El exfuncionario de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado de Guerrero, Liobardo Alarcón de la Cruz, fue detenido por la Fiscalía General de la República (FGR) luego de buscarlo desde hace casi dos años por supuestos vínculos con delitos en el caso Ayotzinapa.

De acuerdo con fuentes ministeriales, la captura se realizó el 17 de mayo, producto del cumplimiento de una de las 83 órdenes de detención emitidas en su momento por el juez Segundo de Distrito de Procesos Penales Federales en el Estado de México, Enrique Beltrán Santés.

Al parecer, el expolicía fue trasladado a la Ciudad de México (CDMX) y posteriormente ingresó al Penal Federal del Altiplano, en el Estado de México (EdoMex). Se informó que ese mismo día se presentó ante la jueza Raquel Duarte Cedillo.

Según la FGR, Alarcón de la Cruz solicitó que el plazo para la definición de su estado legal fuera extendido, así que tendrá hasta el 23 de mayo para que la jueza determine si le dicta formal prisión.

Cabe señalar que, el exagente era buscado por los elementos de seguridad desde agosto de 2022, ya que es uno de los 11 policías estatales de Guerrero contra los que se solicitó orden de captura por presuntos delitos contra la administración de justicia, desaparición forzada, homicidio, delincuencia organizada y tortura.

Estos arrestos no son los únicos realizados por presuntos vínculos con el caso Ayotzinapa; anteriormente la FGR también arrestó a ocho agentes por su posible responsabilidad en la desaparición forzada de los normalistas.

En ese momento las detenciones fueron realizadas por miembros de la Policía Federal Ministerial, de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) en Chilpancingo, Guerrero.

Por este mismo caso, en 2022, la Fiscalía solicitó en total 83 órdenes de arresto contra exintegrantes y policías estatales y municipales, así como exalcaldes y miembros del grupo Guerreros Unidos. (JRLM)