La gobernabilidad democrática

  • Héctor Olmedo
En una democracia se deberán gestionar las inconformidades sociales a fin de evitar polarizaciones

En este artículo reflexiono sobre el término gobernabilidad, y su relación con la estabilidad democrática, un concepto, que en muchas ocasiones ha sido utilizado de manera indiscriminada, e incluso por algunos sectores de manera peyorativa para referirse al ejercicio del poder como una cuestión autoritaria por parte del Estado.

Primeramente, quisiera comenzar por asociar los términos. Para ello es preciso entender, ¿qué es la gobernabilidad? De manera sucinta, el surgimiento de este concepto puede identificarse en el siglo XX, específicamente en el bloque occidental tras las crisis culturales y políticas. Su referencia más explícita puede identificarse en el informe realizado por la Comisión Trilateral y la crisis sobre la gobernabilidad.

Ahora bien, la democracia como forma de gobierno, requiere de mecanismos que le permitan funcionar, es decir de un sistema electoral, que garantice que la búsqueda por el poder se dé en condiciones de armonía y aceptación de resultados, es en este punto donde ambos conceptos confluyen y se relacionan. La democracia en una sociedad es pieza clave para crear condiciones de gobernabilidad.

El sistema electoral y la forma en la que se organiza la renovación del poder en una comunidad política, determina la existencia o no de conflictos políticos; de aquí la importancia de fomentar en una sociedad los valores propios de una democracia, como la tolerancia, la pluralidad y la igualdad.

No es fortuito, que en países que han desarrollado mecanismos sólidos de democracia, exista una mayor gobernabilidad y una disminución de los conflictos políticos; sin embargo, también es necesario precisar que esto no significa que no haya inestabilidades. Por supuesto que las habrá, pero la capacidad de una democracia es precisamente ordenar y gestionar las inconformidades sociales, de tal manera que la sociedad no se polarice y el gobierno pueda ejecutar de manera normal sus actividades.

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Héctor Olmedo

Licenciado en Administración Pública y maestro en Ciencias Políticas por la BUAP; especialista en Derecho Electoral y Cultura Política. Se ha desempeñado en áreas de la administración pública federal y en órganos electorales federales y locales. Miembro de la Sociedad Mexicana de Estudios Electorales.