- Municipios
Familias de Atlixco celebran a la Virgen con comida y mariachis
Las familias atlixquenses devotas de la Virgen de Guadalupe gastaron este 12 de diciembre alrededor de 5 mil pesos o más en festejos, que incluyeron trajes tradicionales para los niños, las mañanitas, tamales, mariachi, fotos de recuerdo al salir de la misa, y comida para compartir con vecinos y familiares en una emotiva celebración en honor a la Guadalupana.
En el centro de la ciudad, los trajes típicos de Juan Diego y María se vendían desde 480 hasta mil pesos. Las tallas iban desde cero meses hasta adultos, tanto para mujeres como para hombres.
En la zona de los puestos de temporada se ofrecían principalmente estos artículos y eran las mamás de menores de tres años quienes más adquirían los trajes. El conjunto se conforma por huaraches, huacal, sombrero, ayate con la imagen de la Virgen, calzón y camisa de manta para los niños.
Para las mujeres, los trajes consistían en una falda colorida, blusa bordada, rebozo, huaraches y guacal o canasta. Además, si lo deseaban, se podían complementar con diademas con trenza o vestidos de manta con la imagen de la Virgen.
A este festejo, que comenzó la noche anterior con rosarios en el Día de Guadalupe, se suman los altares en los patios, la convocatoria a familiares y vecinos, así como la contratación de mariachis para amenizar la celebración. También se ofrecieron tamales, café, chocolate y arroz con leche.
Es el caso de Mayra Cañete, quien vive en la colonia Benito Juárez, sus actividades para celebrar comenzaron a las 19:00 horas del 11 de diciembre. En familia, colocó un altar lleno de imágenes de la Guadalupana fue el centro de su patio, decorado con guías de colores verde, blanco y rojo, flores y veladoras.
A la cita llegaron al menos 30 personas, convocadas desde días antes. Después de rezar, les ofrecieron tamales tradicionales y jarocho, además de bebidas calientes. Sin embargo, el festejo no paró ahí. Esta mañana, después de las mañanitas, Mayra preparó un desayuno, y para el mediodía, ofreció una comida de agradecimiento a los asistentes.
Mayra comentó que su fe hacia la Virgen de Guadalupe es lo que la motiva a celebrar de esta forma, una devoción que ha heredado de su familia. Aseguró que, aunque el gasto no es fácil, lo realiza con mucho amor, por lo que prefirió no revelar el monto invertido en la celebración.
Mientras tanto, en las iglesias de la ciudad, muchos acudieron a las misas correspondientes, llevando a sus hijos para escuchar la palabra santa. Al salir, tomaron las tradicionales fotos del recuerdo en los escenarios dispuestos por fotógrafos locales. (APP)