Se llevó a cabo el Congreso sobre “Derechos Humanos, Seguridad Humana e Igualdad y Equidad de Género”.

Los pasados 22 y 23 de agosto se llevó a cabo en el Salón Barroco del Edificio Carolino el Congreso Nacional e Internacional auspiciado por la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales, y como organizador el Dr. Rafael Sánchez Vázquez, líder del Cuerpo Académico Consolidado.

Un aspecto relevante de dicho evento fue el referente al uso de drogas. La Dra.  Medina-Mora Icaza directora del Instituto Nacional de Psiquiatría estableció que uno de los ejes es la no criminalización de los adictos y considerarlos como pacientes, esto es, como un problema de adicción y dependencia a las drogas y darles el tratamiento psicológico, psiquiátrico y médico. La Dra. Medina Mora Icaza planteó que es un problema serio la aplicación de la ley, ya que la policía no está capacitada para determinar los límites permitidos de portación de marihuana, lo que ha incrementado los arrestos indebidos.

Una aproximación similar que se ha dado en los Estados Unidos de América gracias a los esfuerzos de la Dra. Nora Volkow, destacada mexicana que dirige el Instituto Nacional de Abuso de Drogas. La Dra. Volkow ha logrado que se despenalice a los drogadictos y se les otorgue un tratamiento por parte del estado.

En mi intervención planteé que existe evidencia neurocientífica que muestra que la maduración plena de las áreas cerebrales involucionadas en la toma de decisiones y de juicio razonado, esto es la corteza prefrontal, se alcanza hasta los 21 años, por lo que en los Estados Unidos de Norteamérica esta es ahora la edad mínima para beber bebidas alcohólicas y fumar tabaco. Una medida así es urgente en México dada la problemática que tenemos con los accidentes debidos a intoxicación etílica o el enorme gasto de salud por enfermedades pulmonares y distintos tipos de cáncer derivados de la dependencia del tabaco. Las leyes deben fundamentarse, cuando se puede, en conocimiento científico porque ese es el camino para que sean objetivas y se eviten discusiones que tienen con áreas menos objetivas que las evidencias que aporta la ciencia.

[El autor es Director General de Investigación, Vicerrectoría de Investigación y Estudios de Posgrado. Benemérita Universidad Autónoma de Puebla]