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En el interior de Puebla, fallas del IMSS-Bienestar empeoran
Los hospitales municipales de Puebla administrados por el IMSS-Bienestar enfrentan desabasto de alimentos, medicamentos y de estudios de laboratorio, así como infraestructura deficiente y baja calidad en el servicio. Esta crisis, denunciada por e-consulta, fue confirmada por familiares de pacientes internados.
En Tehuacán, Acatlán de Osorio y Huejotzingo, el abandono en el que se encuentran los nosocomios ha obligado a los familiares a asumir costos y esfuerzos adicionales. A pesar de las denuncias, las autoridades hospitalarias han mostrado una respuesta limitada.
#ÚLTIMAHORA Grave desabasto de alimentos en Hospitales públicos de Puebla controlados por IMSS Bienestar.
— Periódico e-consulta (@e_consulta) January 8, 2025
Por un error en la adjudicación directa y tras cambio de proveedor, ahora hospitales como el General de Tehuacán no tienen cómo alimentar a sus pacientes; a otros llegan… pic.twitter.com/cBeyniV6yK
Hospital General y Hospital de la Mujer de Tehuacán
En Tehuacán, los hospitales enfrentan un grave desabasto de medicamentos y alimentos desde hace tres meses. Pacientes y familiares reportan haber desembolsado cantidades significativas para adquirir medicinas y realizar estudios de laboratorio.
Nicolás Viveros, oriundo de Huauchinango, destacó que ha gastado más de mil 600 pesos en medicamentos para su hijo, quien sufrió un accidente en motocicleta. Orlando García, con su sobrina internada por neumonía, reportó gastos de hasta 12 mil pesos en medicamentos.
#AlMomento Familiares de pacientes internados en el Hospital de la Mujer y el General de Tehuacán, controlados por IMSS-Bienestar, confirman el desabasto de alimentos, medicamentos y la falta de estudios de laboratorio, tal como lo informó e-consulta.
— Periódico e-consulta (@e_consulta) January 8, 2025
Vía @AndreaCast45322 pic.twitter.com/hHci4z0qk4
Verónica Díaz Linares explicó que su madre, con insuficiencia renal, requiere un medicamento de 600 pesos y un estudio radiológico externo, ya que el hospital carece de equipo y ambulancias para el traslado.
El personal del Hospital de la Mujer admitió que las porciones de alimentos han sido reducidas y que los estudios de laboratorio se retrasan debido a protocolos morosos; además, los directivos de ambos hospitales se negaron a proporcionar declaraciones.
Hospital General de Acatlán de Osorio
Desde su inauguración en 2014, el Hospital de Acatlán ha sufrido un notable deterioro en su infraestructura y servicios, entre ellas fisuras en paredes, techos con filtraciones, más de 100 lámparas fundidas, y un techado principal en riesgo de colapsar.
Asimismo, cuenta con computadoras antiguas, mobiliario roto, y sistemas de aire acondicionado inoperantes. Los familiares de los pacientes también han reportado que sólo un baño público se encuentra en funcionamiento.
Entre los medicamentos escasos se encuentran Ambu Adultos, Carbetocina, Propofol, Ambu Neonatal, Rocuronio, Ropivacaína, Midazolam, Norepinefrina y Vasopresina. De igual forma, hay al menos 10 vacantes en áreas clave como cirugía, urgencias, anestesiología y caja.
Hospital General de Huejotzingo
En Huejotzingo, el desabasto de medicamentos y la falta de insumos complican la situación, de acuerdo con los familiares de los pacientes que se encuentran recibiendo atención en el lugar. Los afectados señalaron que hay falta de revisión del personal médico, estudios cancelados y pretextos para no realizar pruebas.
Un caso destacado fue el de un paciente que lleva 10 días hospitalizado debido a quemaduras. Su familiar comentó que los estudios realizados no han tenido costo alguno; sin embargo, el hospital no proporciona todos los medicamentos necesarios.
Este es un ejemplo de lo que padecen los familiares que tienen algún familiar internado en el Hospital General de Huejotzingo ante el desabasto de medicamentos. Tienen que buscar las medicinas que requieren los pacientes para continuar con su tratamiento.
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Vía @MAngelesAlonso pic.twitter.com/G6Oq3zesgs
Los familiares exigen el abastecimiento de medicinas para evitar riesgos y gastos adicionales, especialmente porque deben trasladarse a zonas lejanas para conseguir una farmacia y poder adquirirlas. (APP)
Con información de Andrea Castillo, Brisselda Sarabia y Ángeles Alonso