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Sólo Montiel incumple antigüedad como abogado entre magistrados
En promedio los magistrados del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) que son cercanos al ex gobernador Rafael Moreno Valle Rosas cuentan con cédulas profesionales como abogados expedidas hace 22 años, sin embargo su experiencia en el ámbito judicial -salvo algunas excepciones- es mínima.
Actualmente existe un amparo en contra de la designación de José Montiel Rodríguez como magistrado del Tribunal Superior de Justicia, ya que su título profesional aún no tiene 10 años de antigüedad como mínimo, según lo requiere la Ley Orgánica del Poder Judicial del Estado.
En entrevista Manuel Carmona, integrante del Movimiento Anti-reeleccionista de Puebla, afirmó que no basta con que los actuales magistrados tengan años en ejercicio de la profesión de abogado, sino que se requiere como lo establecía la Ley Orgánica del Poder Judicial que cuenten con una carrera en el TSJ.
Al principio de la administración anterior, la Ley Orgánica del TSJ fue reformada para eliminar la exigencia de contar con experiencia en el Poder Judicial para ocupar el cargo de magistrado.
El magistrado con más experiencia como abogado ya renunció
Según la revisión hecha, el magistrado José Saúl Gutiérrez Villarreal era quien contaba con más años de experiencia como abogado, ya que su cédula profesional fue expedida en 1992, es decir hace 24 años.
Quien renunció recientemente a su magistratura en medio de una disputa por el poder al interior del TSJ carecía de experiencia en el Poder Judicial local ya que sus anteriores cargos fueron como funcionario del ISSSTE, Semarnat, Profepa y del Instituto Nacional Electoral (INE), entre otros.
El propio ex presidente, Roberto Flores Toledano, cuenta con 23 años como abogado, ya que su cédula profesional fue expedida en 1994, sin embargo su experiencia en el Poder Judicial era nula, ya que antes de llegar al TSJ dirigía su propio despacho de abogados Flores Toledano y Rullán Abascal, S.C.
Algunas excepciones
Ignacio Galván Zenteno cuenta con 22 años de experiencia como abogado y tiene experiencia en el Poder Judicial aunque también es cercano al ex gobernador Rafael Moreno Valle.
Según una ficha del TSJ, se ha desempeñado como actuario judicial en el Juzgado Sexto de Distrito en Materia Penal en el Distrito Federal y en el Juzgado Segundo de Distrito en el Estado de Puebla; secretario en el Juzgado Segundo de Distrito en el Estado de Zacatecas y en el Juzgado Sexto de Distrito en el Estado de Puebla, entre otros cargos.
También ha sido secretario del Juzgado Sexto de Distrito "A" en el Estado de Puebla, del Juzgado Séptimo de Distrito en el Estado de Puebla y del Tercer Tribunal Colegiado en Materia Civil del Sexto Circuito.
No obstante su designación fue cuestionada debido a que es esposo de la actual secretaria de Salud, Arely Sánchez Negrete.
María de los Ángeles Camacho Machorro y Jared Albino Soriano Hernández también cuentan con 22 años como abogados y con experiencia en el ámbito judicial, ya que ambos se desempeñaron como jueces.
Un caso similar es el de Alberto Miranda Guerra con 23 años de experiencia como abogado y quien pasó de juez a magistrado.
Nuevo magistrado en la presidencia
El actual presidente de la Judicatura, Héctor Sánchez Sánchez, cuenta con una cédula profesional que data del 2001 pero carecía de experiencia en el ámbito judicial.
Quién se desempeñó como síndico municipal es uno de los hombres más cercanos al gobernador José Antonio Gali Fayad.
Israel Mancilla Amaro también cuenta con una cédula profesional que data del 2001, por lo que tiene 17 años de experiencia como abogado, sin embargo pasó de ser un operador político del PAN a magistrado.
Otro operador político que pasó a magistrado es Roberto Grajales Espina. Su cédula profesional data del año 2000, por lo que hoy tiene 18 años como abogado.
Por su parte Marcos Moreno Gavaldón cuenta con 15 años como abogado pero sin experiencia en el ámbito judicial, ya que pasó del gobierno estatal al Poder Judicial.
Magistrados deben tener carrera judicial
Manuel Miranda Sosa, integrante del Movimiento Antirreeleccionista, consideró que el TSJ se convirtió en una agencia de colocación y de pago de facturas para los morenovallistas.
Manifestó que salvo algunas excepciones la mayoría de los actuales magistrados carecen de una carrera en el Poder Judicial, lo que pone en duda su trabajo.
En su opinión es necesario que los magistrados cuenten con carrera judicial en función de la importancia de las decisiones que toman.