Gran sorpresa causó la boda de Britney Spears y Sam Asghari. TMZ fue el medio que informó que la boda se realizaría ayer en un evento privado, donde no estarían la hermana ni los padres de la artista.

La boda se realizó en la casa de la artista que está en Thousand Oaks, pero al lugar llegó el exesposo de Britney, Jason Alexander; quien alegó que ella lo había invitado.

Se informó que Britney vendió la exclusiva de su boda a la revista Vogue. Se informó que fue un evento íntimo y se señala que su la acompañaron únicamente sus familiares y amigos. Pero ni sus papás ni su hermana recibieron una invitación.

El vestido de Spears fue de Versace. La marca creó un elegante diseño con escote barco y una abertura lateral con un velo blanco ribeteado con bordes de satén.

La famosa optó por unos diamantes de Stephanie Gottlieb con unos pendientes en forma de pera, un collar estilo choker con un corazón engastado en oro blanco y un brazalete a juego.

Por su parte, Sam se enfundó un esmoquin de Versace.

La revista Quién informó que en la carpa en donde se realizó la ceremonia fue adornada en tonos rosados y decorada con flores, la pareja comenzó la fiesta posterior en la que Britney se cambió hasta en tres ocasiones para lucir un minivestido negro, un conjunto en dos tonos y otro minivestido rojo de Versace.

En el primer baile de la pareja, la cantante realizó una coreografía con Madonna y Selena Gomez al ritmo de su sencillo Toxic y más tarde cantó el sencillo Stars are blind con su amiga Paris Hilton, según lo dado a conocer por la revista.

El matrimonio abandonó el ligar alrededor de las 10 de la noche a bordo de un Rolls Royce, mientras los invitados los despedían con bengalas en la mano.

Por medio de la cuanta de Instagram @charlottetilbury, se comparten fotos de la pareja.

 

 

 

 

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