La larga noche de Alejandro Armenta

  • Fernando Maldonado
El rebelde senador ha obtenido la peor parte en términos de posicionamiento

El senador Alejandro Armenta Mier tiene un as bajo la manga del que nadie sabe en esta, la última partida del juego de baraja en la disputa por el poder, o de plano perdió la perspectiva en el proceso post designación del candidato al gobierno de Puebla.

En diversos círculos corre la versión de que el proceso de expulsión en el Movimiento de Regeneración Nacional podría comenzar en cualquier momento, si es que se consigue consolidar las pruebas de su presunta colusión con grupos antagónicos a Morena.

De confirmarse, se convertiría en el primer militante de la talla política de Armenta Mier en activo en ser expulsado, lo que sentaría un precedente nacional y negativo.

Armenta Mier quien junto a Nancy de la Sierra, su compañera en la Cámara Alta, perdieron el proceso interno para elegir al candidato, se colocaron en la línea de confrontación con la dirigencia nacional de ese partido y de Yeidckol Polevnsky y, de paso, llenó de magma el primer proceso interno del partido del Presidente de la República.

Los niveles alcanzaron al secretario General de Gobierno, Fernando Manzanilla Prieto, a quien acusaron de acosar a legisladores y militantes que no estaban de acuerdo con la designación de Luis Miguel Barbosa Huerta, el candidato que está por comenzar campaña el próximo fin de semana.

Sin prueba contumaz, los dichos de los declarantes fueron colocados por el propio funcionario en el gobierno interino en el tapete de un pleito partidista para el que, dijo Manzanilla, ‘son, en realidad, parte de una campaña de golpeteo político, en el cual no tengo tiempo ni interés de participar’.

El responsable del área encargada de mantener la gobernabilidad en Puebla es visto como un probable competidor en los comicios de medio término y ese sólo contexto obliga a ubicar los ataques con una perspectiva electoral futura, pues la crisis de otros partidos hacen pensar que como sucedió en 2018, quien haya de ser postulado por el partido del presidente, podría ser ganador casi en automático.

Pero también hay otra lectura que supera el capítulo local. Detrás del pleito en el interior de Morena hay impulsos con propósitos futuristas que alcanza niveles de índole nacional. Polevnsky por un lado y Ricardo Monreal, por el otro buscan colocar en la nómina de gobernadores a sus cercanos con una clara intención de influir en el proceso sucesorio de 2024.

Armenta Mier se convirtió en la punta de lanza de un grupo de senadores que buscará en próximos años pasar del escaño a la campaña, en la búsqueda del voto para hacerse mandatarios de sus propios estados, lo que hoy parece improbable luego del desenlace que tuvo el proceso interno de ese partido político.

El rebelde senador ha obtenido la peor parte en términos de posicionamiento. Su perfil no ha podido ser percibido como víctima del sistema y en cambio, sus adversarios han tenido la habilidad para destacar ángulo pocos favorable. El consultor en discusiones digitales, Arturo Alfaro Galán dijo que casi dos milllones de personas fueron alcanzadas en redes sociales.

El delegado presidente de Morena en Puebla, Mario Bracamonte y Carlos Figueroa secretario de Derechos Humanos abrieron ayer una rendija a través de la cual se ve otro ángulo de la ruptura: el reparto de cargos en el gabinete, lo que trastoca un principio central del movimiento de no buscar cargos, sino motivos.

Armenta Mier deberá encontrar la forma de recomponer todo lo hecho, o de lo contrario le espera una larga noche en su partido político.

@FerMaldonadoMX_

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Fernando Maldonado

Estudió Ciencias Políticas y ha trabajado en prensa, radio y televisión. Ha publicado en diversos medios. Autor de la columna Parabólica