El Congreso del Estado de Puebla sí trabaja, pero en general no escucha las demandas de la gente ni se enfocándose a las necesidades de la entidad, pero sí aprueba las iniciativas del gobernador Luis Miguel Barbosa Huerta en un lapso de cinco a 19 días, revela un análisis del Observatorio Legislativo encabezado por la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP).

En el estudio en el que también participó la Universidad Iberoamericana Puebla y la Universidad de las Américas Puebla (UDLAP) se evaluó con 7.3 de 10 puntos posibles el trabajo de los diputados locales de la LXI Legislatura.

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María del Rosario Andrade Gabiño, integrante del Instituto Promotor del Bien Común de la UPAEP, comentó que el poder legislativo recibió 544 iniciativas y menos del 20 por ciento fueron aprobadas y esto está relacionado con la falta de trabajo de las comisiones.

De las iniciativas de ley destacó que 168 fueron impulsadas por Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), de las cuales 13.1 por ciento fueron aprobadas; el Partido Acción Nacional (PAN) promovió 150 y de éstas fueron avaladas el 8 por ciento, mientras que el Partido Revolucionario Institucional (PRI) impulsó 87 iniciativas, de las cuales se avalaron 16 por ciento.

Barbosa, el gran legislador otra vez

La junta de gobierno es quien tiene un porcentaje más alto de iniciativas aprobadas, y le sigue el gobernador del Estado, Luis Miguel Barbosa Huerta, de quien también sobresalió que sus propuestas son avaladas en cinco y hasta 19 días, precisó Andrade Gabiño.

Los temas más comunes sobre los que se han legislado son: impuestos, justicia, estado de derecho y medio ambiente, mientras que contrariamente, casi no se aborda la agricultura, ganadería e infraestructura cuando estos tópicos están más cercanos a las necesidades de la ciudadanía.

A estos rubros referidos por la académica también se suma que las feministas llevan meses protestando por la aprobación de las iniciativas relacionas con la despenalización del aborto, además de que colectivos también han demandado que se legisle sobre movilidad, pues ya venció el plazo previsto para crear la Ley de Movilidad y Seguridad Vial.

Otro aspecto que resaltó la académica es que, si bien disminuyeron algunas brechas de género en el Congreso del estado, se siguen observando casos en los que personas con el mismo cargo tienen salarios distintos, y los del género masculino ganan más; además hay más hombres con una jefatura.

Congreso ignora temas prioritarios

En su intervención, Mathias Nebel, director académico del Instituto Promotor del Bien Común de la misma universidad, consideró que hace falta informar sobre todos los temas y a veces suelen publicar los datos, pero no en tiempo y forma.

Mencionó que el Congreso del estado no tiene prioridades relacionadas con la realidad del estado, las comisiones no sesionan para abordar temas como la pobreza, la infraestructura y la transparencia, cuando la entidad es una de las más pobres del país.

También advirtieron que hay una ausencia de la supervisión del trabajo del Ejecutivo, pues es un actor importante y no tiene contrapeso.

Roberto Alonso Muñoz, coordinador de la Licenciatura en Ciencias Políticas y Administración Pública de la Universidad Iberoamericana Puebla, opinó que en general la LVI Legislatura tiene un buen desempeño, cumplen con sus memorias de trabajo, acuden a las sesiones del pleno, son puntuales y votan.

Sin embargo, falta que las comisiones sesionen, más transparencia y que haya una conexión con la sociedad.

A su vez, Víctor Reynoso Ángulo, académico de la UDLAP, coincidió que falta más diálogo con la sociedad al momento de legislar.