Antonio Martínez Fuentes, el presunto líder criminal conocido como “El Toñín”, logró eludir un nuevo operativo para su captura, cumpliendo así más de 4 años en el ojo público por sus vínculos con la delincuencia organizada, pero también por su participación en la política.

“El Toñín” saltó a la fama en el punto más álgido del robo de combustible en el denominado “Triángulo Rojo”, pues fue el 3 de mayo del 2017 su nombre se colocó en la agenda nacional.

La madrugada de ese día ocurrió un enfrentamiento entre sicarios, presuntamente a su mando, y personal del Ejército Mexicano, los cuales buscaban capturarlo en su territorio: Palmarito Tochapan, junta auxiliar del municipio de Quecholac.

En el lugar se encontraron con un complejo sistema de vigilancia de circuito cerrado, instalado por toda la localidad, el cual permitió que los militares fueran emboscados por los civiles ligados a “El Toñin”.

El saldo fatal fue de seis civiles y cuatro soldados muertos, pero la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) inició una investigación que derivó en una recomendación por violaciones graves, ya que una serie de videos evidenció que los militares perpetraron ejecuciones extrajudiciales y sembraron armas a los civiles abatidos.

En octubre de ese mismo año la Marina intentó catear el domicilio de Alejandro Martínez Fuentes, primo hermano de El Toñín y, en ese entonces, alcalde electo en Quecholac, pero los uniformados tuvieron que retirarse luego de que la población salió a las calles para correrlos.

En ambas incursiones ocurrió lo mismo que la madrugada de este viernes, pues la población salió a encarar a las autoridades y con barricadas bloquearon la autopista Puebla-Orizaba en protesta por los operativos, haciendo que hasta hoy siga libre.

La incursión en la política

“El Toñín” incursionó en la política a través de su primo hermano, Alejandro Martínez Fuentes, quien fue postulado en 2018 a la presidencia municipal por el partido Pacto Social de Integración (PSI) y ganó. El pasado 6 de junio volvió a competir para buscar la reelección y volvió a ganar.

Aunque en el proceso electoral de 2018 el PSI fue en alianza con el PAN en la gubernatura, en algunos municipios el partido postuló a sus perfiles, situación que ocurrió con Alejandro, de profesión abogado y de entonces 44 años de edad.

Por la popularidad de su familia y con ayuda de su primo, Alejandro fue electo como presidente municipal tras una campaña en donde varios actores políticos, incluido el ahora gobernador Miguel Barbosa, pidieron que le quitaran la candidatura por sus presuntos vínculos con el crimen.

A pesar de que en la campaña del 2018 Barbosa Huerta desconoció a Alejandro Martínez, un año después, cuando buscó la gubernatura en la elección extraordinaria, aceptó estar con él en un evento proselitista en el zócalo de Quecholac.

La ayuda social

Ya con su primo en la presidencia de Quecholac, el resurgimiento de “El Toñín” se dio durante diciembre de 2020 y las primeras semanas de enero de este año, cuando un grupo de personas comenzaron a repartir verduras en colonias al sur de la ciudad de Puebla, municipios como Cuautlancingo y Amozoc, así como en otras localidades en los estados vecinos de Veracruz y Oaxaca.

El reparto estaba acompañado de transmisiones en redes sociales donde le pedían a la gente que agradeciera el apoyo al ejidatario de Palmarito Tochapan, Antonio Martínez Fuentes.

Cuando sus acciones se hicieron virales, Martínez Fuentes trató de seguir el reparto, sin embargo, estas se detuvieron cuando la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) del estado detuvo uno de los camiones y detectó una motocicleta, presuntamente robada.