Unas 590 réplicas detectó hasta la mañana de este sábado el Servicio Sismológico Nacional (SSN), del movimiento de 7.2 grados en la escala de Richter registrado ayer 16 de febrero a las 17:39 horas con epicentro en Pinotepa Nacional, Oaxaca.

Las más fuertes, de acuerdo con sus reportes, ocurrieron a las 18:36 que alcanzó una magnitud de 5.9 y otro a las 21:54, de 5.2, ambos nuevamente se registraron con epicentro en el mismo punto de las costas de Oaxaca.

Aún este sábado, a las 15:30 horas se registró otro movimiento de 5.5 grados, de acuerdo con el sismológico, que pudo sentirse en la ciudad de Puebla y provocó que se activaran las alarmas en centros comerciales, como el de Angelópolis.

Durante una rueda de prensa realizada esta mañana en las instalaciones del SSN en la Ciudad de México, se detalló el tipo de sismo registrado, su origen y las diferencias tanto con los sismos de septiembre de 2017.

De acuerdo con Xyoli Pérez Campos, la jefa del SSN, se trató de un sismo en el que la Placa de Cocos se desplazó por debajo de la Placa de Norteamérica, en un movimiento que estiman de 2.15 metros.

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Este movimiento se considera como una de las consecuencias en el Istmo de Tehuantepec, del sismo del 7 de septiembre de magnitud 8.2, que también tuvo que ver con el movimiento de esas dos placas y que suma en 5 meses, más de 18 mil 382 réplicas.

"Recordemos que ocurrió dentro de la  Placa de Cocos, fue un sismo intraplaca, fue un sismo de magnitud 8.2, es un sismo muy grande y lo que provoca un sismo tan grande es un reacomodo de esfuerzo en la zona aledaña", explicó la funcionaria y después agregó que se realizan investigaciones para detallar la relación entre sismos, que podrían llevarles meses.

Tanto estudios del SSN y la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), como de la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL) también midieron ayer la forma en que se percibió el sismo.

Se estima que se sintió desde Aguascalientes hasta Chiapas y que lo percibieron 52 millones de personas, 24 millones con una intensidad de moderada a fuerte, en tanto que 18 millones lo percibieron de fuerte a muy severo.

El epicentro de Pinotepa Nacional, recordó Pérez Campos ha registrado sismos considerables desde 1937 y algunos de los más fuertes ocurrieron en 1968, 1978, 1982,  1995, 1996 y en 2012 que alcanzó un magnitud de 7.5.

En cuanto a una relación entre los sismos ocurridos el 7 y 19 de septiembre la especialista explicó que varias investigaciones nacionales e internacionales ya han descartado un vínculo entre los dos fenómenos.

Lo que se debe de tener en cuenta es que en México se pueden generar movimientos de diferentes placas y que este tipo de fenómenos, aunque son esperados, todavía no son predecibles por la ciencia.

"¿Van a seguir ocurriendo?, sí. ¿Cuándo?, quien sabe. Los sismos no se pueden predecir, sabemos que pueden ocurrir sismos grandes, de magnitudes arriba de 8 como el vivido el 7 se septiembre en las costas del Pacífico Mexicano, ¿cuándo será el próximo?, eso no lo podemos saber, la ciencia todavía no puede predecir cuándo", agregó.

Aunque los sismos del 19 de septiembre de 2017 y el 16 de febrero de 2018 tuvieron una magnitud similar y el más actual fue una décima mayor, los daños en el centro del país fueron mayores el año pasado pues el epicentro fue más cercano, en Morelos.

Para este año el SSN obtuvo un recurso designado por el Congreso de 106 millones de pesos, que se emplearán principalmente para un centro de estudios a ubicarse en Hidalgo y que servirá para hacer un reflejo de los estudios que ya realizan en la Ciudad de México.

Uno de los proyectos a futuro, agregó Pérez Campos, está la instalación de 52 estaciones de monitoreo a instalarse en diferentes partes del país en donde actualmente no tienen posibilidad de medir los movimientos.

Descartan daños en Puebla

En el caso de Puebla, la Secretaría General de Gobierno (SGG) descartó hacia el mediodía de este sábado que se contabilizaron daños en el interior del estado por el sismo de ayer y sus centenas de réplicas.

Mientras que la Unidad Operativa Municipal de Protección Civil indicó que sólo se reportó el desprendimiento de una fachada de una casona abandonada en la 22 Poniente y 5 de Mayo, así como operativos aún en proceso en algunos templos.

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