Los actos expresivos en los seres humanos comunican todo aquello que inevitablemente sentimos y que no se queda en un mero acto físico, incluso algunas reacciones.

Jacques Corraze, un eminente –francés- doctor en ciencias humanas -y de la comunicación no verbal- en sus disertaciones sobre el tema, señaló que la falta de un lenguaje es meramente la acción de excluir a éste, empero puede generar ciertas incompetencias ir de la comunicación escrita a la oral por la ausencia de un soporte.

Recientemente se llevó a cabo un Congreso de “Periodismo Digital” donde la idea de debatir sobre la influencia de la tecnología en el periodismo, es el primero que se lleva a cabo con la intención de aprender y compartir los conocimientos de periodistas y reporteros, sus experiencias, ventajas y servicios que ofrecen hoy en día las plataformas multimedia.

Aunque el punto de partida es bueno, habría que discernir si para hacer un congreso con temas relacionados a la tecnología, al fotoperiodismo y al mismo periodismo, tendríamos que empezar por ser congruentes con el tema que es la médula del encuentro: COMUNICAR.

Empresas privadas, asociaciones civiles, instituciones públicas, ONG’s en sus políticas de comunicación siempre tienen ante sí un factor que se llama “IDENTIDAD”.

En el periodismo pasa lo mismo, medios con un sello característico, un perfil definido, ese no escrito, pero si con un lenguaje silencioso.

Y esto, no está lejos en un “Colloque”, ambicioso, que necesita de una organización, de un formato especial para los debates, del compromiso de cada uno de los invitados, de la disciplina que requiere un evento así, de su estructura, sus temas, la preparación y su difusión.

Finalmente se pretendía hacer un Congreso Productivo.

« Productivité », “Identité” et “Communiquer”

Las nuevas formas de hacer periodismo excluyen las antiguas formas de allegarse de información, de buscar la nota, pero excluir no es lo mismo que marginar. Muchas veces excluir es necesario e inevitable, pero marginar es opcional.

Excluir la grabadora de casette por una digital es lógico por tiempo, por comodidad y por rapidez, pero marginar a periodistas por medio o por condición periodística es absurdo incluso hasta humillante.

Y es que de la esfera nacional si bien se contó con periodistas de la talla de Ramón Alberto Garza y en el ámbito internacional, Esther Vargas, el malinchismo sigue imponiéndose.

¿Dónde están los periodistas poblanos talentosos?

¿Una veintena?

Si se trata de hablar de periodismo digital, eso significa que hay cabida para todo aquel medio que su origen es desde una plataforma multimedia, los que se encuentran en la transición de impreso-digital, las estaciones de radio y las señales de TV que ya cuentan con su sitio web y puedes sintonizarlos, los que hacen periodismo independiente y los que simplemente tienen vocación de ser periodistas.

¿El periodismo se limita a lo político?

¿El periodismo se limita a las “vacas sagradas”, reporteros –sólo había fuente política, deportiva y uno que cubre la fuente policiaca- y fotógrafos?

¿Y los editores? ¿Los websmasters? ¿Los jefes de Información? ¿Conductores de radio? ¿Productores de programas de Radio o Tv?

¿Dónde estaba un Arturo Rueda (Diario Cambio) o Fermín A García (La Jornada de oriente°? ¿Acaso no cuentan emprendedores como Alfonso González (Reto Diario) o Rocío Velasco (Puebla Mía)? ¿Las revistas electrónicas no cuentan en el nuevo periodismo digital como “La Jungla de Mariano”?

Jorge Rodríguez es el columnista con mayor número de lectores en el Estado y ni figuró, vaya, nadie del periódico más tradicional en Puebla y que cuenta con una página digital, ¿eso tampoco es periodismo digital?

¿Y las mujeres? ¿Dónde está una talentosa Paty Estrada (Vértice 102.1)? Vicky Fuentes (Radio Oro) y Socorro López Espinosa (Status Puebla) son expertas en temas económicos. Erika Rivero (Periódico Digital), María de los Ángeles García (El Sol de Puebla), Leticia Montagner (ABC Radio) y Lety Torres (NG Puebla) contribuyen con su columna y su particular forma de escribir.

¿Y la vieja guardia? Mauro González, Gabriel Sánchez Andraca & Co finalmente son periodistas que siguen escribiendo y que sería interesante saber esa transición que han vivido desde sus inicios.

¿Y la prensa rosa? Atrae más que la política, ahí está Kary Cruz (Puebla on Line). ¿Y la gastronomía, lo cultural? Tenemos a Jesús Manuel Hernández (Los Periodistas) y recientemente a Guadalupe Gálvez (El tentempié).

¿Dónde están los corresponsales del Estado? ¿Elvia Cruz (CNN Mx)? ¿Fernando Pérez Corona (Grupo Imagen)? ¿Xóchitl Rangel (El Universal)?

Periodistas como Manuel Frausto con un público universitario (Radio BUAP) ¿o Contraparte informativa, Puebla Prioridad, Poblanerías,  Imagen Poblana?

¿Cronistas? Mario Martell (Intolerancia Diario)

¿Y los que hacen radio, con una nota con audio, imagen, resumen y uso en redes sociales? Al menos una mención digo, su trabajo tiene mérito. Alejandro Hernández Limón (Cinco Radio), Angélica Patiño (Así Sucede), Agustín Hernández (Ultra 92.5), Claudia García Polo (ABC Radio)

De fotoperiodismo, Raúl Rodríguez es hoy por hoy uno de los mejores fotógrafos, pero tampoco fue convocado.

Ya mejor ni preguntar la convocatoria hacia el interior del Estado, ya será para la otra Lety Animas y Javier Arellano

Esa es la “nouvelle époque” del periodismo mexicano, sí, ese donde se excluye y se margina, donde creen que hacer periodismo digital es tener un sitio web y… tener un sitio web.

Excluyentes y alejados de la realidad.

Errados en concepto y fin, ni botellas de agua había para los ponentes, elitistas al elegir sedes, porque el internet no es exclusivo de la UDLA, IBERO, BUAP, Anáhuac y Tecnológico de Monterrey.

En Puebla al menos hay otras diez instituciones con carrera de Comunicación, la falta de difusión y de convocatoria, graves tropiezos para un proyecto que busca ser productivo.

Corraze lo confirma, no es lo mismo la comunicación escrita a la oral y en el camino de transición hay tropiezos y errores, deficiencias.

Por cierto, bravo por Paulo Yolátl quién fue el único que vi que realmente se identificaba con su empresa (portando un chaleco con el logotipo de su empresa, SexenioFm) y quién si iba preparado para su ponencia.

Hasta para organizar un evento hay que tener definida su imagen, su objetivo, su misión, su trascendencia y su disciplina.

Y el periodismo tiene 4 reglas de oro: deber informar, respeto al lector, interés público y el derecho de saber.

Puebla tiene mucho talento a desarrollar hablando periodísticamente.

COMUNICAR es la palabra clave.