El periódico El Español contó la historia de una novia que quería la boda de sus sueños, pero los costos que esto implicaba la hicieron tomar decisiones que la llevaron a quedarse sin enlace matrimonial y al parecer sin pareja.

Según el medio de comunicación, la joven soñaba con una boda estilo “Kardashian”, ya que no quería algo común y se dice deseaba algo estilo Hollywood.

En las redes sociales a Susan se le llamó “bridezilla”, que en su traducción es una mezcla de las palabras novia y Godzilla (algo así como noviazila).

La chica habría admitido que se encontraba triste por lo ocurrido y dicen se atrevió a llamar a sus amigos y familiares “serpientes”.

¿Y cuál fue la razón por la que la boda se canceló o por qué los invitados decidieron no participar del enlace?

La razón es que ella les pidió a cada uno de sus invitados que pagara mil 500 dólares (más de 28 mil pesos mexicanos). Y como es de esperarse su propuesta no fue aceptada.

Susan y su novio se conocieron desde los 14 años, cuatro años después él le dio un anillo de unos 5 mil dólares (alrededor de 95 mil dólares) y un par de años más adelante nació su hijo.

Con el nacimiento de su bebé, los planes de boda tomaron forma e iniciaron los preparativos. Ellos tenían 15 mil dólares (unos 284 mil pesos) para el enlace y la familia de él les dio otros 3 mil (alrededor de 57 mil pesos)

Pero la suma seguía creciendo, ya que la dama de honor, mejor amiga de Susan, les dio otros 5 mil dólares.

Con los 23 mil  dólares (más de 435 mil pesos) ya se podía tener una muy buena fiesta… pero para ella al parecer no era suficiente.

Ella pidió a sus invitados los mil 500 dólares y lanzó el siguiente mensaje que sonaba a advertencia: “Lo dejamos claro. Si no podías contribuir no estabas invitado a nuestra exclusiva boda”.

Pero tras dos semanas de espera y ver que los invitados no respondieron, lanzaron una contrapropuesta para pedir a las personas que aportaran lo que pidieran.

“En serio, gente, ¿qué son 1.000 dólares? ¿Qué son 1.500 dólares? Claramente, no mucho”, posteó Susan.

Y las cosas se complicaron cuando él le propuso casarse en Las Vegas, ya que ella lo tomó como un insulto “¿Qué soy? ¿Una alcohólica? ¿Una fulana?”, preguntó en Facebook.

Foto Agencia Enfoque