La Procuraduría General de Justicia (PGJ) no cuenta con pistas claras sobre el asesinato de la mujer degollada en el consultorio Zhen Jiu, en la colonia Anzures, pues aunque mantiene la hipótesis de que posiblemente se trató de un asunto pasional, tampoco ha descartado otras líneas de investigación.

Fuentes extraoficiales señalaron que, en las primeras indagatorias, se descartó la participación del novio de la joven Maritza Hernández Hernández, de 23 años, así como la del médico propietario del consultorio, ubicado en calle 12 Sur número 3908.

De acuerdo con estas versiones, la noche del martes —cuando todo ocurrió—, la pareja sentimental de la víctima acudió a recogerla a bordo de su vehículo color negro. Sin embargo, se sorprendió al ver los sellos de la PGJ. En esos momentos, fue interceptado por agentes ministeriales que le solicitaron presentarse ante las autoridades para rendir su declaración.

El novio dijo al agente del Ministerio Público que desconocía lo ocurrido y que su pareja le había comentado la noche anterior que el doctor no iba a trabajar el martes, pues se iba a ir a un velorio.

Después de una serie de preguntas, la autoridad comprobó que el joven no tuvo nada que ver y lo dejó marcharse bajo las reservas de la ley.

Horas más tarde, el médico se presentó voluntariamente a declarar y confirmó que había estado en un velorio en el estado de Veracruz, por lo que de esta manera las autoridades descartaron la participación de los dos hombres en el homicidio.

No obstante, aunque la hipótesis del crimen pasional no es muy fuerte, ésta no sido desechada por la forma en que la mujer fue encontrada en el inmueble: semidesnuda y con las prendas manipuladas.

Mientras las autoridades no tengan pistas más claras, agotarán todas las líneas de investigación posibles hasta esclarecer la muerte y dar con el responsable.

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