Cada 15 minutos, en promedio, un vehículo de carga o particular evade la vigilancia en la carretera 190, donde comienza la frontera entre México y Guatemala, al tomar un tramo de 200 metros, de terracería, paralelo a la autopista federal y luego reincorporarse a ésta.

Así es como los conductores burlan las revisiones obligatorias a cargo de la federación en el Centro de Atención Integral al Tránsito Fronterizo (CAITF), en el municipio de La Trinitaria. Ocurre a plena luz del día y a través de un “camino hormiga”, un tramo de terracería paralelo a la vía federal.

La volcadura sobre la carretera Tuxtla Gutiérrez – Chiapa de Corzo, que frustró la vida de medio centenar de migrantes, evidenció la porosidad de la frontera sur frente al tráfico ilegal de personas y la ligereza de los puntos de revisión a cargo de los tres niveles de gobierno.

La muestra más tangible se puede ver en La Trinitaria, un predio de casi 11 hectáreas sobre la carretera federal donde convergen las carreteras que vienen de las zonas fronterizas de Nuevo Orizaba y Ciudad Cuauhtémoc, esta última, la región donde -se presume- habrían ingresado los migrantes que murieron el 9 de diciembre.

Para librarse de la revisión oficial, basta tener pericia para manejar diez metros en sentido contrario, incorporarse a un camino de piedritas y aparecer 200 metros más adelante sobre la misma pista federal. En  promedio cuatro vehículos evaden la revista cada hora.

Este punto de revisión está a cargo de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, a través del Servicio de Administración Tributaria (SAT), y mantienen presencia autoridades del Instituto Nacional de Migración, Guardia Nacional, la Secretaría de la Defensa Nacional y de la Marina-Armada de México. En ese punto se estaría inspeccionando todos los días a 450 vehículos ligeros, 300 vehículos de carga y más de 400 autobuses.

La carretera federal 190, por donde avanzó el tráiler, conecta Tuxtla Gutiérrez, Chiapa de Corzo, San Cristóbal, Teopisca, Comitán y La Trinitaria, por lo que de haber seguido este recorrido, la tragedia pudo ser evitada desde este centro de revisión.

De acuerdo con el general Luis Rodríguez Bucio, comandante de la Guardia Nacional, el camión no fue detectado por ningún retén ya que habría sido abordado por los migrantes en San Cristóbal de Las Casas, aunque testimonios de migrantes advierten que el autobús habría comenzado su ruta en la ciudad de Comitán, según una información del diario Milenio.