Pese a que personajes como Manuel Bartlett Díaz, René Sánchez Juárez, Víctor Hugo Islas Hernández o Enoé González Cabrera, fueron candidatos de otros partidos en el proceso federal de 2012, el Partido Revolucionario Institucional no los ha expulsado y mantiene como letra muerta el artículo 63 de los estatutos del tricolor.

Pese a que el citado apartado señala que se considerará  la renuncia de un militante si es que éste decide ser candidato por otro partido político, la Comisión de Justicia Partidaria del Revolucionario Institucional no ha hecho pública la expulsión de ningún priísta en Puebla.

En el proceso electoral de 2012, Manuel Bartlett Díaz, gobernador de Puebla del 1 de febrero de 1993 al 31 de enero de 1999, fue postulado por el Partido del Trabajo al Senado de la República, y aclaró que no renunciaría a la militancia en el PRI, partido en el que desarrolló su carrera política.

Su suplente, René Sánchez Juárez, líder de la FROC-CROC y ex regidor del ayuntamiento de Puebla, tampoco ha sido expulsado del partido pese a que en el 2012 se registró en fórmula con Bartlett Díaz para el Senado.

En la misma situación se encuentran Víctor Hugo Islas Hernández y Enoé González Cabrera, quienes integraron la fórmula de Nueva Alianza al Senado de la República. Aunque ambos lograron posiciones como diputados locales por el PRI, optaron por abandonar al instituto tricolor.

Tras la derrota electoral, Islas Hernández regresó al Congreso local para concluir su periodo como legislador plurinominal, pero como integrante de la bancada de Nueva Alianza.

En la misma situación se encuentran Carlos Meza Viveros e Ignacio Mier Velasco, quienes se han caracterizado por criticar al Revolucionario Institucional, además de que en el proceso pasado tuvieron acercamientos con la extinta coalición Movimiento Progresista (PRD, PR, MC), pero nunca concretaron una candidatura.

Incluso, este año Mier Velasco –ex dirigente estatal del tricolor- llegó al Congreso del estado debido a que se encontraba dentro de la lista de diputados plurinominales, sin embargo nunca formalizó su adhesión al grupo legislativo del PRI.

Para el proceso electoral local, la situación se repitió con Alejandro Oaxaca Carreón e Iván Conrado Camacho Moreno, diputados locales que fueron postulados por el partido estatal Pacto Social de Integración (PSI).

Así como Miguel Ángel Ceballos López, priísta que fue designado como candidato del Partido del Trabajo (PT) a la presidencia municipal de Puebla. A semejanza de Bartlett Díaz, Ceballos López aseguró que no renunciará a ser militante del Revolucionario Institucional.

Otro caso que podría considerarse como una burla a los estatutos del PRI es el de Julio Leopoldo de Lara, priísta que después se adhirió a Nueva Alianza y que actualmente es el líder de la organización Factor Ciudadano, la cual solicitó su registro como partido político ante el Instituto Federal Electoral.

A estos casos se suman los diputados Elvia Suárez Ramírez, Zenorina González Ortega, Juan Manuel Jiménez García y Ramón Felipe López Campos, quienes se declararon independientes pero advirtieron que no dejarán que el Comité Directivo Estatal, a cargo de Pablo Fernández del Campo, inicie un proceso de expulsión en su contra.