México vs Brasil ¿En realidad nos parecemos?
- Manuel San Martín
Tal vez muchos de nosotros estemos escuchando a últimas fechas que de forma recurrente se habla de Brasil, cuál será el motivo de que Brasil este en boca de todos. La verdad es que los cariocas se han convertido en la nueva estrella de Latinoamérica, destacando por su liderazgo, competitividad y, sobre todo, atractivo para el inversor. La verdad es que creo que debemos aprender algunas cosas de Brasil (Aprovechando este empate mundialista).
Si estuviésemos interesados en saber cómo marcharían las cosas en nuestro país si algunos eventos históricos hubiesen ocurrido de forma diferente tal vez sea una buena idea compararnos con aquel país, ya que el mercado Brasileño es, en cierta medida, similar o parecido al mexicano. Hasta los 80´s el sector público era sumamente amplio, estructuras económicas similares producto del modelo de sustitución de importaciones imperante, con fuerte protección al sector agrícola e industrial. Actualmente, ambos países han abierto sus fronteras, obteniendo resultados diferentes:
Apertura al TLC.- México firma un tratado de libre comercio con EU y Canadá, que si bien ha traído un incremento considerable en las exportaciones a nuestro país, se llevó a cabo en un periodo en el cual teníamos problemas de deuda interna y externa, alta inflación y devaluaciones. Es imposible que en tales condiciones se hayan tomado todas las previsiones necesarias para no fracturar algún sector de la economía. En cambio, Brasil se abrió paulatina y hasta podríamos decir que selectivamente.
Por ejemplo, actualmente Brasil e India representan a los países en desarrollo en la Ronda de Doha, en negociaciones sobre la apertura de su industria, a cambio de concesiones a sus sectores agrícolas, ante EU y la Unión Europea. México no participa en pláticas de esta magnitud. Mejor funcionamiento en la alternancia. En México, la alternancia llevó a un nuevo partido al poder. Desafortunadamente los resultados no han sido los esperados, ya que por ejemplo, los coeficientes de Gini (que miden la distribución relativa del ingreso) se vieron perjudicados. Datos del INEGI indican que los más pobres perdieron en términos relativos y absolutos entre 2006 y 2008.
En Brasil, un tornero ganó al cuarto intento la Presidencia en 2002 y hoy en día es dirigido por una mujer. La base de la popularidad del Partido de los Trabajadores, de donde provienen Lula y Rousseff, ha sido la mejora en el nivel de vida de la población de bajos ingresos: reducción en el número de personas debajo del nivel de pobreza, y mejora en el coeficiente de Gini. Justo al revés de lo que sucedió aquí. Globalización y competitividad. Como muchos sabemos, nuestro país destina 80% de sus exportaciones a EU. Brasil tiene exportaciones diversificadas, siendo ya sus ventas a China superiores a sus exportaciones hacia EU.
Esto le da mejor perspectiva: se estima que la economía de EU crezca de 2 a 3%, y la china, de 7 a 10% en la próxima década. De igual forma, se puede apreciar una mayor competitividad al atraer cada vez con más fuerza IED hacia aquel país. Durante 2008, Brasil acumuló una cifra histórica en este rubro de poco más de 45,000 mdd, dejando a México muy atrás con 22,516 millones en ese mismo año. Para el año pasado, se estima que nuestro país atrajo unos 15,000 mdd; mientras que en Brasil la IED creció un 30% aproximadamente con respecto al año previo, es decir, unos 58,5000 mdd.
Así pues, la verdad es que México tiene mucho que aprender de Brasil. Es necesario despertar, ya que mientras nosotros seguimos enfrascados en discusiones absurdas que no llevan a ningún lugar, otros países emergentes se nos despegan cada vez más en la carrera de competitividad. Creo que Brasil debe tomarse como un referente de éxito derivado de los equilibrios económicos que ha conseguido, es decir, una economía un tanto más justa en la distribución del ingreso, con un comercio exterior diversificado y una política macroeconómica con mejores instrumentos de control.