URGE mayor competencia en el sector.

Los mexicanos pedimos a gritos: “¡servicios de mayor calidad a mejores precios!” (Aunque nos conformaríamos con que no se cortaran las llamadas del celular a media conversación o que dentro de nuestras casas o centros de trabajo no tuviéramos que buscar el rincón donde sí hay señal).

La realidad en México, es que una empresa tiene el 80% del mercado de telefonía fija y esa misma empresa tiene el 70% del mercado de telefonía móvil. Además de contar con una infraestructura que le permite tener mayor cobertura que sus competidores, lo que le facilita fijar unilateralmente las condiciones de contratación a su mayor conveniencia.

Al no tener prácticamente competencia, puede aumentar las tarifas a su gusto, y prestar un servicio medianamente eficiente (medianamente malo), sin riesgos de que los consumidores opten por irse con sus competidores. Existen, por ejemplo, comunidades en las que no hay señal de otras empresas…

Adicionalmente, en México sólo existen cinco operadores de telefonía celular, mientras que en Estados Unidos, por comparar, hay cinco empresas que dan servicio con cobertura nacional y más de 100 que operan de manera regional o en algún estado de aquel país. En cuanto a telefonía fija, en nuestro país contamos con ocho operadores y en Estados Unidos existen más de 72 empresas que ofrecen este servicio.

Esta situación ha provocado que en México se paguen precios más elevados que otros paises de la OCDE. Esta organización ha publicado estudios que demuestran que los mexicanos pagamos alrededor de 40% más de lo que se pagan en otros mercados, precisamente… por falta de competencia.

Igualmente, en México se paga mensualmente más del doble que en Estados Unidos por un paquete de internet, a pesar de esto, la velocidad de los paquetes en territorio nacional es la más lenta de todos los países que integran la OCDE.

En el reporte del Foro Económico Mundial sobre competitividad global 2013-2014, México ocupa el lugar 114 de 148 en la efectividad de políticas de competencia.

Según el índice HERFINDAHL-HIRSCHMAN (IHH), que es una herramienta para medir concentraciones y falta de competencia, cuya medición va de 0 a 10,000, en donde 10,000 es un mercado en el que una empresa tiene el 100%, México presenta la siguiente situación.

En resumen, en México se paga cara la falta de competencia, y los servicios son de mala calidad, sin que existan incentivos para que los operadores mejoren los servicios o bajen sus tarifas.

Por esto, es impostergable el consenso de los partidos políticos para aprobar reformas que remedien la situación que se vive en el país, y no sólo eso, sino que el IFETEL, creado hace más de un año, se “ponga las pilas” para asegurar la sana competencia en el sector de las telecomunicaciones.

Esta reforma sí sería una que beneficie directamente los bolsillos de los consumidores y en un plazo inmediato.