobierno mexicano durante la operación de rescate bancario. Gracias a este, el Fobaproa compró a los bancos todo tipo de chatarra financiera, es decir, créditos incobrables que se tradujeron en un fuerte incremento en el costo fiscal del rescate y en cambio redujeron las pérdidas de bancos, accionistas o grandes deudores que podían pagar sus créditos, pero los transfirieron al Fobaproa

En marzo de 1998, el presidente Ernesto Zedillo Ponce de León envió al Poder Legislativo un paquete de cuatro iniciativas para crear un marco legal que redujera las posibilidades de una nueva crisis bancaria, así como para crear mecanismos más eficientes de supervisión a las actividades crediticias y facilitar la capitalización de los bancos. Por tanto, con el objetivo de exigir mayor disciplina en la administración del sistema bancario, el Poder Ejecutivo propuso la creación del Fondo de Garantía de Depósito (Fogade), instancia que protegería el dinero de pequeños y medianos ahorradores e involucraría al Poder Legislativo en la tarea de supervisar los bancos.

La promulgación de la Ley de Protección al Ahorro Bancario o LPAB en diciembre de 1998 por parte del Congreso de la Unión dispuso la creación del Instituto para la Protección al Ahorro Bancario (IPAB) como un intento de lanzar un “nuevo sistema de protección al ahorro bancario".

El mismo año que el Fobaproa se asumió como deuda pública, se estimó que las obligaciones se pagarían en treinta años, pero un cálculo hecho por los economistas Fausto Hernández Trillo y Marcos Ávalos en 2006 (publicado por las Naciones Unidas, a través de la CEPAL) pronosticó que serían setenta años -asumiendo que el país tuviera un crecimiento económico anual de 4%.

No obstante, según un análisis del medio mexicano Arena Pública, el crecimiento promedio del PIB mexicano en la década entre 2008-2017 ha sido de tan solo 2.3%, por ello el pronóstico de los economistas está desfasado y la deuda podría tardar en pagarse muchos años más.

Se estima que, como consecuencia de las voraces e injustificadas decisiones promovidas y tomadas con plena conciencia de lo que significaban para el país, fueron impulsadas por el presidente Ernesto Zedillo, el pago del Fobaproa habrá impactado a tres generaciones.

El nivel de endeudamiento generado, por concepto de intereses, se ha valuado en dos billones de pesos, lo que representa que, aunque cada año se destinen entre 30 y 50 mil millones de pesos, dicha cantidad alcanzaría solo para cubrir los intereses generados.

En opinión del consultor Luis Miguel Labardini, el coste social provocado para cubrir las deudas generadas por los bancos se considera especialmente lesivo, si se contrapone el contexto económico al que se han enfrentado las nuevas generaciones, y que representa una enorme sangría para el presupuesto público destinar alrededor de 50 mil millones de pesos por el Fobaproa, dinero que no puede destinarse a programas de corte social

El atraco financiero en el gobierno neoliberal de Puebla

Los informes del gobierno de Puebla establecen que por las Plataformas de Audi en San José Chiapa se han pagado 826 millones de pesos. Por el CIS se han abonado 329 millones de pesos. Mientras que por el Museo Interamericano del Barroco (MIB) se han erogado 217 millones de pesos.

Se ha estimado que la deuda de los PPS de Puebla contratados por Moreno Valle supera los 6 mil millones de pesos.

Los tres Proyectos para la Prestación de Servicios (PPS) que contrató el exgobernador, Rafael Moreno Valle en su sexenio aún le representan a Puebla una deuda por más de 6 mil millones de pesos, monto que terminará de pagarse hasta el año 2039.

Con la trágica muerte del exgobernador Rafael Moreno Valle está por extinguirse su grupo político denominado morenovallismo. Sin embargo, los contratos financieros siguen su curso y las próximas administraciones deben contemplar partidas para hacer frente a estos compromisos.

Entre 2012 y 2013 se ejecutaron tres proyectos a través de la figura de PPS y APP: el Centro Integral de Servicios, las Plataformas de Audi en San José Chiapa y el Museo Internacional del Barroco. En total, el gobierno de Puebla debía pagar 8 mil millones de pesos por estas obras.   Se debe considerar que el monto que se va pagar a los inversores es muy superior a lo que ellos invirtieron. Se ha calculado que en el sexenio del gobernador Rafael Moreno Valle invirtieron 6000,000,000 y que en treinta años recibirán alrededor de 70,000 millones, de hecho. Se calcula que los inversionistas recuperaron su inversión en lo que duró el sexenio de Moreno Valle. Y que de acuerdo al contenido de los contratos se les seguirá pagando hasta llegar a los aproximadamente 70,000 millones de pesos. Así son los negocios neoliberales, voraces, en verdad, los cambios de la 4T se orientan a evitar el regreso de los saqueadores.

Esta cifra ha tenido una reducción muy baja en los últimos años. Durante el gobierno de Antonio Gali Fayad se pagaron 1 mil 373 millones de pesos, información que se encuentra disponible en el Informe Analítico de Obligaciones Diferentes de Financiamientos de la administración estatal.

El estado de Puebla habrá saldado la deuda del exgobernador panista hasta dentro de veinte años, por lo que futuros gobiernos están obligados a hacer los pagos correspondientes por las tres mega obras. Que como tales podrían justificarse, pero no como el medio que se utilizó para legitimar el saqueo del patrimonio de los poblanos.  

Además de reducir los pasivos de los PPS, en su momento Tony Gali disminuyó en 4 mil millones de pesos la megadeuda que heredó de la administración morenovallista, con lo cual el adeudo que enfrenta el estado asciende a 19 mil millones de pesos.

Lo detallado en mi artículo es lo que los integrantes del Frente que agrupa al PRI, PAN y PRD tendrían que asumir y convencer al pueblo mexicano para que les permita volver a otorgar el poder a esos saqueadores, que regresen al gobierno para continuar con prácticas corruptas y que, además, no se preocupen por sentar las bases para resolver los principales problemas de nuestra nación, y de nuestra Puebla,  a ellos solo debemos decirles un no rotundo, solo se les debe invitar cambiar su conducta corrupta y antipatriótica.

Lo que nos han provocado en México los neoliberales ha significado un daño profundo. Han entregado parte del erario a los integrantes de la oligarquía financiera comercial, industrial y política, en tal situación se ubica el hecho de que durante décadas les permitió por medio de la miscelánea fiscal que las grandes empresas pudieran evadir sus obligaciones de la materia, con fundamento en ella durante mucho tiempo pudieron evadir y eludir sus obligaciones de pagar los impuestos que la ley determina, con todas las modalidades de gastos deducibles de impuestos. De ese modo además de dejar pagar al erario podían transferir a sus negocios de la educación privada recursos que debían canalizarse; en otras circunstancias a la educación pública del mismo modo se permitía que los negociantes de la salud pudieran canalizar recursos a sus hospitales, es decir se inició un camino para la privatización de los distintos sectores que requiere la sociedad mexicana para acceder a su bienestar y que por tanto  la sociedad mexicana que debía desarrollar y fortalecer para ponerla al servicio de la mayoría de los mexicanos.

Los neoliberales hoy se pretenden presentar como los defensores de los derechos a la salud y a la educación al alcance de los mexicanos, y basta recordar que el Partido Acción Nacional en sus documentos básicos defiende el carácter  privado y elitista de los servicios de salud, de la educación y sus convicciones respecto a apoyar a la juventud y a los adultos mayores, para desmentir sus ínfulas populares basta recordar las declaraciones del expresidente Vicente Fox que él no es partidario de dar apoyos a flojos, y su carácter antifeminista cuando se recuerda cómo se refería a las mujeres de nuestro país, como “las lavadoras de dos patas”. Pero realmente el grupo que se mueve alrededor de la candidata de la oposición también ha dado muestras de tener una idea equivocada sobre la necesidad de construir un sistema de salud al servicio de los mexicanos, cuando ella presume que la mayoría de los mexicanos podrían pagar un seguro médico, como el que ella tiene y que cotiza decenas de miles de pesos mensuales. Ella no tiene ni la menor idea de la situación de la mayoría de los mexicanos.

El colmo de la desfachatez se da cuando se dedican a difundir que en el sexenio actual hay cientos de miles de asesinatos dolosos, y dejan sin aclarar que ellos fomentaron el fortalecimiento de los grupos delincuenciales de manera especial en el narcotráfico en cuyo ejemplo se debe contemplar el caso del exjefe de Seguridad del expresidente Felipe Calderón

En su intento de quebrar a las industrias energéticas del país, organizaron a los huachicoleros y hasta en sus administraciones había jefes de los cárteles del huachicol y de los cárteles del tráfico de drogas, no tienen el menor escrúpulo cuando pregonan que el expresidente Felipe Calderón organizó su guerra contra la delincuencia organizada, que más bien se debían caracterizar como las  guerras floridas de Calderón, quien le ordenó al jefe de las bandas de narcotraficantes que debían simular combatir al crimen organizado para tener a quién sacrificar, pero que eso solo pretendía disimular que el verdadero capo mayor era su jefe  de Seguridad en la nación, porque ellos dejaron que todo el crimen organizado se fortaleciera en su poder económico y en su poder organizativo, hoy es muy difícil pacificar al país salvo que ellos modifiquen su conducta y dejen de ser cómplices de esas actividades, así se podría lograr tener una nación viviendo segura y con una situación de progreso.

 

Las opiniones vertidas en este espacio son de exclusiva responsabilidad de quien las emite y no representan necesariamente la línea editorial de e-consulta.

 

 

 

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José Pascual Urbano Carreto

Licenciado en Economía (BUAP) con estudios de Maestría y Doctorado en Economía (UNAM). Diplomado en Comercio Exterior (UDLAP). Docente en la BUAP. Secretario de Relaciones Exteriores del STAUAP y secretario General del SUNTUAP. Coordinador Administrativo del HU (BUAP). Miembro del Consejo General del Instituto Electoral del Estado de Puebla.