El ayuntamiento de Zurich presentó esta semana unas cabinas que estarán situadas en la vía pública y servirán para tener sexo. Con esta medida, las autoridades de la urbe más poblada de Suiza prevén regular el ejercicio de la prostitución y mejorar las condiciones de trabajo de las sexoservidoras.

Dichas cabinas serán operadas por el Departamento de Bienestar Social de Zurich, en coordinación con la policía y el Departamento de Salud. Estarán situadas en la vía pública, pero en una zona alejada del centro de la ciudad. Sólo las sexoservidoras y quienes decidan contratar sus servicios tendrán acceso a dicha área, y no se permitirá el paso del público en general.

El Departamento de Bienestar Social señala que ha impulsado esta medida para proteger la salud, situación social, e integridad física y mental de las trabajadoras del sexo. Asimismo, busca resguardarlas de las amenazas y actos de hostigamiento a que se exponen estando en la vía pública.

Las cabinas estarán abiertas todos los días, de las 7 de la tarde a las 5 de la mañana. Para utilizarlas, cada sexoservidora deberá contar con un seguro médico y adquirir una licencia que costará 30 euros. Cada vez que utilicen una de las cabinas, deberán cubrir una cuota de 4.5 euros.

La dinámica será la siguiente: las trabajadoras sexuales estarán situadas a la entrada de la zona de cubículos, y en ese sitio recibirán a sus clientes para acordar el tipo de servicio y costo. Posteriormente, el cliente llevará su auto hasta una de las cabinas, y será dentro del vehículo donde las trabajadoras prestarán el servicio previamente acordado.

Habrá presencia importante de la policía en zona para resguardar el orden. También habrá un cubículo de atención médica, para ofrecer orientación y atender cualquier emergencia.  De esta manera –dice el ayuntamiento de Zúrich- se protegerá a la población de los efectos negativos del ejercicio de la prostitución.

Serán siete las cabinas que entrarán en funciones a partir del 26 de agosto, y las autoridades dicen que entre 30 y 40 trabajadoras sexuales resultarán beneficiadas con este servicio. La medida fue aprobada por votación popular en marzo de 2012, pero es hasta hoy que el programa ha logrado implementarse como se tenía previsto. 

Según Michael Herzig, responsable del Departamento de Bienestar Social, la medida va a “redefinir las reglas de la prostitución”. En el pasado, las autoridades de Zúrich limitaron el ejercicio de esta práctica sexual; pero sólo consiguieron que las sexoservidoras resultaran acosadas, y se también se fomentó la actividad de los proxenetas, según informa el diario The Telegraph. La instalación de cubículos especializados ya ha sido probada antes con éxito, en las ciudades alemanas de Colonia y Essen. (Twitter: @rolandolino)