La tarde del sábado 4 de mayo cambió el futuro de Tania Félix Gómez Trejo, quien estaba enlistada como diputada plurinominal suplente pero al mismo tiempo comandaba un grupo de seis hombres, quienes la obedecían al primer tono de voz.

Así lo demostró ella misma el día de su detención, cuando junto a su grupo quedó atrapada en el garaje de la casa ubicada en la diagonal Río Papagayo, número 8115, colonia Tres Cruces, que vecinos confirmaron es propiedad del dirigente municipal del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Juan de Dios Bravo.

e-consulta tuvo acceso a la carpeta de investigación FGEP/CDI/ FEISE/EXTORSION-1/070/2024, donde se dan detalles del día de la detención de Tania y su grupo. Todo transcurrió en 30 minutos, desde que se recibió una llamada anónima para alertar del domicilio en cuestión.

El arribo de la policía a la casa de seguridad

De acuerdo con el relato de los policías estatales que ese día patrullaban la colonia Tres Cruces, acudieron al domicilio tras un reporte telefónico, donde se había alertado que ese domicilio operaba, al parecer, como casa de seguridad.

Dos patrullas de la Policía Estatal llegaron a la calle y al notar su presencia, un primer hombre corrió hacia la casa y se metió, pero dejó abierta la puerta y después intentaron echar a los uniformados con cuatro disparos.

A las 17:47 horas de ese sábado los balazos pegaron en la puerta de metal, los policías se quedaron afuera y observaron cómo una camioneta Toyota Tacoma 2018 intentaba salir del domicilio, pero chocó contra la puerta que estaba bloqueada por la patrulla de la Secretaria de Seguridad Pública (SSP).

Eran dos carros dispuestos a salir huyendo, la Pick Up Toyota y un Volkswagen Vento, pero ninguno pudo salir.

Tania y su comando intentan sobornar a policías

Entonces, los hombres intentaron persuadir al grupo de uniformados:

“No saben dónde se vinieron a meter, van a valer madres”, dijo uno de ellos. Los policías aguardaron. Entonces se escuchó el grito de una mujer hacia su grupo, la única que estaba ahí era Tania: “ya saben qué les puede pasar a ustedes y a su familia si abren la boca”.

Después ella se refirió a los policías: “a ver, les voy a hablar claro, no tienen ni puta idea de con quién se están metiendo, si no quieren valer madres les conviene dejarnos ir, no queremos provocar un escándalo ni mucho menos llamar la atención. Qué les parece si nos arreglamos por las buenas, en caliente les doy 30 mil varos y lárguense de aquí. Ustedes no vieron ni saben nada”. Después mostró de su mochila varios billetes de 500 pesos y los extendió hacia una policía.

La mujer policía le dijo que lo que acababa de realizar también era un delito.

“Mira, cabrón, estoy siendo accesible con ustedes, no me hagan enojar porque no les conviene, agarren lo que les estoy ofreciendo y lárguense de aquí”, respondió Tania.

En ese momento otro hombre sacó de su pantalón otros billetes y se los extendió al policía para decirles: “tenga, patrón, yo les doy 8 mil varos”, de manera simultánea otro sujeto ofreció 20 mil más.

Entonces la mujer advirtió: “ya les dije que no les conviene hacerme enojar, les estamos dando todo lo que llevamos en este momento, si quieren denme oportunidad y les consigo más dinero, o para no perder más tiempo les doy los teléfonos que llevamos. Rápido, cabrones, todos denme sus celulares”, al mismo tiempo sacó cuatro celulares.

“Vayan despidiéndose de su familia, que ya están muertos”

Sin embargo, los policías no los aceptaron y Tania replicó:

“Bola de pendejos, no tienen idea de con quién se metieron, vayan despidiéndose de su familia, que ya están muertos, hijos de la chingada… Y ustedes cabrones ya se la saben, ni una sola palabra o ya saben que les pasa a los que cantan”, dijo Tania.

Después, el relato de los policías estatales dio un salto. Sin explicar cómo sometieron al grupo de siete personas, entre ellos, Tania y un menor de 15 años.

Ellos son: Tania, Mario, Naim, Herminio, Kevin y Christian, además del menor de 15 años.

A uno por uno los revisaron y a todos les encontraron armas cortas, envoltorios con diferentes drogas como marihuana, cristal y cocaína.

Los detenidos fueron puestos a disposición y el agente del Ministerio Público consideró un riesgo muy alto de fuga porque no existe información real referente a sus datos personales, pidiéndose prisión preventiva.

También consideraron que Tania y su grupo pueden crear un alto índice de inestabilidad, inseguridad y violencia, causando afectación para la sociedad, por ello se pidió que se quedaran en prisión el tiempo que dure la investigación.

De esta manera les imputaron a los seis detenidos y al menor de edad homicidio en grado de tentativa, cohecho, delitos contra la salud, portación de arma de fuego de uso exclusivo del Ejército y Fuerzas Armada, portación de arma de fuego sin licencia, posesión de cartuchos para armas de fuego de uso exclusivo del Ejército y Fuerzas Armadas y portación de un inhibidor de señal. (CR).