Un niño nace, corre y...

  • Rafael Gómez Olivier
Niño. Monstruo. Dolor e impotencia. Odio. El que dispara y el que reza. No acariciamos al alma.

Un niño nace, corre y se va de casa, la posibilidad de que triunfe a cada paso que da se le adelanta; eso no lo hace infeliz, ni le prohíbe vivir, tan solo quienes lo ven creen que poco a poco los defrauda.

Un monstruo ambicioso nos está poniendo trampas, arrojándonos lo que queremos, para que caigamos con queso como ratas, esa trampa es mortal, pocos pueden escapar, de las sabanas con las que arropan la miseria y la comodidad.

Un niño en la calle se rinde, porque el hambre a cada minuto lo calla, mientras que al costado una mujer en su auto llora porque no le da la talla, cada quien a sus problemas, las pisadas tienen caminos y se unen en uno donde ninguno será nada.

El dolor y la impotencia llevan nuestros puños directo a las quijadas, pero cuando deseamos amar traemos las manos atadas. Así nos tocó vivir, abriendo los ojos en agua con sal y sabor amargo siempre en el paladar.

Llevamos el odio al pecho aunque ese no sea su lugar, pero a quienes necesitamos los ignoramos al pasar. Da igual ya qué color aparezca en la mañana, si hoy hubo lluvia, o en el mundo alguien nos extraña, olvidamos todo por un café caliente con un cuadro enfrente y en él un sol sobre una playa.

Una mujer está olvidando que es una princesa, debajo de tantas capas  de lucha y persecución aún sigue deslumbrando, su belleza intacta.

Desilusionaron sus ojos y a jalones tuvo que olvidarse de su delicadeza, ha creado un ejército de paradigmas para quien se le acerca, a todos se nos olvidó, que para amarla antes es necesario volarse la cabeza, pues para cuidar una estrella, ya no se necesita.

 Y algunos van y van y otros vienen ya, pero sin intentar vivir, solo deseando no morir, peleando por libertad pero empeñando su lealtad.

Tememos al que dispara y nos burlamos del que reza, nos quitamos cuando nos abrazan y buscamos amor solo con cerveza.

Acariciamos en todas partes, menos en el alma, besamos el momento y olvidamos disfrutar con calma, confundimos la pasión con agarrar a alguien de las nalgas.

Si el cielo sonríe son  setenta años de sangre en las venas de nuestra rutina, cada uno sin decirle que te gusta y sin hacer  lo que amas.

Desde lo que no se ve tan solo somos un suspiro intenso o una caminata larga , el temor de ver los días pasar lento , una canción bajo la luna o un lápiz escribiendo versos ,tan solo eso es lo que tenemos , un momento para ser eternos.

Un niño nace, corre y se va de casa……..

@Rafa Goli.

Rafael.gooli@gmail.com

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Rafael Gómez Olivier

Presidente y CEO Social Business, conferencista sobre emprendimiento. Cocreador del concepto IdeasParty.  Creador del concepto Mundo emprendedor: Congreso que llevó educación empresarial a más de 12 municipios en Puebla. Creador de Unfollow