Familiares de los peregrinos originarios de Acatzingo, Puebla, que fueron atropellados en la autopista México-Puebla, exigen justicia por el caso y que no quede impune. Lamentaron además que uno de los fallecidos deja en la orfandad a dos niños.

La noche del lunes 11 de diciembre, 30 motociclistas que regresaban a la comunidad de San Sebastián Villanueva, Acatzingo, fueron embestidos por un conductor en estado de ebriedad, tras detenerse unos instantes por una falla en una moto que los acompañaba.

Dicho percance dejó saldo de tres muertos y 9 lesionados, tratándose de:

Gabriel de Ángel Ávalos, de 32 años de edad

Ángel Gabriel Juárez, de 22 años, y Abraham G, de 14 años, quienes ya volvían de la Basílica de Guadalupe

El percance se registró a la altura del kilómetro 8, en la estación La Virgen, ubicada en límites del Estado de México y Ciudad de México, cerca de la zona de Chalco.

De acuerdo con información del canal Imagen Televisión Puebla, los peregrinos salieron el 10 de diciembre de la comunidad y para la mayoría se trataba del segundo año que visitaban a la virgen de Guadalupe.

Se precisó que se trata de campesinos y, en general, personas de escasos recursos.

“Que pague por lo que hizo porque no estuvo bien, ellos iban a ver la virgen, no era para que les hiciera eso. Queremos justicia”, señaló Laura Claudio, la madre del menor de edad que falleció.  

Por su parte, Claudia Gómez, suegra de Gabriel de Ángel, refirió en el mismo noticiero: “No tienen recursos, la casa es de su tío… Deja dos hijos, una niña y un niño. Yo lo que pido es que se le haga justicia”.

Además, los familiares piden no sólo por los fallecidos, sino también por los que se encuentran internados en varios hospitales de la CDMX, así como las familias de los fallecidos.

Se prevé que la llegada de los cuerpos al municipio poblano sea en el transcurso de la tarde de este martes 12 de diciembre, para ser velados en la parroquia de San Sebastián Villanueva. (MCJ)