Circo maroma y teatro en el PAN

  • Rodrigo Rosales Escalona
La derecha ramplona, requiere disfrazarse de democracia para incursionar en los aparatos políticos

La militancia panista actual, en específico desde el salinismo en los ochenta y noventa, perdió identidad, para transformarse en un Frankenstein del sistema, porque jugó a las alianzas y complicidades con otro partido que también se deformó extravió dignidad, el Golem (Leyenda hebrea sobre un ser que fue modelado en barro y que luego fue animado mágicamente, no poseía la capacidad de hablar y se comportaba más como un autómata que como un ser vivo. No comía, bebía ni dormía, pero realizaba duras tareas sin cansarse y obedecía todas las órdenes de su creador) llamado PRI.

La derecha ramplona, requiere disfrazarse de democracia para incursionar en los distintos aparatos políticos del Estado como de partidos políticos. Al grado que ha requerido de diversos grupos derechistas para tener presencia de represión y de chantajear para acomodarse en el gobierno en turno, siendo el Movimiento Universitario de Renovadora Orientación (MURO), siendo los doce apóstoles -planteada por Manuel Buendía en su libro La ultraderecha en México-, según la cual el MURO fue resultado de un proyecto creado en Puebla por Ramón Plata y un grupo de 12 seguidores. Estos serían Klaus Felman (quien como empresario  apoyó a varias universidades privadas, especialmente la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla); Federico Müggemburg (cuñado de la senadora panista Cecilia Romero, operador de la campaña presidencial de Clouthier y funcionario de cámaras empresariales); Antonio Quintana, Luis Felipe Coello, Víctor Manuel Sánchez Steinpreis, Manuel Antonio Díaz Cid (fundador y dirigente del Frente Universitario Anticomunista, que operó en Puebla en los años sesenta y setenta, y militante del PAN), Fernando Baños Urquijo (asumió públicamente la dirección del MURO en una época), Carlos Figueroa Sandoval, Ignacio Rodríguez Carreño, Gastón Pardo Pérez, Augusto Domínguez Guzmán. El Yunque, desde luego hay casos de ex integrantes del MURO que conservaron en buena medida una ideología como la que sustentaba ese grupo y que luego, por natural afinidad, pasaron a militar en grupos como DHIAC o Provida, y ellos, a su vez, en algunos casos hicieron una carrera política en el PAN.

Actualmente, recurren a otras organizaciones para motivar enfrentamientos y movilizaciones supuestamente “civiles”, contra el actual presidente de la república Andrés Manuel López Obrador.

Cuando el emérito filósofo Sánchez Vázquez analiza el término de democracia, lo define de dos maneras, a saber: 1) “sistema o régimen de organización social en el que el poder, la toma de decisiones, se halla sujeto a cierto control de la sociedad” y 2) “vía para llegar a ese poder o conjunto de procedimientos para ejercerlo bajo el control de la sociedad”[1], en lo que a mí respecta, en la primera definición la democracia tienen una visión teleológica, es decir, se estaría estableciendo que la democracia en sí misma garantiza el ejercicio del poder, la participación, así como la toma de decisiones de la sociedad, y por lo tanto es un fin al que se debe llegar, mientras que en la segunda definición la democracia jugaría el papel de medio, que permite a la sociedad llegar a esa forma de gobierno que garantice la participación de sus miembros en la toma de decisiones en todo ámbito social. Pese a dichas distinciones también podemos intentar establecer un común denominador, ya que en ambas formas de concebir la democracia involucra la participación de sus miembros, o en palabras de Sánchez Vázquez: “Lo democrático reside en la adopción o el control colectivo de decisiones”[1] Para poder dilucidar la forma como la democracia debe funcionar, el autor toma como modelo la democracia moderna burguesa o denominada también democracia política o liberal, cuyo sujeto participante, es todo aquel miembro de la comunidad que tiene igualdad ante la ley, de esta forma, la participación, el voto y el sufragio adquieren universalidad. La participación de dicho sujeto se da en las casillas, asumiendo que su decisión será respetada, de igual manera, la materia sobre la que ejerce su decisión no refiere a su situación laboral directamente, provocando que la relación trabajo-capital quede de lado, o en palabras del autor: “Si el ciudadano es un trabajador, las cuestiones de la producción o de la relación capital-trabajo, que le afectan vitalmente en su centro laboral, quedan al margen de su participación”[2], Grosso modo esta es la condición de cómo se lleva a cabo el proceso democrático. Al enunciar las características que ya mencionábamos, sujeto, forma, lugar y materia sobre la toma de decisiones y el ejercicio del poder, Sánchez Vázquez denuncia que dichas características funcionan a su vez como límite de la democracia misma, por eso mismo deben ser superados, siendo la misma democracia el medio que lo posibilita.

Dicho lo anterior, este domingo 25, se efectuó el proceso “electoral” en el PAN, para elegir al dirigente Municipal de dicho partido, compitiendo Eduardo Alcántara Montiel y Jesús Zaldívar Benavides. Ambos juran que actuaron apegados a la honestidad y democracia, sin embargo, se atacaron mutuamente de que jugaron sucio, con mañas y puñaladas; a su vez, Zaldívar asegura que Alcántara, tuvo que recurrir a integrantes del gobierno estatal, para contar con la fuerza que le garantice el triunfo.

Empero, Zaldívar, en su equipo redentor, estuvieron morenovallistas como Jorge Aguilar Chedraui, Mónica Rodríguez Della Vecchia, Pablo Rodríguez Regordosa y Mario Riestra Piña, morenovallistas de cepa. Si Eduardo Alcántara tuvo un papel administrativo con Eduardo Rivera, hoy Eduardo ve que al unirse al morenovallismo con Zaldívar, le puede garantizar competir una vez más para presidente municipal en el 2021. Si cuando la perra es brava…

Al final, como queriendo justificarse Jesús Zaldívar, dice no es yunquista, según él, aunque confirma que el yunque es parte del PAN, también que Rafael Moreno Valle, no permitió competir por una diputación en el distrito 1 local, resultando ganador. Todo mundo sabe que, si alguien estorba, Rafael no media métodos ni caprichos para eliminar a quien sea, por lo que es falsa su declaración de que Rafa le negó y aun así gana la diputación.

El circo en el que se maneja el PAN nacional y local, anda entre maroma y actos de equilibrio, sin considerar que no cuentan con dos aspectos fundamentales: democracia y dignidad.

Que el diablo los redima.

[1] Sánchez Vázquez, Adolfo, Entre la realidad y la utopía. Ensayos sobre política, moral y socialismo. (México, UNAM-Fondo de Cultura Económica 2001) p. 69

rodrigo.ivan@yahoo.com.mx

Analista político y de prospectiva social

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Rodrigo Rosales Escalona

Periodista y analista político en medios locales y nacional, filósofo, docente en nivel superior, activista social, comprometido con la justicia.